Proyecto Patrimonio - 2021 | index |
Leonardo Sanhueza | Autores |










Artistas en la palestra

Por Leonardo Sanhueza
Publicado en Las Últimas Noticias, 16 de febrero de 2021




.. .. .. .. ..


Es bien inexplicable la popularidad que alcanzan en Chile las controversias públicas sobre arte contemporáneo. La opinión pública, siempre tan pragmática y razonable, tiene una infinidad de intereses mucho más apremiantes que la actualidad artística nacional, pero de cuando en cuando al parecer se le corre una teja y se fija en una obra o en una exposición y algo cruje por ahí y se arma la grande. Es un misterio. Es como si el inconsciente colectivo necesitara, cada tanto, meterle a la realidad prosaica un poco de caos, abstracciones ininteligibles o disparates, por si le faltaran.

Sea como sea, ese raro fenómeno, que la semana pasada hizo erupción por un mural de Mon Laferte en Valparaíso, tiene una estructura previsible. Nadie sabe muy bien cómo empieza, pero una vez empezado lo primero que aparece es la voz detractora de un experto o de alguien que opere como tal. De ahí en más el debate se desarrolla según el modelo de las bolsas de gatos, hasta que entra en escena otro experto, que además de experto es experto-experto, generalmente director de un museo o curador verboso, que lleve la cosa al plano teórico. Ahí se produce un lapso de perplejidad, luego del cual todo vuelve a su etapa de bolsa de gatos y, de ahí, sin solución de continuidad, todos hacen mutis por el foro, obra y artista incluidos. Fin de la controversia.

Aunque tiene antecedentes centenarios con la polémica de los "mamarrachos" del Museo de Bellas Artes, la tradición de las controversias artísticas en su forma actual —es decir, con televisión— se inauguró en 1980, con el caso de la silla de Humberto Nilo. El episodio no pudo ser más extraño, sobre todo por el contexto dictatorial. Enrique Lafourcade las hizo de impugnador y todo el mundo opinaba sobre la silla. La obra no era especialmente provocadora; de hecho era ni más ni menos que una silla de playa hecha de acero, sin lona, expuesta en el frontis del Bellas Artes. La fase dos de bolsa de gatos se resolvió con un deus ex machina: en pleno debate, una noche surgió un grupete de dudosa naturaleza, que se hizo llamar Vengadores del Arte, y la silla de Nilo fue arrojada al Mapocho con la consigna "El arte nacional debe ser objeto de orgullo y no de vergüenza y patudez".

Una controversia inquietante que recuerdo la protagonizó Antonio Becerro, creo que en los años 2000, cuando le tiró un perro muerto a un político en un programa de televisión. Desde que lo conozco, hará ya casi un cuarto de siglo, Becerro ha centrado sus proyectos artísticos y culturales en el mundo canino, desde su heroica recuperación de la perrera de Mapocho hasta sus quiltros de resina negra precursores de cierta iconografia de las protestas actuales, pero en ese momento estelar televisivo su acción parecía desencajada del mundo del arte y representaba más bien un sorpresivo activismo de algo que todavía no atinábamos a llamar animalismo, porque ese movimiento aún estaba en pañales y andaba más bien preocupado de las ballenas. De hecho, en ese tiempo nadie habría imaginado que iba a existir algún día la ley Cholito o alguna cosa semejante. Así que la acción de Becerro pasó al olvido, pero todo indica que, al menos subterráneamente, siguió resonando, como el eco de la respiración de una bestia que espera su momento para gruñir.



 

 

Proyecto Patrimonio Año 2021
A Página Principal
| A Archivo Leonardo Sanhueza | A Archivo de Autores |

www.letras.mysite.com: Página chilena al servicio de la cultura
dirigida por Luis Martinez Solorza.
e-mail: letras.s5.com@gmail.com
Artistas en la palestra
Por Leonardo Sanhueza
Publicado en Las Últimas Noticias, 16 de febrero de 2021