La democracia está borracha.
Alvaro Báez, joven poeta.
Valparaíso y especialmente el barrio -o república independiente,
como se prefiera- de Playa Ancha, tienen en Alvaro Báez uno de sus
poetas jóvenes más conocidos. Nacido en 1962, este profe de castellano,
medio actor, medio músico, tiene dos textos publicados: “Placebo” (1990)
y “El envase de mi ser” (1996).
Báez no parece de 35. Menudo, delgado, el pelo largo y bigotitos
amexicanados le dan un raro aspecto juvenil, acentuado por su fresca
forma de hablar, que le quitan gravedad. “El rollo con la literatura
-dice- partió el 82/83, cuando entré a estudiar pedagogía a la
Universidad Católica de Valparaíso. Antes había tenido interés por la
lectura, escribía canciones, pero nada consciente. En la universidad
hubo más disciplina y "caché" que había una historia, movimientos... Hoy
la literatura es una forma de vida, cómo me planteo el
mundo”.
FELIPE MONTALVA Valparaíso
..................EL ROCK, LOS
SESENTA
..... PF encontró a Alvaro Báez en
su reino, rodeado de discos de vinilo de rock viejo, un tornamesa,
libros, sombreros, plantitas, una guitarra y fotos en blanco y negro de
mitos de los 60. (Se confiesa adicto a Marilyn Monroe y a mujeres del
tipo de Brigitte Bardot). “Es una zona de la historia que me gusta. Me
encanta el siglo XX, lo encuentro el más apasionante, y los años 60 son
los más acelerados. Por ejemplo, todo lo que es el ecologismo no es
nuevo, ya venía del amor a la "natura" ," típico de esa época”, indica.
Sus simpatías con el hippismo no se hacen esperar, aunque confiesa no
haberlo vivido en su momento de auge. “Yo me juntaba a los once años con
cabros mayores, de 15 ó 16. Ellos eran hippies. Algunos militaban en
partidos políticos, otros no. Algunos fumaban "pitos" y yo, de curioso,
me metía con ellos.Escuchaban a los Rolling Stones, Santana, The Who y el Festival
de Woodstock lo tenían fresquito. Iba a sus fiestas, donde no había
"copete". Había harto "cuete" y bebidas. No recuerdo haber visto a gente
borracha”.
..... Son
varios los que conocen “al Báez” como músico, más que como literato.
Durante los años 80, en plena dictadura, cantaba en peñas universitarias
temas de Silvio Rodríguez, Santiago del Nuevo Extremo, cuecas y boleros,
junto al escritor Víctor Rojas Farías. En 1986 forma La Troika, junto al
poeta Alejandro Pérez. “Hacíamos blues, rock and roll, con tres
guitarras de palo (acústicas), en la onda Crosby, Stills, Nash and
Young. Llegamos a tener 60 canciones y tocamos en hartos lugares, desde
bares hasta peñas de población”.
¿Por
qué hay pocos poetas músicos?
.....
“Puede ser por una cuestión de disciplina. La música, creo, merece más.
La poesía necesita muchas horas de reflexión y esas horas la música las
utiliza en ejecución. Yo pienso que va por ahí. Por algo una novela se
demora diez años. Conozco buenos poetas, que tocan instrumentos, pero no
llegan a ser buenos instrumentistas. Por otro lado, hay varios músicos
que marcan "ocupado" en letras. Hay temas que son "la raja" y la letra
es la nada”.
....................REMEDIO POR AUTOSUGESTION
..... En 1988, tras siete años de llenar
disciplinadamente un cuaderno con poemas (“el único cuaderno que no
perdí durante la universidad”), Alvaro Báez juzgó llegado el momento
para pegarles una revisión y dar forma a su primer libro,
“Placebo”.
El libro echa luz sobre varias características de la
poesía de Báez: concisión de textos, uso del lenguaje coloquial,
apelaciones al hablante, humor negro, vitalidad.
“Siempre he pensado
que la extensión del poema no tiene que ver con su intensidad. Hay
poemas largos que son intensos completamente. El habla coloquial tiene
que ver con el sentido de la obra. La oralidad está llena de poesía.
Cuando la gente habla de "cabeza de melón", por ejemplo, hay una
metáfora que, si eres lector, la rescatas y la mandai pa’otra parte y te
da otra connotación”.
¿Y el
humor negro?
..... En “Placebo” hay un
texto que dice “La paloma de la paz / me cagó”. Firma: Anónimo, siglo
XX...
“Me gusta mucho la novela negra... Esos detectives oscuros
están cargados de una ironía satírica y pesada... Hay una novela de
Mario Puzo que se llama "Los tontos mueren". Es divertido”.
..... “Placebo” fue editado por la desaparecida
editorial Trombo Azul, de Valparaíso, que agrupó a varios escritores de
formación universitaria, cuya fecha de nacimiento rondaba los primeros
años de la década del 60. Esto llevó a sostener que había una generación
literaria nueva, con características especiales, “la generación de
1987”.
