Proyecto Patrimonio - 2009 | index | andrés ajens |
Autores |

 

SÍ, SÍ, PALOMITAY: LA POESÍA  ESTÁ EN RUINAS

andrés aJens

 


RUIN A S DE PACHAKAMAQ
 

guaqueando en lo
agenciador del mundo
en ruinas – unpoemaleyéndose
mucho
después de su grafía

el oráculo resuena
imperioso, hoy, en inglés
meridianamente incomprensible
do not throw toilet paper on the floor 
sobre todo en ruinas

en lo esencial (que no hay), guaca
y poema operan
económicamente, don
por don, aumento de valor,
viejonuevos sacrificios, viejonuevas colecturas

el espaciotiempo de la guaca, pero (que
dicho sea de paso
puede ser el y aun lo guaca, dado
quechuaymara en wak’a
generosidad no predetermina)
y del poema que no hay
se  estira y/o se estrecha

allende su facturación en ruinas,
allende su artefacer
en sacrifacto asterisco, ahora
que chipara en esta paz
de una sola línea,
poema y guaca desmárcanse
en tácita entreurdidura – jirón
de aguayo hollando, hallándose
sin hallarse del todo, impagable
pago cinerario, vecino,
don de ande (aquende el don,
doña, guaca, ande).

 

(Callao, 2007)

 

 

YAPAS

a) ¿La cosa es con Neruda? (P. M. en traslación) *

 

Así, al comienzo, en todo “antes”, “antes” de todas partes del mundo, ruinas y ruinas: ¿permanece en esas ruinas, en esas piedras, la palabra del hombre que habló en esas piedras, en esas ruinas? Al menos en cuatro ocasiones Neruda poetiza las ruinas. Así,  de Rapa Nui […] El Partenón […] Ruinas de España también […]

Macchu Picchu, diferencia fundamental. Neruda descubre allí, sobre el “alto arrecife de la aurora humana”, aquello que los versos fundamentales de “Alturas de Macchu Picchu” señalan: “una vida de piedra después de tantas vidas”. Unanimidad sospechosa de los comentaristas de “Alturas de Macchu Picchu”, los que  conocemos, no todos, pero no pocos tampoco: Neruda habría descubierto, allí, en Macchu Picchu, la esencia del hombre o la explotación del hombre por el hombre en tanto hecho fundamental de la historia. La realidad de la explotación es indicada, como es evidente, en el poema. Pero esta humanidad universal o esta explotación, ¿constituye el descubrimiento esencial de Neruda en Macchu Picchu? Pues Neruda, al comienzo de las “Alturas de Macchu Picchu buscaba al hombre universal (Canto general, II): “Qué era el hombre? En qué parte de su conversación abierta / entre los almacenes y los silbidos, en cuál de sus movimientos metálicos / vivía lo indestructible, lo imperecedero, la vida?” Cuando él descubre “Macchu Picchu”, lo nombra, como lo indicamos, alto arrecife y alto sitio de la aurora humana. ¿Es posible que el poeta piense que la raza humana – o latinoamericana – tenga su origen en Macchu Picchu? Sería una torpeza gratuita atribuir este tipo de ingenuidad a Neruda. Entonces, ¿por qué el poeta poetiza Macchu Picchu de este modo? Permanencia de piedras y de ríos, permanencia de la piedra elemental y del río elemental, unión de la piedra, piedra indígena, y el río, lengua, pero lengua no indígena, lengua castellana. ¿Qué ocurre, cómo se encuentran o reúnen, cuando llega a Macchu Picchu, la tierra, la sangre, la piedra, el río y el lenguaje, elementos que el “antes y el después de la Historia separan en Latinoamérica? No otra cosa que: el mestizo se vuelve mestizo y en tanto tal proclama: “Yo vengo a hablar por vuestra boca muerta”, “Hablad por mis palabras y mi sangre” (“Alturas de Macchu Picchu”, XII). Neruda no se hace pasar por “representante”, voz vengadora de la raza vencida, tampoco de aquellos que fueron vencidos por los vencidos, los que, con su sangre, construyeron Macchu Picchu dejando allí su sangre. Sino más bien: “Yo vengo a hablar” […] Como sabemos, saber de Gabriela Mistral, el mestizo es pues mestizo cuando habla, cuando escribe su escritura. Encuentro, descubrimiento de Neruda, en Macchu Picchu, de su comunidad, en tanto el “antes”, el “después” de un imposible después, fundación de su comunidad, fundación de la comunidad mestiza de Latinoamérica, comunidad latinoamericana, comunidad de comunidades, unidad del “antes” (las “historias”) y el después (la “Historia”) y de otro posible después (las “historias”). De todos modos, su comunidad, no la comunidad humana universal. Comunidades de escritura en Latinoamérica, comunidades de escritura en todos lados. Fin de la universalidad, voz occidental del hombre, en realidad, comunidad en relación de traducción o, como preferimos decirlo, “comunidades en traducción”. La traducción entre comunidades, la traducción al interior de estas últimas, no limita la comunicación; al contrario, la hace posible; diferencias y restos inasimilables que nos permiten, ellos solos y sólo ellos, comprender al otro, ser otros, dejar de ser otros, otras, a otros, otras.  […]

 

* Patricio Marchant, “Atópicos”, “etc.” e “indios espirituales”, in Escritura y Temblor, Pablo Oyarzún y Willy Thayer editores, Cuarto Propio, Santiago, 2000. En nota al pie, los editores precisan: “No se pudo hallar el texto original en castellano. La traducción de Benjamin Sablereau al francés fue traducida para esta edición por Andrés Sjens” [sic].

 

b) ¿Y/o?

 

cf. No insista, carajo

 



Jirón Huancavelica, cuadra 2. Cercado de Lima

 

 

 

Proyecto Patrimonio— Año 2009 
A Página Principal
| A Archivo Andrés Ajens | A Archivo de Autores |

www.letras.s5.com: Página chilena al servicio de la cultura
dirigida por Luis Martinez S.
e-mail: osol301@yahoo.es
SÍ, SÍ, PALOMITAY: LA POESÍA ESTÁ EN RUINAS.
andrés aJens.