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El ojo en la mira.
Diamela Eltit: Recuerdos de una lectora voraz
Editorial Ampersand.
112 págs,
2021
Por Gustavo Pablos
Publicado en https://www.lavoz.com.ar/ 5 de marzo de 2021
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"De la misma manera en que Marcel Proust pensó la memoria detonada por los sentidos, la lectura en mí funcionó como una explosión analógica de un libro rebotando en otro y en otro, hasta que pude decidir cuál vía, qué escritura, cuál era la decisión con la letra que realmente me parecía indiscutible”. Frente a tantos dogmas que señalan cómo debe ser un recorrido lector, la reflexión de Diamela Eltit es un 
incentivo para pensar la lectura y la escritura como caminos balizados sólo por el propio deseo.
El ojo en la mira es el último libro publicado en la colección Lector@s de Editorial Ampersand, donde cada autor escribe las memorias de su relación con los libros. Eltit nació en Chile a mediados de 1940 y pertenece a la generación que comenzó a formarse en las décadas de 1960 y 1970, marcadas por los movimientos de izquierda y por la efervescencia política en América Latina.
Siempre fue crítica del lugar que se le asigna a la mujer en el sistema literario, y por eso mismo interesada en marcar las trampas que subyacen en algunas de las reivindicaciones creadas para atenuar la asimetría de género. Su obra está compuesta principalmente por novelas y ensayos y tiene alcance continental, pero en Argentina casi no se consigue debido a los mecanismos de distribución erráticos del mercado editorial.
A través de capítulos breves la autora combina el recuerdo con la crónica, la reflexión con la narración, para desgranar las etapas de su recorrido lector, marcado en gran parte por la voracidad de quien encontraba en la lectura una posibilidad de fuga ante la palidez de otros incentivos.
Fue así que ya desde adolescente cuenta haber combinado las obras completas de Freud con Henry Miller, pasando por El Lazarillo de Tormes y el Ulises de James Joyce, además de los libros que debía leer por obligación en la escuela y la universidad.
Algunos de los temas que toca están vinculados a la experiencia chilena previa y durante la dictadura, a la nueva narrativa de su país (de la cual señala su incapacidad para restaurar la memoria luego de los años de Pinochet). Otros ensayos combinan apuntes de lectura con anécdotas sobre escritores como William Faulkner, los chilenos José Donoso y Carlos Droguett, y sobre la tragedia griega; además, su diferencia con la “literatura del yo”, de la que sólo valida aquellos textos que se leen como una ficción donde los lectores pueden ingresar “a reconocer espacios a partir de metáforas que los incluyen”.
En días en que parecer haber una exigencia excesiva por pensar el presente, estas memorias de Eltit reivindican la tarea contra el olvido que ejerce la literatura. Tarea que no deja de ser conveniente para evitar el rebote de uno a otro estímulo, de un episodio menor a otro.
