
        Odsmar Filipovich 
          
            Por Ernesto González Barnert
         
        Pronto  a venir a Chile, invitado con motivo del encuentro latinoamericano que organiza Poquita fe y que se realizará en las  primeras semanas de Octubre accedió a responder nuestras preguntas de siempre  este fantástico poeta joven boliviano, hablarnos, en definitiva, de su cocina  literaria.  Espero que el público que se  dice escribir o leer acompañe a éste y otros poetas invitados del evento y  escuche variantes del maravilloso castellano con el que buscamos confluir con  la música del ser.
        Tengo  aquí el ejemplar de su celebrado y premiado debut literario Underdog (CBL/Plural  editores, 2007). Poemario sencillamente ejemplar en los sonidos que  le saca a la lengua, con esa mezcla clásica y desenfadada de las palabras a la  vez. Diríase hilada – entre la pesadilla y el lúcido delirio- con ritmo  trepidante para aglutinar una fragmentada Paz y el propio sentir y errar. Un  libro adolescente en todo su empalme, convengamos, pero nunca exánime o  irritante sino que vivo y sangrante hasta en sus defectos. “Un artificio malsano que la noche ha  moldeado sobre su pálido cerebro con ternura animal” en palabras del propio  autor y que hoy tengo la oportunidad de compartir y atender con ustedes, cedazo  de la sorprendente poesía boliviana.
        - ¿Cómo comenzaste a  escribir? ¿Qué hecho detonó en particular la decisión de ser  poeta?
        - La existencia de las cosas como cosas mismas fue  la causa de esta locura. Escribir fue el acto de liberación de la esencia de  esas cosas. La experimentación verbal del mundo. Las impresiones del mundo  fueron tejiendo y entretejiendo en mí una visión cada vez más jubilosa de la  realidad y de la irrealidad. Podemos considerarlo como el detonante principal.
        - ¿Qué es para ti la  Poesía? 
          - Es la meditación y experimentación individual del  júbilo. Júbilo entendido como la voluptuosidad del espanto. La epifanía.  Desentrañar los mecanismos de todas las cosas, lo cual no significa, quitar el  velo a todos los secretos, pues los secretos nunca serán revelables, ya que esa  es su naturaleza. La poesía nos permite ser poesía, encarnar las formas y los  fondos. Mediante una meditación y un trabajo sobre el lenguaje.
        - ¿Para quién escribes?
          - A mi parecer el poema, o sea, la obra, cobra vida  desde que uno le ha puesto el punto final. Y personalmente no escribo para  nadie, pero puede darse el caso que con el tiempo la obra llegue (y guste) a  gente que uno jamás pensaba, y en realidad, creo que es para esa gente para la  que escribo. En pocas palabras, escribo para la posteridad. Que la palabra  convoque.
        - ¿Cuándo escribes  necesitas algo a tu alrededor, alguna cosa, haces algo en particular, etc.?
          - Bueno es cuestión de instinto, lo que de pronto  vea necesario. Ya sea salir a la calle, encerrarme, a oscuras en mi habitación.  O llena todo de música, aromas, etc. Como te digo, muy impredecible. Sobre todo  me aboco a rechazar en 99 por ciento la idea de   inspiración y a recibir en un 99 por ciento la idea de la transpiración.
        - ¿Cómo es tu proceso  escritural? ¿Cómo trabajas hasta concretar un poema? 
          - Mi proceso escritural es el de cualquier  escritor y poeta: Escribir y escribir y seguir escribiendo. Y si queremos ir  más allá de esto, la cosa se nos pone complicada. Ese proceso es un enigma. Es  algo que esta más allá del mismo acto de escribir. Un poema solo cae. Osea, el  poema no es lo que cae, sino la caída del poema mismo.
