Proyecto Patrimonio - 2007 | index | José Angel Cuevas | Andrés Anwandter | Antonia Torres |
Autores |

 

 

 

La idea de "nación" en dos poetas chilenos contemporáneos:
José Ángel Cuevas y Andrés Anwandter


Artículo publicado originalmente en la Revista Documentos Lingüísticos y Literarios No. 28 / 2005,
del Instituto de Lingüística y Literatura de la Universidad Austral de Chile. Versión web:
http://www.humanidades.uach.cl/documentos_linguisticos/document.php?id=106

Antonia Torres A.
Periodista y Magíster (c) Literatura Hispanoamericana Contemporánea
Universidad Austral de Chile


 

 

RESUMEN
El presente artículo intentará dar cuenta de la manera cómo se ocupan de la idea "nación" dos poetas chilenos contemporáneos: José Ángel Cuevas (1944), en Proyecto de País, y Andrés Anwandter (1974), en sus Especies Intencionales. Dichos textos representan distintos momentos de la historia de la poesía chilena contemporánea y, presumiblemente, distintas formas de entender la "cuestión nacional". Nuestro interés, en el presente trabajo, es describir aquello que los mencionados poetas dicen al respecto en un momento histórico en que la dicha noción está siendo atacada y cuestionada desde varios frentes.

1. Antecedentes:

Pareciera ser que las reflexiones que suscita el problema de la identidad nacional han tenido históricamente espacio fértil en los textos literarios de muchas naciones latinoamericanas. Basta pensar en algunos de los textos más conocidos de Domingo Faustino Sarmiento, Andrés Bello o José Victorino Lastarria para corroborarlo. El interés por definir la "propia imagen" es más fecundo, por cierto, en períodos históricos de formación de las repúblicas o naciones, así como también en momentos de crisis o quiebres nacionales; procesos todos para los cuales los textos literarios han sido un espejo para poder orientar o re-formular los proyectos de futuro(1). Un ejemplo local lo constituye el Canto General (1949) de Pablo Neruda, una de las obras más emblemáticas para los procesos revolucionarios en toda América Latina; o el Poema de Chile (póstumo, 1967) de Gabriela Mistral. Esto por citar sólo a dos de nuestros autores paradigmáticos, los cuales se ocuparon del tema en un período histórico en que la constitución de las nociones de "país" o "nación" era ciertamente más sólida. Actualmente, y tras la crisis que nos impone la desaparición de estas nociones tan propias de la Modernidad, nos parece interesante revisar su tratamiento en momentos en que la "nación", tal como se conocía hasta hace pocas décadas, parece estar desintegrándose.

Para los fines del presente trabajo nos hemos situado en un marco conceptual propio del pensamiento contemporáneo proveniente, principalmente, de los denominados estudios postcoloniales. Éstos suponen algunas nociones como que la "nación" o la "cuestión nacional": 1) ha sido una permanencia en la literatura chilena y, especialmente, en la poesía; 2) es, actualmente, un territorio polémico en la cultura contemporánea. Su pertinencia hoy, desde la perspectiva del discurso postcolonialista, merece importante dudas (Rojo et al 2003), debido, en gran medida, a los tan citados "procesos de globalización cultural"; 3) es, siguiendo la nomenclatura de Anderson (1993), una "comunidad imaginada", ya que sus miembros pese a no conocerse todos entre sí, así como tampoco a su territorio, poseen una imagen mental de estos elementos que los cohesiona y hace sentir en comunión(2); 4) desde nuestra perspectiva, se define como una noción "mutable", en proceso de permanente construcción y reconstrucción (Larraín 2001) y que, por lo tanto, sus transformaciones corresponderían a rasgos propios del fenómeno identitario(3).