..... Sergio Saldes, uno de los
miembros de Trombo Azul, fue adalid de la teoría. “Yo no pertenezco a la
llamada "generación truncada", que militaba activamente cuando vino el
golpe. Yo tenía 11 años. Lo mío era voyerista, si se quiere. Aunque
directamente involucrado por cuestiones familiares. Me siento parte de
una generación que fue truncada desde el aspecto ideológico. No crecimos
bajo ninguna ideología, salvo la dictatorial. No tuvimos el problema de
la confrontación ideológica con nadie. Después, cuando entras a la
universidad, empieza la bronca contra los milicos y se separan aguas: o
eres de aquí o eres de allá...”
....................ENVASE CON GRADOS
.....
En 1996 apareció “El envase de mi ser” (Editorial Anteojos, de
Valparaíso), segundo poemario de Alvaro Báez. Entretanto, algunos textos
habían salido en algunas revistas literarias y publicaciones
alternativas. A diferencia de "Placebo", abordaba un solo tema: lo que
Alvaro llama "el carrete", el incierto y muy urbano ejercicio de ir por
aquí y por allá, metiéndose alcohol y otras sustancias al cuerpo,
especialmente de noche. Un ritual para muchos jóvenes de esta
década.
..... “Los poetas somos cronistas
de nuestras vidas y de las vidas de quienes nos rodean. Rescato eso de
Zola, cuando decía que uno tiene que meterse de "guata" si quiere
conocer el mundo”, sostiene Báez.
.....
“El envase de mi ser” acaba con un capítulo llamado “El espectro de la
Estación Bellavista”. El lugarcito es una desolada y nocturna estación
de trenes en pleno centro porteño, con vista a la bahía. El último
paradero de una noche agitada, apurando la botella. El texto es rápido,
casi versos que se pulverizan. Eso se nota en:
“Entran sombras en el viento oscuro
Anoche te
dieron entre siete-once-diez-nueve-ocho
Anoche te sacaron la
cresta
A la pulenta
Te cortaron la
mano”.
................... UN PAIS
INSANO
Usted se aleja de los cánones del poeta como
intelectual, inserto en lo académico. Está más influenciado por la
cultura del rock. ¿Eso lo acerca a la nueva promoción de jóvenes
escritores más influenciados por la cultura de los medios de
comunicación que por los libros?
...... “Lo que pasa es que me considero un poeta
intelectual. Lo que me calienta son los intelectuales. Rescato el homo
ludens, lo lúdico de la vida. Si voy a salir, a tomarme un "copete", voy
a huevear, no a hablar intelectualidades a menos que la cuestión derive
pa’allá. Pero para algunas cosas me pongo serio, como para la Zona de
Contacto y escritores como Alberto Fuguet, y ese tipo de literatura.
Porque para tangos prefiero a Gardel. Santiago tiene historias mucho más
hermosas que las que escriben ellos. Son la generación light. Pueden ser
buenos narradores pero les falta profundidad”.
Su simpatía con el
hippismo le hace manejar el tema de la marihuana. Curiosamente, no se ve
en su poesía, al menos, explícitamente... “No me lo he preguntado. La
yerba está siempre presente porque estoy "volado" cuando escribo. Es
algo mío. Quizás escribiría igual sin ella, pero mi onda es: me siento,
pongo música y fumo yerba, con la que estoy bien de acuerdo para los
fines que se estimen convenientes. Si no, no estaría aquí. Yo defiendo
el consumo del "pito", pero apelo a una educación del individuo. Ahí
está el rollo: si los tipos se agarran a patadas en los estadios o en
los conciertos no es por la música, sino porque son estúpidos. Eso lo
sabemos perfectamente.Pero la sociedad defiende la prohibición. Si se diera la pasada y
anduviera todo el mundo "volado", cambiarían un par de
cosas”.
Pero
en Chile se habla de drogas, de yerba, pero es el alcohol la primera
droga nacional.
..... “Mmm.
Ta’re’curao este país. El Ministerio de Salud está preocupado porque el
"copete" está loco. Fíjate que la democracia está borracha. En
dictadura, la onda era más marihuanera. Había otras cosas. La repre no
estaba pendiente de si estabas fumando "pitos" o tomando "copete",
aunque les hubiera gustado que anduviéramos en esa. Ahora, la repre está
para lo otro. Pero, así y todo, se fuma y se bebe más. Y me preocupa
porque hay que medirse. El alcohol es una droga descontrolante. Me
preocupa que la gente se mate por alcohol. Me parece que hay cosas más
importantes que demostrar quién toma más. Por ahí va lo de un país
enfermo, insano metalmente. No es un país que toma alegremente. Es un
país que bebe para darse ánimo”
en
Punto Final 18 de abril de 1997