        - ¿Qué estás escribiendo hoy? ¿Qué proyectos escriturales  no te dejan dormir?
          - Un pequeño  poemario, una especie de recolección de viejos intentos de poemas. Esperemos  que no se vuelvan a quedar en intentos. Y respondiendo a la otra mitad, los  procesos escriturales que no me dejan dormir, son justamente pesadillas de mi  ciudad. Espero dedicarle un buen poema extenso exclusivamente a mi ciudad. (La  Paz, Bolivia).
        - ¿Es necesario que el escritor sea un hombre  comprometido?
          - SI.
        - ¿Cuál es tu mayor defecto como Poeta?
          - Querer ser un  gran poeta. Personalmente odio esa parte de mi ego. Pues más bien creo que no  hay que forzar un reconocimiento. No hay que tratar de lanzarse por lanzarse.  Hay que dejar que las cosas maduren, según madura uno mismo ya en sus lecturas  como en sus locuras. Un buen fruto cae por su peso.
        - ¿Qué piensas de la afirmación de Gustavo  Flaubert, cito: “¡Qué sabios seríamos, si conociéramos a fondo no más de cinco  o seis libros!” 
          - Flaubert! que bien nos hizo y nos hace Flaubert. Urra por él. Un buen lector  lee con el espíritu, sufre, siente, presiente. Si supiéramos leer como se debe  no necesitaríamos muchas cosas. En todo caso hay que discernir que esa cita no  es una pronunciación contra la lectura, al contrario, es una búsqueda de  perfección de la lectura.
        - ¿Háblanos de tu cocina literaria, qué autores o  creadores constituyen sus pilares fundamentales?
          - Bolivianos:  Jaime Sáenz, Oscar Cerruto, Jorge Campero, Julio Barriga, Guillermo Bedregal,  Ricardo Jaimes Freyre, Edmundo Camargo, Gregorio Reynolds.
          Universales:  Pablo de Rokha, Vicente Huidobro, Allan Poe, Charles Baudelaire, Arthur  Rimbaud, Conde de  Lautremont, Quevedo,  Goethe, Girondo,  entre otros.
        - ¿Cuáles son los diez libros que recomiendas  leer?
          1) El Quijote de la Mancha   (Miguel de Cervantes S.) /novela
            2) La Iliada (Homero)
            3) El Psicoanálisis (S. Freud) /tratado
            4) Felipe Delgado  (Jaime Sáenz)   /novela
            5) Los cantos de Maldolor (Conde de  Lautremont) / poemario en prosa
            6) Las flores del mal (Charles Baudelaire) /  poemario
            7) Aullido (Allen Ginsberg) /poemario
            8) Narraciones Extraordinarias tomo 1 y 2  (Edgar Allan Poe)/ cuento
            9) Los mitos del Cthulu (H.P. Lovecraft)  /cuento
            10) Jaguar Azul (Jorge Campero) poemario 
        - ¿Que libro de poesía te hubiese gustado escribir  y por qué?
          - “Los cantos de  Maldoror”. Solo alguien que escribe un libro así, puede sentirse tan realizado  luego de haber jugado como un maniático con toda la creación de Dios. Lo adoro.
        - Nabokov proponía a sus alumnos un  cuestionario sobre las cualidades que debía de tener un buen lector. Proponía  una lista de 10 y había que elegir 4:
          1. El lector  debe tener cierto sentido artístico.
          2. El lector debe ser socio de un club del libro.
          3. El lector debe tener un diccionario.
          4. El lector debe identificarse con el o la protagonista.
          5. El lector debe concentrarse en el punto de vista socioeconómico.
          6. El lector debe tener memoria.
          7. El lector debe preferir una historia con acción y diálogo a una que no los  tenga.
          8. El lector debe haber visto antes la película basada en el libro.
          9. El lector debe ser un autor en ciernes.
          10. El lector debe tener imaginación.
              