2. Breve contexto de la poesía chilena de los últimos 30 años:

Como afirman Galindo (2002), Epple (1988) y Bianchi (1990), entre otros, la lectura de la poesía chilena de fines del siglo XX presenta dificultades que no estaban presentes en la obra de los poetas de las promociones anteriores. El golpe de estado habría instalado, entonces, nuevas problemáticas de las cuales da cuenta la poesía del último cuarto del siglo XX y comienzos del XXI en nuestro país. Aquella poesía que se hacía cargo de los procesos históricos, al modo de un Neruda en Canto General o de un Cardenal en Homenaje a los indios americanos hace crisis. "Al fin y al cabo cuando la visión de la historia se percibe como fragmentaria la escritura no puede sino (re)producir esta fragmentación" (Galindo 2003). Durante el período descrito la mayor parte de los poetas chilenos elaboran una poesía que Juan Armando Epple (en Yamal 1984) ha denominado "poesía como praxis re-constructora". Esto es, poéticas que intentan re-organizar, re-componer y re-articular una tradición e historia que habían sido violentamente truncadas con la irrupción de la dictadura. Ésta última, "interrumpió la relación de continuidad de su desarrollo cultural [del país], caracterizado hasta entonces por un diálogo abierto con la tierra, la historia y las tradiciones" (Epple en Yamal 1984: 62). En definitiva, los poetas del período se caracterizan porque: 1) Acentúan lo local y parcial en su obra por sobre los proyectos totalizadores, "como si se hubiese producido una clausura a toda posibilidad de un discurso totalizante o globalizador, acentuando claves de inestabilidad y desconfianza" (Galindo 2003: 196); 2) La realidad se ha vuelto problemática, desintegrada e inestable; por lo tanto, un fenómeno difícil de asimilar y de representar. Producto de ello son el experimentalismo en lo formal, la escritura fragmentaria, la búsqueda de nuevos / novedosos soportes de expresión, etc. Ej. Juan Luis Martínez y Raúl Zurita y grupo CADA(4) . 3) En muchos de los poetas del período hay una voluntad por re-fundar una identidad particular y colectiva, en un contexto en que la represión social impuesta por la dictadura impide o, al menos, dificulta los proyectos socializantes de cualquier tipo. Éstos, intentan vincular los elementos de una tradición cultural disgregada; la cual había recién comenzado a definirse (a fines de los ´60) sobre la base de modelos sociales nacionales precedentes marcados por valores como la identidad local, la resistencia cultural, la solidaridad y la justicia social.

Por lo tanto, si aceptamos la existencia de un nuevo discurso crítico propio de la poesía contemporánea chilena ¿cuál sería, entonces, el lugar que la idea de "nación" ocupa en él y cómo se construye ésta? A partir de la lectura de dos poetas chilenos actuales que se han ocupado del tema, intentaremos elaborar algunas de estas respuestas.

4. El Proyecto de País de José Ángel Cuevas

El poeta chileno José Ángel Cuevas (Santiago, 1944) constituye uno de los casos más interesantes a la hora de poetizar los procesos políticos -particularmente los de la izquierda- acaecidos en nuestro país a partir de 1973 y hasta la fecha. Una primera parte de su obra aparece durante el periodo mismo de la dictadura; y otra durante aquél período denominado de la "post-dictadura". En Proyecto de País (1994), un extenso poema unitario, Cuevas plantea el debate sobre la actual posibilidad de la utopía de la izquierda a partir del supuesto fracaso de su proyecto. Es decir, está planteada no sólo el "lamento" de dicho fracaso, sino también el carácter moral o ético del modelo capitalista / neoliberal que se impone como triunfante. En el texto, la "nación" es descrita metafóricamente como un "Hospital" en deterioro y decadencia, tal como lo estaría tras una guerra. Una institución enferma y agónica en donde reina la muerte. El escenario en donde se moverá todo el poema es el de un país derrotado, una república devastada y transformada completamente tras una lucha. La "nación" pareciera ya no existir de la manera como tradicionalmente se le entendía. En "Proyecto de País" está reducida tan sólo a sus representaciones: "un film, un canto fúnebre", nos dice el hablante. Representaciones de una escena en donde se ha instalado el miedo.

