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GUILLERMO PIZARRO VEGA,
poeta descansa en paz
Por Arturo Volantines
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Nació en Ovalle (1948). Dibujante Técnico; artista plástico e investigador de historia regional. Colaboró con el Suplemento La Hoja Literaria, del diario La Provincia (1985 a 1989). Autor de los libros: Familias Fundadoras del Limarí (1997); Formación de la Sociedad Ovallina (1999); El Valle del Limarí y sus Pueblos (2001); La Villa San Antonio del Mar de Barraza (2005), entre otros. Numerario del Instituto Chileno de Investigaciones Genealógicas. Su obra poética aparece en “El Burro del Diablo, Arqueo de la poesía contemporánea de la Región de Coquimbo". En el prólogo del texto denominado: “Toponimia Indígena del Limari" señala y demuestra muchos de sus intereses patrimoniales y literarios, que lo hacían un intelectual imprescindible en los debates y seminarios del Norte Chileno.
Barraza
El viento de la tarde adormece la lejanía gris de los árboles,
Y un aleteo lejano de pájaros encumbra sus sueños de playas;
El paisaje es el de siempre: la desnuda primavera de verdes,
La longitud creciente de las impenitentes sombras,
Y un peregrinar eterno de voces tras los muros derruidos.
Hay que poner atento el oído, viajero del tiempo.
Esperar paciente la música silente de las caídas hojas,
Y cuando la quebrada tarde se marche tras los eternos cerros,
Mirar en el espejo del río la danza de plata que nos habla,
Y ver ahí... la nuestra historia, que pasa fugaz por sus márgenes.
Y de nuevo sentir en la cara el aroma dulce de los álamos,
El calor que nos sube ascendiendo de la tierra amada
Hasta cubrir de verdad y nostalgia los rincones del alma;
Y dejar después nuestros pasos libres...dejar que sean ellos avances
Para que en la página azul del agua se vuelvan a escribir nuestros nombres.
San Julián
San Julián de los vientos,
De recodos y nudos te vistes
Y luego te escondes tras las sombras de los árboles.
Más pronto te estiras como una serpiente perezosa
Y sales a tomar el dorado sol que te abriga la esperanza.
San Julián de los pesares,
Tu historia duerme colgada en los perennes cactus;
Esperando ser contada desde el nudo del silencio.
Silba aún el látigo en la penumbra de los tiempos
Cuando la noche trae un lamento desde los álamos,
Y una joven novia llora pintada de luna.
San Julián de los brujos y el encanto,
Cuánta leyenda guardas en tus arcas profundas
Y no hay testigos sino susurros que nos hablan.
Vuelan aves negras graznando al viento
Y el cielo se puebla de mensajeros del pasado
Así, hasta mañana cuando volvamos a vernos.
San Julián de los recuerdos,
De los idilios que esperaron arrobados tras las puertas
Cuando la noche fuera cómplice de secretas alianzas.
Y hoy, cuando salga la luna tras los silentes cerros,
Volverán translúcidos los amantes prohibidos,
Y una carroza tirada por dos caballos blancos
Irá dejando una estela de sueños por tus caminos desiertos.
La trampa del espejo
El espejo me devuelve una imagen quebrada,
Los reflejos me ciegan entrecruzándose
Cambiando los colores y luces como una caja de sorpresas,
Y como si nada...
Flotando desnuda aparece una mariposa encantada;
Una translúcida pompa inocente que se esfuma
Agitando sus falsas alas en el hueco del alma.
¿Cómo poder atrapar el eco azul del viento?
¿Cómo asir la sombra gris de un sueño?
Se derrama floreciendo una espuma de nieve
Y un arcoiris se desliza oscilando...trémulo
Como un solitario y lejano barco de flores.
Los pañuelos de colores juegan entrelazándose en
Una orgía cromática,
Desplegándose como una cascada,
Una dorada luz otoñal
Que quiebra con sus haces la sombra
Vil de la desesperanza,
Y antes que pueda recuperarme,
Como un desilusionante fin de cinema,
El prestidigitador guarda
La miel de su magia y se marcha.