              - ¿Cuáles son las 4 que consideras  primordiales?
            - El  lector debe tener imaginación.; El lector debe tener memoria; El lector debe  tener un diccionario; y  una vez mas El  lector debe tener imaginación.
        - ¿Cómo ves la poesía boliviana actual…Y sobretodo a tu promoción poética?
          - El  mundo son muchos mundos. Y en el mundo de la Poesía, Bolivia es un mundo muy  desconocido, poseedor de riquezas poéticas alucinantes, pero para nada exportadas.  Obviamente esto no le quita la calidad a los   buenos autores, pero si una mala fama a las difusoras culturales de mi  país. Pero la cosa ya esta cambiando.
          
          Respecto  a mi promoción, que te puedo decir. Soy afortunado. Sin dejar de agradecer al  concurso que gané, 
          al  que le debo mucho de ese cambio que ha producido en mi vida.
        - ¿Y la poesía chilena? Insistiendo con las preguntas macarrónicas.
          -
          Más allá de todo lo histórico y político que carga cada país sobre las  espaldas, yo creo que Chile es una luz de la poesía en Latinoamérica. Admiro  mucho la labor de todos los poetas chilenos que han surgido a lo largo del  tiempo y han hecho temblar todo el continente y hasta el mundo, con una palabra  de hierro y de sal solo digna de individuos auténticos y luchadores.
          
          Viva  Huidobro! Viva De Rokha! Viva Neruda! Viva Mistral!
        - ¿Qué opinión te merece la actual poesía  latinoamericana o española? ¿Sus diferencias y aportes?
          - Actualmente han  surgido muchas vertientes, que con un sentido estético muy lúdico y a la vez  concientizador (si vale la palabra) nos han hecho ver que la poesía nunca se ha  quedado atrás. La poesía avanza con la historia de cada país. La palabra salva,  redime y condena. Los poetas como la memoria y la palabra. Entre los aportes  que mas puedo destacar.
        - ¿Qué libros no has podido terminar de leer?
          - La Biblia y Las mil y una Noches.
        - ¿Cuál es para ti el  gran libro olvidado de la poesía boliviana?
          - “La noche” de Jaime Sáenz (poeta paceño)
        - ¿Cuál fue el último  poemario que leíste?
          -Bueno, uno tuyo. Es que la verdad, tu grata  invitación a responder un cuestionario a publicarse en la revista de literatura  me despertó las ganas de volver a leer a ese poeta chileno que conocí durante  mi estadía en Santiago.
        - ¿Qué libro estás  leyendo ahora?
          R: “Los Paraísos Artificiales” de Ch. Baudelaire.
        - ¿Cómo ves hoy por hoy la industria editorial  boliviana con respecto a la poesía? 
          - Desde luego que más saludable que los años pasados. Pues para no ser grosero,  me cabe recordar que el festival de poesía nacional ya cumplirá su cuarta  versión este año. Eso sin dejar de mencionar la respetable labor del “Concurso  Nacional de Poesía Yolanda Bedregal” que este año premia al séptimo poemario  ganador, ya que este concurso se viene llevando a cabo desde el año 2001,  galardonando a los poetas con una muy considerable suma económica, y de paso  publicando a las distintas menciones que fueron destacadas. Ambos proyectos muy  estimulantes para la gente que se dedica a escribir.
            
  Eso  entre contadas Cartoneras. También tenemos a algunas revistas literarias que  han empezado a circular con mayor fuerza, mismas que siempre están organizando  y promocionando lecturas de poesía tanto callejeras, bolicheras, como de  centros culturales y cafés de arte, las cuales van creciendo a lo largo y ancho  de cada ciudad. Especialmente en La Paz.
        - ¿Qué piensas de los  Premios literarios?
          - Son una bendición para los poetas que desean publicar una obra, y  por incontables razones no hayan podido financiarse en una editorial. Sin  embargo toda la calidad que se saque y arranque del anonimato está en las manos  del grupo del  jurado, la palabra final,  podríamos decir, la tienen ellos.
        - ¿Qué palabras le  dirías a alguien que está comenzando en esto de la poesía o escritura, 
            alguien que ha decidido  ser poeta?
          - La poesía se alimenta de poesía. Cada día es material para  escribir. Pero eso si, leer, leer y leer. Ahí esta el secreto, la fuente.  También saber retroalimentarse de todas las demás artes. Escuchar buena música,  ver buen cine, etc. Saber que todo acto de arte  conlleva en si mismo a una disciplina rigurosa y a un amor fatal. Amemos  el dolor. Lo cual no significa confundir a la poesía con un paño de lágrimas. 
          
          También debemos Aprender a contemplar, a investigar. En esto, solo los más fuertes  sobreviven. No hay que desesperarse por el reconocimiento de la gente, mas  bien, hay que desesperarse por la maduración de la obra, lo demás llegará por  añadidura. 
          