Representaciones en permanente desintegración y re- construcción, a la manera de un texto:

(...) Ya no se puede hacer nada real
todo será
deshecho por el peso del olvido
en los países locos. (...)
/ / uno que fue chileno
ya no es nada,
un país que el sol calienta algunos meses del año,
un film
un canto fúnebre".
.......................................................... (p. 10)

Y más adelante,

(...) el país es un inmenso texto,
que los posmos van a desconstruir
unos cánticos materialistas-históricos"
.......................................................... (p. 10).

Quien habla, en tanto, es anacrónico y lo hace como "desde otra esfera". Es el único representante (y, probablemente, sobreviviente) de una institución llamada la "Liga Popular L.L.P.P.". Algo así como un club social, sociedad de socorros mutuos o como tantas otras instituciones similares hoy extintas en nuestro país. Una suerte de hablante epigonal, último representante de una época y de un modo de ver el mundo; modo que intenta, en vano, rescatar. Es por ello que de manera permanente se nombra a todas las instituciones emblemáticas agregándole el prefijo "ex": "ex - poeta", "ex - Chile", etc. Si el poeta era, tradicionalmente, el llamado a hacer profecías, anuncios o, incluso, recrear una arcadia perdida, en este nuevo escenario, el poeta no puede constituirse ni escribir como antes. Ahora, entonces, habla desde un "cuando era poeta".

Por otra parte, la mirada hacia la "historia" y sus discursos es crítica, en tanto ésta construye representaciones falsas y no puede dar cuenta de un pasado (ni de un presente). Aquí la historia y sus "grandes hitos" no existen. Sólo se reducen a un juego, a un discurso mentiroso que nos impone la "maqueta" de la realidad. Un juego de apariencias -como el póker- de caras neutras que no dicen nada. Lo única real es la extensión indefinida y medio onírica de un espacio natural e ideal: el campo.

La única verdad
es el Campo y sólo el campo
el campo es la extensión
el campo es Dios
no los aposentos apilados
maquetas de cartón piedra
porque esta vida no es en serio
es un juego
no hubo ninguna cochina independencia
Maipú
es una mujer de pelo negro y medio puta
lo que pasa se lo llevó el viento
TODO NO ES MAS QUE UNA PARTIDA DE POKER
............................................... .. .. . . .. .. .. .. .. . . ............. (16)

Pese a todo, el hablante no ha renunciado a un proyecto, a una utopía. Es por eso que en él subsiste una tenue esperanza en la idea de "nación" y en sus instituciones y, más que atacar a este nuevo modelo de realidad, ataca a su discurso. El modelo neoliberal de la dictadura es representado como una "patria de plástico", de "luces de neón" y mercaderes que oculta -tras su fachada de aparente bienestar y progreso económico- la pobreza extrema, el horror y la desmemoria. El "ex - poeta" no se adecua a este modelo y su correspondiente discurso que "atonta" a sus espectadores. Recurrente es, por esta razón, la idea de la historia de la nación como olvido(5). Chile constituiría una idea difusa de algo que fue. Un "ex - país" con "ex - ciudadanos". Un país que ya no recuerda quién era, producto de la muerte, la tortura y el saqueo. Su historia es

(...) un par de cachuchazos
varios robos
la historia de unas putas que hicieron plata,
muertos de poca monta,
lo único que quieren es olvidar
olvidarse de sí mismos (...)
.......................................................... (24)

No obstante ello, la fe en el poema como lugar imaginario y edénico en el que sí tiene lugar la verdadera "nación" es también un tema en Proyecto de País. De hecho, las frecuentes intertextualidades con poéticas anteriores como, por ejemplo, con la de Pablo de Rokha nos dan cuenta de ello. Si seguimos una de las tesis iniciales del presente artículo que nos dice que los textos poéticos han contribuido tradicionalmente a la construcción de una idea de "nación", la Epopeya de las comidas y bebidas de Chile (1954) constituye un caso paradigmático de un tipo de poesía y de un tipo de república correspondiente. Creemos que su referencia en el presente poemario no es casual, y que responde a la búsqueda, algo nostálgica, de una idea de "nación" en la poesía de otra época. Por lo tanto, añoranza y recuerdo de un país extinto. En Proyecto de País se nos invita a este espacio edénico:

