“CANTATA NUESTRA MADRE GRANDE” — Isla Dawson desde la adversidad —
Autores: Manuel Rodríguez Uribe, Fernando Lanfranco Leverton y Marco Barticevic Sapunar. -Ensayo testimonial-
Imprenta Talleres de La Prensa Austral, Punta Arenas, diciembre 2022, 112 páginas.
…Yo quisiera estar presente/ en tu amanecer ritual y esperanzado/ para escuchar paternal/
tu grito portentoso/ y ver tus manos cerrarse de ansiedad/ para cuando tu hijo/ el último
que será el primero/ alce sus ojos/ y nadie más lo pueda detener/ en su ascensión final/ hacia la luz /.
-Hacía la luz- (fragmento, pág. 58)
Desde el encierro de una juventud inconclusa, con el peso de una historia pendiente, con los delirios de un tiempo cercenado, con el espacio forzado, con los sueños hecho trizas y recompuestos, con las muertes de por medio y los cuerpos torturados, con la visión dolida de recuerdos imperfectos, de informes señales auditivas, de espejismos difusos en la retina, de clandestinos amores extraviados, de padres agonizantes y ancestros difuminados en cenizas, de sonrientes colegiales sin rostros, de ancianos que partieron sin retorno, de senderos torcidos donde cayeron tantos sin nombres ni apellidos, por los recodos de la fábula desperdigada, por la noche eterna, por los días transidos, por las caminatas en redondo, por el silencio hecho aullido, por el grito hecho silencio, por la sangre descompuesta, por las ausencias tan presentes, por el destierro de las sombras, por las relegaciones de los libros y de las poesías, por la canción que vino desde lejos, y por la lejanía que estuvo tan cerca, por el cielo hecho prisión, por las aves confinadas en la evocación, por el desierto florido sembrado entre los muros, por las palabras que volaron por las bocas, por los papeles de ayer recuperados, por las cartas que cruzaron los mares y los ríos, por los desharrapados cubiertos de ensueños, por los seres desnudos que llenaron las llanuras, por los ciclos eternos de la naturaleza, por la gravitación estelar a ras del suelo, por los gritos destemplados a medianoche, por el llanto en sordina, por los candelabros sin luz bajo la almohada, por las barracas prisioneras del espanto, por los pasillos constreñidos del miedo, por la quietud de las estrellas parpadeantes, por el equilibrio sin pausas del oleaje, por los hijos que partieron, por los abuelos que no llegaron, por las madres que entretejieron sus dolores, por los hermanos que nunca se abrazaron, y por el abrazo que perduró en la fantasía, por quienes fueron semilla y fruto, por las piedras recortadas y talladas, por los juegos de ajedrez infinitos, por el infinito hecho esperanza en cada movimiento, por los peones que escribieron y los reyes que nunca leyeron, por los dioses que se hicieron carne y la carne que se hizo divina, por la lluvia y la nieve ensangrentada, por los vientos, por las distancias sin nombre, por el reencuentro de las décadas a pesar de los pesares, por las amadas acariciadas en la penumbra, por sus vientres vacíos y el vacío repleto de esperanzas, por el amor, sencillamente por el amor recobrado, por el camino hacia la luz de una madre sempiterna, por el amor de vivir y de agonizar sin pausas, sin temores, cantando y sonriendo, abrazando al fin a la tristeza hermanada en la alegría, en la mirada liberada, en el corazón latiendo más de prisa, en los puentes solidarios, en la fraternidad palpitando en los escombros, en el regreso, al fin en el regreso de quienes han vuelto a renacer, porque nunca partieron del todo ni jamás estuvieron muertos…y por eso hoy de nuevo y para siempre, cantan…
Nota: la Cantata Nuestra Madre Grande, escrita inicialmente en el Campo de Concentración de Dawson en diciembre de 1973 y concluida en la cárcel de Punta Arenas en 1976, se estrenará el 03 de septiembre de 2023 en la ciudad de Punta Arenas.
Fernando Alejandro Lanfranco Leverton nació un día 8 de agosto de 1950, en la ciudad de Valparaíso. Es el tercer hijo del matrimonio formado por Leandro Lanfranco Lombardi, empleado público, y Dorothy Leverton Iriarte, dueña de casa.
Fernando hizo sus estudios primarios y secundarios en el Liceo de Hombres de Punta Arenas, (hoy Liceo Luis Alberto Barrera), entre los años 1959 y 1967. Sus estudios de Educación Superior los efectuó en la Universidad de Concepción, Universidad Técnica del Estado (hoy UMAG) y Universidad Tecnológica de Dublín (Irlanda), donde se recibe como Ingeniero Mecánico, mención HVAC.
En 1968 ingresa a las Juventudes Comunistas de Chile, organización en la que ocupa distintas e importantes responsabilidades políticas en Concepción y Magallanes, donde lo sorprende el golpe de estado como secretario regional de Organización. Es detenido el 10 de octubre de 1973 siendo secuestrado desde una sala de clases de la entonces UTE de Magallanes. Es trasladado hasta el regimiento de infantería marina Cochrane. Posteriormente, luego de sesiones de tortura e interrogación junto a cientos de compañeros es trasladado el 21 de diciembre de 1973 al campo de detención y tortura de Isla Dawson. Con posterioridad es trasladado al regimiento Pudeto en Punta Arenas, luego al estadio fiscal de Punta Arenas bajo la custodia de la Fuerza Aérea de Chile. Estando en este centro ilegal de detención y tortura es sometido a proceso y posterior Consejo de Guerra siendo condenado a distintas penas de encierro e inhabilidades políticas y públicas. Posterior al Consejo de Guerra es trasladado a la cárcel pública de Punta Arenas donde comienza su ilegítima condena. A fines de mayo de 1976 es expulsado del país para cumplir su condena en Irlanda como uno de los miles de chilenos destinados al exilio. En 1985 es autorizado a volver a su país y en julio de 1990 regresa junto a su familia estableciéndose definitivamente en Santiago.
