pasan los días …, ya son muchos …, otra
vez –y aún falta un largo fin de año
en el que cada uno festejará por separado
lo que tiene y en silencio el azar
de este secreto de cíclopes amorosos
que no buscamos comprender …
… y yo sólo atino a lo mismo por mientras
tanto: al consabido e-mail, brevísimo
-para no agregar detalles innecesarios
a este capítulo de novela-, con su YouTube
link, éste y no otro, que entre nos, te digo
al oído justo cuando haces click, no puede
no venir más al caso …, y aquí, sin demora,
transcribo la dirección precisa, con todas
sus letras y signos varios, como si fuera
el mejor de mis versos, con soberana
libertad escrito en tu boca por mi mano:
http://www.youtube.com/watch?v=BfCTnAgoxBM