Venid todos a este parque
aquí sí hay asador de maqui
en las riberas del boldo y la patagua
y codornices ricas de río (...)(6)
.......................................................... (41)

Incorporar citas (intertextuales) a una poesía de otro tiempo que es, por lo tanto, reflejo de un país también de otro tiempo y del cual el hablante tiene nostalgia, tiene una explicación tal vez tan lírica como la mencionada cita a De Rokha: en un país como el que nos describe Cuevas (desdibujado, en crisis y corrompido) la "nación" sólo es posible en el texto poético y, de ser necesario, pude ser re-construida en virtud de un poema. Es por ello que a nuestro juicio, en este libro de Cuevas (al contrario de lo que veremos más adelante en Anwandter), la fe en la palabra persiste. Si bien los discursos pueden ser un "arma de doble filo" (basta ver cómo "prestan servicio" a la dictadura), Proyecto de País apuesta por un discurso de la autenticidad que tiene la capacidad de mirar atrás su historia y que lo hace a través de la poesía. Por ello la crítica a las corrientes contemporáneas del pensamiento como el postmodernismo o la desconstrucción y su jerga; ya que éstas intentan explicar la desintegración con escepticismo y desconfianza en el lenguaje:

Pasan los Trenes Cargados de Pillipeuco y Pirihueico
llenos de banderas chilenas (que los posmos han (re)des-
construido
ahora andan diciendo que
es su propio cuerpo
y otras locuras)
.......................................................... (37)

El "Ex -poeta", entonces, no ha renunciado del todo a la utopía. "Cuevas prefiere arriesgarse con un proyecto no sólo íntimo, un proyecto distinto de obra /un proyecto de obra distinta, sino además, uno global y colectivo, un Proyecto de país que no es ni más ni menos que la imaginación de una utopía, en momentos en que se dice que han terminado, que ya no existen, y que están, supuestamente, venidas a menos" (Bianchi 1990: 26).

5. Especies Intencionales de Anwandter: la Nación apelante:

Andrés Anwandter es un representante de la denominada "generación de los ´90" o, también llamada de "los náufragos"(7). Es decir, aquella promoción de poetas chilenos nacidos a fines de la década de los `60 o primera mitad de los `70 y que comienza a publicar durante la década de los `90. El contexto histórico y social en el que se sitúan sus obras es el de la llamada "transición a la democracia". Este período está marcado por un clima político y social en que, al igual que en el de la "post-dictadura", "la pérdida de oposiciones altamente determinantes ha producido un clima de igualación discursiva permanente" (Bello 1998). Un "espacio del desconcierto", siguiendo la nomenclatura del mismo autor de la cita. La generación a la que pertenece Anwandter observa con escepticismo y desencanto el Chile actual; y, paralelamente, sus poetas comienzan a escribir en el momento histórico en que aparecen los primeros experimentos "postmodernos" en el ámbito cultural chileno. Dato no menor, si observamos que son precisamente estos "experimentos" los que Cuevas critica en su libro. La de los ´"Náufragos" es una generación más heterogénea y "abierta" en términos estéticos, y se caracteriza principalmente por hacer una de sus problemáticas principales el hecho o acontecimiento de la creación. Ello a través de un "yo" que no se disuelve por completo (y, por lo tanto, más constituido que el de la promoción anterior), y que, además, sabe mediatizada su mirada de la realidad (Bello 1998). Es en este marco en donde se sitúa Especies intencionales (2001), libro -a nuestro juicio- imprescindible para comprender esta generación. De manera insistente, su hablante retrata a la "nación" como "sedimento de diversas construcciones superpuestas que encubren una densa fantasmagoría: en varias piezas de Especies intencionales el poema es el discurso de un espíritu, más bien de una osamenta, que yace bajo la materialidad de estas sucesivas destrucciones y emplazamientos" (Bello 2001). Para Anwandter, la dinámica de asentamiento, desconstrucción y reconstrucción de aquello que aquí interpretamos como la "Nación" deviene, necesariamente, en el "olvido social". Por ejemplo, los nuevos edificios o carreteras son metáfora de "la nueva nación" construida sobre los escombros y la memoria de "lo viejo". En esa memoria reside la verdadera historia (por ejemplo, los huesos de los desaparecidos). Veamos uno de los poemas más emblemáticos en este sentido:

SI ESCARBAS EN LO ESCRITO ENCUENTRAS HUESOS
pero el suelo de la historia es pavimento
la vereda que transito al elegir cada vez
un oficio que alcance -veloz- el futuro
molicie del insomnio nacional

.. .. .. .. .. . . .. .. .. . .. .. . .. .Olvida
el cerebro de Chile en barbecho me dicen
los inmensos vertederos que el encuadre
de los hechos excluye:
.. .. .. .. .. . . .. .. .. . .. .. . .. .fascinado
por las bodas de un ídolo del teatro
la ubicación para el nuevo zoológico
el turbio negocio de las sanitarias.
.. .. .. .. .. . . .. .. .. . .. .. . .. .. . .. . .. . .. (43)

En el texto "Reparaciones", el hablante es, precisamente, un "enterrado - olvidado", es decir, un "desaparecido". El olvido o ignorancia nacional de él es, al mismo tiempo, producto de la modernidad (una "carretera hacia el futuro"):

Los bulldozers que remueven cada tanto
estos suelos para hacer otro camino
hacen temblar mi osamenta.
.. .. .. .. .. . . .. .. .. . .. .. . .. .Las noticias
la destierran y la vuelven a enterrar
.. .. .. .. .. . . .. .. .. .. . .. .. .. .. . .. .. . .. (45)

Al igual que en Cuevas, la "nación" que se nos ofrece en las representaciones tradicionales de la realidad (ej. medios de comunicación) es una copia inexacta de ésta. La verdadera "nación" se revela como una fotografía debajo de ella (realidad = tierra) y apenas logra asomarse y mostrarse. La foto de los desaparecidos en la solapa de la madres (en el poema "Ceniza") se extingue del mismo modo que su recuerdo en la memoria de Chile ("Fantasma de fantasma, fotocopia / que mira, ignora, inquieta, cada vez / más tenue en la solapa de su madre (...) p. 47 . Al contrario que en Cuevas, en Especies intencionales se desconfía de la eficiencia de la palabra y, por ende de la poesía (= canción) como instrumento para recuperar la memoria (la historia de la "nación"). Es decir, los hablantes de ambos libros creen en la existencia de una "nación", que la que se nos oferta es falsa y que la verdadera sólo es recuperable por medio de la memoria; pero Anwandter, al contrario que Cuevas, es escéptico en creer que la palabra poética es la llamada a lograrlo. En Especies intencionales, como en otros muchos libros de esta generación, también la desconfianza en el lenguaje es una constante.

En Anwandter, la naturaleza y sus elementos parecieran ser materias que de manera inquietante guardan vestigios, huellas de la historia de la "nación"; y que a su vez la encubren (la cordillera, el mar, la ceniza, etc.). La bandera, en tanto, es apenas una sábana arrugada que no logra representar al verdadero "país". Veamos el texto "Pabellón":

La porción asignada al color
azulado del cielo es apenas

un tercio del trozo que cubre
el color de la sangre, a su vez

la mitad del terreno. La nieve
blanquea los cerros sobrantes

de muertos recientes y cóndores
lentos que rondan sus huesos.

¿Es posible arreglar los colores
del país como un juego de prismas

aislados y en orden? Algunos
quisieran volver a las franjas

de anchura pareja a lo largo
de toda una cinta, o poder

elegir entre varios colores
en la carta de ajuste. (...)
Es preciso sacar de inmediato
la bandera de la artesa y encumbrarla

bajo el sol despiadado: una sábana
que alisa sus pliegues al viento
.. .. .. .. .. . . .. .. .. . .. .. . .. (50)