          Y finalmente Humildad, mucha humildad. Ser tu peor  enemigo al momento de valorar tu obra. La vanidad es un lujo que solo se pueden  dar los genios. 
        - ¿Qué opinas de las nuevas formas de difusión  literaria por Internet como revistas literarias, blogs, páginas sobre  literatura? 
          - Hay de todo.  Pero sobre todo, mucho espacio para esparcir la literatura. Eso me gusta. Pues  el internet mismo se ha convertido en el súper libro de la época moderna. Un  poeta que hoy no sepa usar el internet, sufrirá mucho para difundir su obra,  para conocer gente, y hasta para investigar muchas cosas.
        - ¿Qué cosa últimamente  te quita el sueño? 
  - Acordarme de que andaba buscando algo. Entonces debo levantarme y  buscarlo, ya sea en mi mente, en el cielo, dentro un libro, en una caja de  basura. En realidad, ni sé lo que busco, pero debo buscar algo. Es una manía,  una locura!
        - ¿Qué te escandaliza?
          - Me escandalizan, como me escaldalizan se podría decir, la situación  tan desordenada en que marcha la cuestión política de mi país. Ser boliviano  actualmente, es volverse una analista político a la fuerza. Ver como mi país  puede llegar a ser humillado tan fácilmente, eso si que me indigna. Y creo el  resto de los países latinoamericanos nos son una excepción. 
        - ¿A que le temes  –literariamente hablando-?
          - A tener una obsesión de mi obra, y que al pasar del tiempo, ésta  vuelva hacia mi, y me demuestre que no se ha cumplido como pensaba. Romperme mi  propio sueño.
        - Y por último ¿Me  gustaría que a ti mismo te hicieses una pregunta – que nadie más te ha hecho- y  te la respondieras.
            -   Si te dieran del don de poseer la memoria humana más perfecta del mundo  ¿a que te dedicarías?
          Autorespuesta: A satisfacer una de mis obsesiones mas grandes, que es  poder escribir memorias. Tanto como las mías, desde mi nacimiento, como las de  mi familia, donde hay un montón de material para escribir. Así también  utilizaría este don para recordar las cosas más asombrosas que he visto y  experimentado desde niño, para hacer cientos de poemas con éstas.
         
        
        Poemas
          
           Osdmar Filipovich
         
        Fósil de alcantarillas
        En el interior de  la piedra; alguien mastica tiempo.
          Antigua letra del  abismo redescubriendo la tristeza. 
          Sueña mientras se  quiebra en platinada música.  
          Posición fetal  eterna entre costillas de pólvora. 
          Carbonato corazón  bullendo jubiloso
          bajo ataúdes de  agua mustia.
          Almacena su negra  émesis.
          La boca llena de  tierra oscura.   
          A su pesar con  anestesia cerebral sin ronquido.
          Pensará el niño  mineral involutivo; 
  “Toda palabra ha  endurecido
          lo que pudo ser  aullido. 
          todo silencio se  ha consumido 
          con un latido  mío”.
         
         
        Autoretratografía
        Cavilando en las  musarañas.
          Puestas sus  fúnebres osamentas.                    
          Adentro las  orejas un nido de moscas. 
          Se figura  fantasmagoría  
          leyendo restos  versos de viejas mariposas. 
          Eructando pedazos  redondos de la noche 
          con sempiterno  escalofrío. 
          La desfigura  blonda de zapatones atardecidos. 
          Encorvado su  corazón con un pedazo vacío de suspiro. 
          Columpiándose en  la realidad perdido un zapato.
          Del polvo los  ojos perros crapulientos. 
          Agitados  cabellos, sucios juguetes del viento.
          Enormes párpados  románticos 
          en fábulas de  balbuceo. 
          Sostenido con  gesto unánime un ramillete de trasgos  
          y esa parte del  tiempo 
          hecha cuerpo a  picotazos. 
         
