. . . . . No se podían visualizar esas ausencias, menos abstraerlas a signos para leer un sistema total de mecanismos entrelazados / separados / diferentes / escribiendo / tapando / escondiendo la página transparente el aire.
. . . . . Perdiendo consistencia, en un punto determinado, el asfalto denoto el carácter paradójico de su continuidad.
. . . . . Hasta el lugar del accidente.
. . . . .Hasta el lugar del accidente se vienen kilómetros que ahondan aún más lo definitivo de la caída, su mudez definitiva, lo definitivo del entramado de la caída.
. . . . .—rellenar: colocar los pilares al puente evitando la tierra/ . . . . .una mirada obvió las señalizaciones.
. . . . .Estaba sola y las piernas desplazaban el asfalto su carne vertical que equidistaban a los huecos de cercamientos emanando imágenes líquidas bloques similares al enfrentamiento con mas de 200 Wts. de potencia —parpados bajos— el cuerpo lumínico que transforma todo lo abierto de su entorno en lo cerrado negro del túnel por donde se equilibra. Está el asfalto recientemente extendido, ella pisa y sensibilizada determina la angostura de lo circundante / Ref: constatación, fijación de ese retardo cerebral que (como el tuyo o el mío)) determinaría nuestra salida de un asfalto angosto la inconsistente mezcla por ahora rellenar el entretiempo entre sus pasos y la salida del pavimento que nadie más que esa pudo ocupar hasta llegar a ser liberada como excedente, como signo, como escritura.
COORDENADAS:
a. Pudo plasmar sus pasos en el asfalto-cemento fresco.
b. Dio cuenta (se da cuenta) de la fragilidad de los materiales.
c. Veintinueve años. Estaba sola.
d. Su transcurso en el puente de aproximadamente 8 metros de ancho.
e. Ese mismo puente con las debidas señalizaciones.
f. La descripción de un retardo cerebral.
g. Una cualquiera que olvidó su situación en el paisaje.
h. La salida del asfalto como accidente.
i. La salida del asfalto como desenlace.
Como si un puente no fuese construido allí para el transito ahora repetido en una construcción narrativa de mala fe (Pudo pensar), por ejemplo, que el largo rectángulo del asfalto no presentaba ramificaciones, no era el lugar pertinente al vacío (Pudo Pensar), por ejemplo, en ella misma extendida como denso volumen de alta resistencia, de continuidad infinita que poseía bordes.
. . . . .Nadie más que ella pisa el asfalto para que sus pies se desplacen a lo largo del puente en un transcurso de tiempo idéntico al tiempo de lectura llenado en un rectángulo físico (también) por los ojos insertos ahora en los pies de la desconocida. (una cualquiera).
No te apena
La pérdida del conocimiento fue factor de olvido.
No te apena.
Ella caminando sola sobre el asfalto.
No te apena.
Huida puramente circunstancial de lo retenido por la carne
No te apena.
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SINTAGMA I
Juan Balbontín
Publicado en Revista CAL N°1, junio de 1979