Las porciones de los colores no "calzan" o no "coinciden" con lo que quisieran simbolizar. El hablante compara el país actual con aquél en que las franjas eran todas iguales (la "patria nueva" de la Independencia, o "Chile nuevo" del proyecto de la UP). Entonces, ¿es posible cambiar / mover los colores (la "carta de ajuste") y, de este modo, cambiar la historia y recuperar la memoria de esta "nación"? Aquí aparece nuevamente, del mismo modo que en otros poemas del libro, la idea de "puzzle" y realidad. En esta sección del poemario lo hace para mostrarnos que si la idea "nación" reside en el texto o discurso (= en el puzzle), entonces es posible transformar la "nación" a través de los desplazamientos que se hagan en él. Otra muestra de la desconfianza en los discursos, aún cuando éstos sean los de la poesía (y aquí otra diferencia con Cuevas). En general, el sujeto de Especies intencionales se cuestiona permanentemente durante el libro qué es lo cierto y que es lo aparente (la vigilia / el sueño, las geografías difusas, etc.), ya que es justamente el panorama que la ha tocado habitar: la relatividad con que se nos da cuenta de la historia reciente, la relatividad de las señales de la ciudad (en "Encuesta"), la relatividad con que se "maquillan" las movidas en el tablero político nacional (en "Pabellón").

En síntesis, y aún cuando ya se han deslizado algunas de las conclusiones, quisiéramos cerrar nuestras reflexiones con las siguientes ideas. En las actuales condiciones socio-históricas del país -propias de los tan actuales fenómenos de "globalización"- creemos que la poesía puede llegar a constituir una empresa política, en tanto pone en el debate (social, cultural o histórico) las nuevas o renovadas formas de entender la "nación". Por otra parte, y como ya hemos visto, existen varias diferencias entre las poéticas de Cuevas y Anwandter para abordar el problema de la "nación". Sin embargo, creemos que hay un básica y una fundamental: en tanto Cuevas posee al menos una idea de "nación" posible o "recuperable", Anwandter, en cambio, no parece tener siquiera un vago modelo de ésta que proponernos. Aún con diferencias generacionales, nos parece que el "país" o la "nación" representados en la poesía de algunos poetas chilenos constituye, justamente, una forma de re-escribirla. Si su imagen se ha desdibujado en el panorama cultural (tradiciones folklóricas, idiosincrásicas, culinarias, literarias, etc.) es posible, al menos, re-construirla y visualizarla en cierta poesía actual. Tal vez de este modo y desde ese lugar una nueva/vieja versión de "nación" pueda ser habitada.

 

 

 


6. Bibliografía:

- Anderson, Benedict. 1993. Comunidades imaginadas. México: Fondo de Cultura Económica.

- Anwandter, Andrés. 2001. Especies intencionales. Santiago: Quid Ediciones.

- Bello, Javier. 1998. "Los náufragos. Poetas chilenos de los `90". En Retablo de la Literatura Chilena (sitio web) de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile. http://www.uchile.cl/cultura/poetasjovenes/framenaufragos.html).

- ____________2001. "Superficie y memoria en Especies Intencionales de Andrés Anwander". En: Cyber Humanitatis, nº 18. Santiago: Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile. http://www.uchile.cl/ facultades/filosofia/publicaciones/cyber/cyber18/crea13b.html.

- Bianchi, Soledad. 1990. Poesía Chilena: (miradas-anfoques-apuntes). Santiago: Ediciones Documentas / CESOC.

- Cuevas, José Ángel. 1994. Proyecto de País. Santiago: Editorial América del Sur.

- De Rokha, Pablo. 1954. Antología. Santiago: Editorial Multitud.

- Epple, Juan Armando. 1988. "Nuevos territorios de la poesía chilena". La Poesía Chilena Actual (1960-1984) y la crítica. Selección e Introducción de Ricardo Yamal. Concepción: LAR.

- Galindo, Óscar. 2002. "Autoritarismo, enajenación y locura en la poesía chilena de fines del siglo XX. Zurita, Maquieira, Cuevas". América Latina Hoy, Vol. 30. Salamanca: Ediciones Universidad Salamanca.

- Godoy, Hernán. 1977. El carácter chileno. Santiago: Editorial Universitaria.

