yéndose la muerte
e dios le abra el alma
mio çid
la muerte del pueblo, de dios
inútil preguntar cuál primero
si la del dios o la del pueblo
y si en un muerto y en otro
misma voz habla lo mismo en off
incluso con nombre de patria
sobrevino, y hay quien aun se emborracha
de euforia lírica, de arte, por caso
o caída, marcial o patrimonial; otro
acicala el cadáver en cada liquidación de temporada
predicando lenta [pero] suculenta resurrección; otro
modo de salvar entre comillas chauchas
de entre las mortajas putrefactas
y aun hay quien traduce Vaterland sin traducir
y aun hay quien ansía rematar al (cadáver del) padre, muerto
por antonomasia diciéndose en marchant (mientras
más lo matas, más te vuelve a penar
en conclusión
no hay conclusión – entre vida y muerte
lo que no habrá tenido lugar
de vuelta muda; entre
nomás, la puerta está
a
tal,
inscríbele la vívida nonada en el alm
