Bienvenidos / al cementerio / más viejo de Chile": así, sin anestesia, el poeta Mauro Gatica Salamanca presenta el oscuro trasfondo histórico de su Arica natal. Desde su fundación en el siglo dieciséis, en efecto, la Ciudad de la Eterna Primavera ha debido lidiar con algo que más bien parece una eterna maldición. Han sido siglos en que los ataques piratas, la esclavitud, la guerra, la chilenización, el racismo, la condición de frontera, el narcotráfico o la contaminación han ido fermentando en un espeso caldo de muertos y violencia bajo su soleada imagen de puerto turístico y oasis agrícola en la puerta norte del desierto de Atacama.
Tal es el meollo de su libro La comarca, en el que Gatica se ha sumergido en un maremágnum de documentos, testimonios y acontecimientos históricos para construir con ellos una especie de collage poético en torno a esas heridas calamitosas que han ido marcando durante casi quinientos años la historia de ese lugar y de sus habitantes.
Publicado en estos días virulentos por la ariqueña Editorial
Aparte, el volumen se abre con un subtítulo elocuente y para nada optimista sobre la identidad regional: "Ensayo sobre el desarraigo". Son casi 150 páginas que hablan justamente de la precaria condición de pertenencia de Arica con respecto a sucesivos imperios y repúblicas, extensa historia que la ciudad, a pesar de haber sido siempre considerada importantísima, se ha visto obligada a recorrer más bien a la mala de Dios.
Con textos en verso y en prosa, Gatica va disparando pequeños relatos, a veces sólo un par de cifras o citas textuales, que van construyendo una crónica de ese largo derrotero, desde los tiempos en que el pirata Francis Drake se dio un festín de cañonazos y toda clase de rapiñas en el puerto ariqueño hasta los días en que el histórico Morro ya se encuentra consagrado como escenario predilecto de suicidios y en las calles pulula una fauna de parias sociales que alguien quisiera borrar del paisaje cuando llega un crucero lleno de turistas.
En su recorrido, el libro deja al descubierto diversos dramas históricos. Así, por ejemplo, testimonios de la esclavitud colonial y de la frágil sobrevivencia de la numerosa población afrodescendiente —que antes de la Guerra del Pacífico llegó a ser muy mayoritaria en algunos sectores, como en Lluta— quedan contrastados con el racismo galopante que implicó la chilenización de fines del siglo diecinueve y primera mitad del veinte, proceso en que nadie parecía estar en su propia
tierra: ni los recién llegados, ni los peruanos chilenizados, ni los negros, ni los indígenas, cosa que alcanza incluso el presente, con declaraciones racistas en Facebook de una magistrada de la república encargada de asuntos migratorios.
Las páginas de Gatica muestran de ese modo que la historia identitaria local es tan compleja que los líos limítrofes entre peruanos y chilenos vienen a ser un pelo de la cola si se considera que Arica ha estado siempre para la patada y el combo. Así como en la Colonia tuvo que ser el puerto de salida de la plata de Potosí y con ello se transformó en un botín favorito de piratas ingleses y holandeses, ser la cabecera chilena la ha vuelto un lugar de campos minados, devaluación de la vida por el narcotráfico y el contrabando, historias terribles de migración y poblaciones abandonadas al destino de lo que se ha venido llamando "zonas de sacrificio" por contaminación por plomo y arsénico.
No por nada, en la última página, el poeta despide a los lectores con la misma irónica mirada turística con que comenzó: "Buen viaje les desea / el cementerio / más viejo / de Chile".
Imperio chileno
Desde la ocupación de Arica en la Guerra del Pacífico, con la toma del Morro marcada por el explosivo cóctel de la "chupilca del diablo", el libro de Gatica toma una posición crítica con respecto a la situación nacional de la zona. Niños que juegan con cabezas de momias prehispánicas o son violados bajo un puente oponen un terrible ejemplo de lo que puede significar vivir en una zona fronteriza, que siempre parece limitar con algo, con alguna patria, con alguna identidad o con alguna ley.
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Ciudad de la Eterna Primavera muestra su lado oscuro y sangriento
"La comarca" de Mauro Gatica Salamanca, Editorial Aparte, 2021, 148 págs.
Por Leonardo Sanhueza
Publicado en Las Últimas Noticias, 3 de mayo de 2021