- Larraín, Jorge. 2001. La identidad chilena. Santiago: Lom Ediciones.

- Rojo, Grínor; Salomone, Alicia; y Zapata, Claudia. 2003. Postcolonialidad y nación. Santiago: Editorial Lom.

 

Notas

(1) Al respecto, el interesante libro-ensayo El carácter chileno (1977) del académico Hernán Godoy continua siendo aún hoy un referente importante en relación al tema, aún cuando se centre más en las cuestiones relativas al "carácter" o a la "identidad" del pueblo chileno (de manera homogénea), que en la imagen de país. No obstante, y aquí su interés, el libro constituye una interesante antología de algunos de los textos (literarios y de otro tipo) más representativos y significativos escritos a partir de algunos "hitos" o momentos históricos de nuestro país.

(2) Es decir, una "nación" existiría cuando "un número considerable de miembros de una comunidad consideran formar parte de una nación, o se comportan como si así ocurriera" (Seton-Watson, cit. por Anderson 1993: 23).

(3) En este sentido, nos adscribimos a la tesis de Jorge Larraín (2001) en relación al sinsentido de considerar la identidad nacional como "un alma inalterable y constituida de un pasado remoto, de una vez para siempre"; para concluir, más adelante, con que "es necesario aceptar, por lo tanto, que la chilenidad nunca ha sido algo estático, una especie de algo permanente, sino que ha ido modificándose y transformándose en la historia, sin por ello implicar una alineación o traición a un supuesto sí mismo esencial que nos habría constituido desde siempre" (Larraín 2001: 272). En la misma línea apunta Anderson (1993) cuando nos dice que la "calidad de nación" es un "artefacto cultural" de una "clase particular".

(4) La aparición de esta "ruptura artística", de sus autores y de sus correspondientes obras corresponde a la denominada "Neovanguardia". Éstos lo hacen, según Bello (1998), "con la intención de alejarse de la retórica contingente que ocupaba parte del espacio de la creación (en tanto retórica) y de cierta representación maniqueísta de la realidad. Todos ellos discursos artísticos que intentan intervenir el 'cuerpo doloroso' de la realidad".

(5) Vale la pena citar nuevamente aquí a Anderson (1993), quien acertada y oportunamente anota a pie de página que "Ahora bien, la esencia de una nación está en que todos los individuos tengan muchas cosas en común y también que todos hayan olvidado muchas cosas" (Anderson 1993: 23-24, el subrayado es nuestro).

(6) Compárese con los siguientes versos: "Y, ¿qué me dicen ustedes de un costillar de chancho con ajo, picantísimo, asado en asador de maqui, en junio, a las riberas del peumo o la patagua o el boldo que resumen la atmósfera dramática del atardecer lluvioso de Quirihue o de Cauquenes (...)" (de Rokha 1954: 396 - 397).

(7) Revisar el trabajo del poeta y académico Javier Bello (1996) en donde emplea, por primera vez, la denominación.

 

 

________________________________
Antonia Torres A. En poesía ha publicado Las Estaciones Aéreas (Ediciones Barba de Palo, Valdivia, 1999), Orillas de Tránsito (Ediciones Secretaría Regional Ministerial de Educación Región de Los Lagos. Santiago, 2003) e Inventario de equipaje (Cuarto Propio, Santiago 2006). También la antología Ocio increíble. Primer Concurso Nacional de Poesía Joven Enrique Lihn, selección y prólogo (Ediciones Barba de Palo y El Kultrún, Valdivia, 2000).


 

 

 

Proyecto Patrimonio— Año 2007 
A Página Principal
| A Archivo José Angel Cuevas | A Archivo Andrés Anwandter | A Archivo Antonia Torres | A Archivo de Autores |

www.letras.mysite.com: Página chilena al servicio de la cultura
dirigida por Luis Martinez Solorza
e-mail: letras.s5.com@gmail.com
La idea de "nación" en dos poetas chilenos contemporáneos: José Ángel Cuevas y Andrés Anwandter.
Por Antonia Torres A.