Desde muy temprana edad, e influenciado por su padre, inicia estudios musicales en 1963 y se incorpora al coro y estudiantina de su liceo, bajo la tutela del profesor Sr. Eulogio Miranda. Funda en 1965 el conjunto Los Fueguinos con quienes participa en distintos concursos de canto y música en Magallanes llegando a obtener un importante premio a nivel nacional. Sus inquietudes musicales lo llevan en sus años de prisión, a compartir con sus compañeros, entre otros, jornadas de reflexión, canto y poesía, así como la composición de la música de la obra Cantata Nuestra Madre Grande en conjunto con Manuel Rodríguez y Marco A. Barticevic.
Manuel Luis Rodríguez U.
Nací en Puerto Montt el 20 de mayo de 1949, hijo de argentino y chilena. Mi padre, Ricardo Rodríguez Cassadey, se fue de Chile en 1952 para no regresar y mi madre, Rosalía Uribe emigró a Punta Arenas, de manera que me considero un magallánico.
Estudié desde 1956 en sucesivos colegios y liceos, de donde iba siendo expulsado por mala conducta: Escuela N° 1, Liceo Salesiano San José, Liceo de Hombres e Instituto Superior de Comercio en 1971.
Mi adolescencia comenzó en los libros y me fui acercando a las ideas de izquierda a través de la lectura. En 1969 ingresé a la Juventud Demócrata Cristiana desde una postura rebelde.
1971 fue un año clave en mi vida: todo cambió. Ese año egresé del Comercial, me casé, renuncié a la DC, formé el grupo fundador de la Izquierda Cristiana, ingresé a mi primer trabajo en la Universidad Técnica del Estado e integré el gobierno de la Unidad Popular en el Comité Político Provincial y en el Comité de Abastecimiento coordinado desde Santiago por el general Alberto Bachelet.
El 12 de septiembre de 1973 fui detenido en la Comisaría de Carabineros y en el regimiento Pudeto de Punta Arenas. Tras un período de intensos interrogatorios y torturas, fuimos trasladados al campo de concentración de isla Dawson el 21 de diciembre de 1973, donde permanecí hasta junio de 1974, siendo trasladado al regimiento Pudeto y al regimiento Cochrane, desde donde fui enviado relegado a Bulnes en junio de 1975. En Dawson, entre diciembre de 1973 y febrero de 1974 escribí un texto poético denominado “Nuestra madre grande”, una alegoría histórica y geográfica del continente americano.
1. Marco Antonio Barticevic Sapunar
2. Nacido en Punta Arenas, 7 de junio de 1952.
3. Ingresa a la carrera de Contador Público y Auditor en la Sede Punta Arenas de la Universidad Técnica del Estado en marzo de 1971.
4. Ingresa a las Juventudes Comunistas en Punta Arenas el 30 de abril de 1971.
5. El 16 de septiembre de 1973 aparece su nombre en un bando, junto a otros estudiantes de la UTE, para presentarse el 18 de septiembre hasta las 12 horas en la comandancia de la Tercera Zona Naval.
6. Desde el 18 de septiembre de 1973 detenido en el Regimiento de Infantería de Marina Cochrane de Punta Arenas.
7. Trasladado por mar a isla Dawson, campamento de prisioneros Río Chico, barraca Bravo, # 81, el 21 de diciembre de 1973.
8. Trasladado a Punta Arenas a los camarines del Estadio Fiscal de Punta Arenas el 1 de junio de 1974 (Eco 12).
9. Condenado a 4 años y 61 días en el Consejo de Guerra a la dirección de las Juventudes Comunistas de Magallanes en el mes de agosto de 1974.
10. Trasladado al Regimiento Cochrane a mediados de octubre de 1974, a la espera de espacio en la Cárcel Pública de Punta Arenas.
11. Trasladado a la Cárcel Pública de Punta Arenas el 9 de enero de 1975.
12. Acogido al Decreto 504, viaja exiliado a Yugoslavia el 20 de junio de 1976.
13. Nunca apareció en alguna lista de personas permitidas a regresar al país durante la dictadura.
14. Transcribe a pentagrama la música de la Cantata Nuestra Madre Grande entre 1974 y abril de 1976.
15. Regresó al país el 2 de octubre de 2016.
Los dibujos fueron realizados en prisión por Héctor Aviles
www.letras.mysite.com: Página chilena al servicio de la cultura
dirigida por Luis Martinez
Solorza. e-mail: letras.s5.com@gmail.com “CANTATA NUESTRA MADRE GRANDE”
—Isla Dawson desde la adversidad—
Autores: Manuel Rodríguez U., Fernando Lanfranco L. y Marco Barticevic S.
-Ensayo testimonial-
Imprenta Talleres de La Prensa Austral, Punta Arenas, diciembre 2022, 112 págs.
Por Juan Mihovilovich