         
        Viernesabadomingo
        Caricatura  atestada de moscas. 
          Mondando  el hueso de cada día.
          Afuera  la tarde acicala perros
          y no  buscando lotería.
          Cernícalo  hundido en el sofá-cama-sofá-cama.
          Eres  una maquinaria de fiebre.
          Fin  de semana croando burbujas de saliva.  
          Al  saberse que a todos nos inflaron por el ombligo.
          Impúdica  tu forma, y  los parásitos gestos. 
          Sonámbulas  carcajadas rebotan sin garganta alguna.
          Gandul  morboso dado a la locura. 
          Delirio  en copa nitroglicerina. 
          TV  dreams; lluvia en interferencia.
          Tiembla  tu bolsa carnuda de agua.    
          Domingos  olor a pipoca quemada.  
          Tanta  flojera y así como si nada
          el  disco del reloj volará tu cabeza. 
          Don  Señor Sonrisa Matada, 
          pujando  la existencia.
          Tanta  renga música de intestinos sordos.
          Y  bajo tu resguardo titánico de ocioso:
          aplastados  gatos, comida chatarra, cucarachas. 
          Flatulenta  escoria que barriga resbalosa 
          es  puro sudor cuajado.   
          Los  huesos ya crujen su rutina.
          Mañana  es lunes hay oficina.  
          Mañana  es lunes ¿hay oficina?
          Aquí  muerde su final tu obesa poesía.
        . .. .. .. . . .. ... .. *Pipoca: Palomitas de maíz
         
         
        Carne de cerdo, a manera
            de epilogo existencial
        Adivinando su  epitafio entre lengüetas ardientes.
          Carne blanda y  triste se resigna a cocer en aceites.
          Acompañado de  salsa picante.
          Es así como se  debe morir a pedacitos.
          Con el corazón de  manzana entre los dientes.
          Y sabe
          Lentamente 
          Todo se acaba.
          El cerdo empieza  a retostarse como una estrella estúpida.
          Digno ni de una  rebanada.  
          Va quedando solo  de si mismo oliendo el precipicio.
          Cerveza gratis,  free cover para todos. 
          Enchufado de la  cola a los tomacorrientes
          no reclama  liposucción. 
          Sueña flotar,  sueña llenarse la cabeza de cohetes.
          Recuérdese  siempre 
          -con comino y  limones-
          Cortar la  crueldad en trocitos
   y servir caliente.
         
         
        Intoxicanción 
        Granujilla  graznador en convulsión de  pesadillas hasta los
          tuétanos.
          Naufragando vertiginoso la intimidad novilúnica. 
          Teclas dentaduras de piano detonado. 
          Calavera  sonriente nada fotogénica. 
          Congelada  la lengua parasita del insomnio.  
          Lo  mismo que tus ojos postizos de perro fumatérico.
          Espera  a la huerfanita con un ramo de cuervos   en mano.
          Y un cigarrillo a manera de signo admirativo.
          Noctívago  barbas capuchinas en paroxismo psicodélico.
          Murciélaga resaca y espasmo. 
          Ya  evaporada la negrura del hueso 
          sólo te queda ensalivar tu talismán de púas. 
          Orate  en caída libre por las  telarañas del letargo. 
         
         
        Sobrenaturalidad de una mosca 
          en días opiáceos
        Persistente cortocircuito en maquinarias de nada.
          Habitando mórbidos alientos,
          nunca termina de morir bajo la lluvia.
          Fábula del perdido encanto.
          Peinadora de lunas.
          Por la ruta contraria
          a los bigotes del mundo.
          Rumor de escarcha en el costado hambriento.
          Luciendo su calidoscopio obsceno. 
          Divina tristeza levantando su caída
          por las ventanas, una y otra vez.
          Busca el ombligo del universo.
          Creyéndose tan poco que causa espanto.
          Así como debe ser. 
          Presentidas las bocinas del pensamiento.
          Mosca contrae su aerovía sin acústica. 
          Vagabunda vaciando el grito.
          Metempsicosis es la materia.
          Importa más esta soledad mínima;
          centrífuga, inconsciente.
          Qué imán para las sombras
          no iguala su parda matriz silente.
         
         
        Blues de Janis
          a Janis Joplin
        Fluida la sed por  tu cuerpo hecho un blues
          Huérfana de algún  dios
          Vela a flor de  piel en boquiabierta luz  
          A evocar en  dislocadas muecas
          Esas enlutadas  del amor
          La tarde fue tu  última habitación
          Marchita la  saliva en bronquio terciopelo
          Humeando del alma  su dulce licor
          Eva feroz  persignada de alcohol
          Se sabe que el  pasado es un castillo intocable
          Recóndita  luminiscencia
          Un ya jamás
          Lo que tu voz  acicalaba a la muerte
  Áspera y lo  pálida
          Nostalgia tan  tuya
          Amada esa manera  en que aúllas
          Por la mordedura  de su oscura droga
          La imagen  eclipsada
          Enredada de  sombras
          De cuando sola la  guitarra alumbraba los viajes
          Heredera de los  caminos
          Elegías la ruta  de tu motocicleta
          California / San  francisco
          Animales de luz  sobre lastimado asfalto
          Peinaron música a  tu cabellera
          Tan ideal para el  recuerdo te tengo
          Sea el corazón de  la lluvia tu amuleto eterno.
         
        The ceremony  is about to begin
          a Jim Morrison 
        Llegas  del otro lado de la noche
          Cuando  todos los muros suelen extinguirse
          Tus  pasos infectados no se pierden 
          En  las comisuras del abismo  
          Fuego  asesinado dentro un mágico círculo
          Para  el baile indio contorno al micrófono
          Pose  de árbol difunto invoca el espíritu
          Abiertas  las puertas el cuerpo es ofrenda al universo
          Desintegración  lenta para máquinas brunas
          Hecho  piedra y giros
          A la  sombra chaman de un vil cigarrillo
          Quién  brinda por William Blake  
          Rasguñando cavernas antiguas 
          Vuelto  a nacer con alma ajena   
          Erguida  ebriedad y apretando los labios
          Rey  de los lagartos
          En  copa recibiendo un símbolo
          Al  saberse fulminado por un designio  
          Flote aquí eterna la noche su etílica transparencia 
          Inflando silente escenario con nieblas y voces
          Antes  del primer grito a someter su delirio 
          En  valium cósmico de vagas luces.
         
         
        Paisajismo de las formaciones
          A LA CIUDAD DE LA PAZ
        La  ciudad se distiende alumbrada y seca. Entre latidos insomnes, cabecea contra la  niebla y denota sus carnes rebosantes y abiertas después de la lluvia. Cree puntiaguda contra los metales transparentes del  invierno.  Las horas solo son  hierba seca malcrecida por el hambre. Todo se dobla en ruidos jadeantes, cae y  se instala con el peso matinal de la tristeza. La  ciudad acurrucada y dañina bajo un cielo crudo, revela una antigua abundancia  de luz desde su erosiva imagen. 
         Desquebrajadas  sus costras, son patios desbordados dilatándose por este escenario de vísceras  con aislados filos. Pelambres de humo tejen las dispersiones del abismo. Por  las fisuras del éter tiembla el invierno. Todas las distancias se acumulan y  alargan sus blindajes. Los basurales son vesículas infectas donde se acercan a  caer las nubes. La empapada osamenta de la tierra desprende sus tumbas  flotantes. 
         Repleta  de alba, la ciudad con su anatomía perturbada segrega baba de luz entre  inmersos nervios. Aguas intimas le alumbran con cosquilleos. Hipando la neblina  de sus muertos con la rota eternidad a cuestas. Enclavada al pie de cumbres  silbadoras. El río apenas lava sus reflejos carcomidos. Maquinarias insomnes  agolpan su niebla, mientras el alcohol se ramifica en las gargantas de la  tierra. 
         La  ciudad con su alma de nada es una hollada bullente de ruidos silenciosos.  Tallándose a golpes hasta el vacío firmamento, los cerros sacuden sus estructuras  atardecidas. Tanto smog ya no espanta celajes en las alturas. Rica en quietud y  luz muerta, busca su origen entre jubilosas fragmentaciones. Las imágenes más  frías del mundo le salen por la espalda. Millar de casas le florecen desde el  vientre, las ventanas se sumergen en turbios oleajes creciendo hasta perderse.
         Esta  la ciudad, como ciudad nuevamente; necesariamente otra antes de si misma.  Coronada de nebulosas pesadas talladas por el relámpago, llena de verrugas y  calles perdidas, relamiéndose el asfalto para recogerse las sombras.