1
Las preciosas ridículas
Así las llama el lenguaje
cuando las ve pasar
por una calle en penumbras
Ajenas a todo peligro
las palabras se alejan
tomadas de la mano
pateando piedras verdes
y huesos sin edad
Bajo puentes de espuma
el silencio lame su pelaje
como una pasión inútil
oye voces a lo lejos
pasos que se aproximan
Afila entonces sus colmillos
sus garras oceánicas
y espera agazapado
tras la página en blanco
2
El lenguaje es un callejón sin salida
donde supuestos gatos lamen su pelaje
. . . . . . irreal
El silencio carga un ataúd con palabras
. . . . . .degolladas
Una página en blanco lo sigue de rodillas
Los gatos maúllan un coro irrepetible
. . . . . .y luego desaparecen
Entre árboles enanos el viento mueve
. . . . . .los labios
para comprobar que existe
3
Todas las palabras arrastran
un ataúd para el silencio
Vagan por la página en blanco
armadas hasta los dientes
y duermen con los ojos abiertos
por temor a Dios
Hablan durante el sueño
de blancas colinas
de valles nevados
donde pasta el lenguaje
donde balan los rebaños
su canción desesperada
Lo que no saben las palabras
es que cargan su propio ataúd
4
Las palabras no saben qué hacer con sus vidas
habitan el poema porque no tienen dónde ir
quien les regale un pan o una camisa de fuerza
ahora que Vallejo desmiga la eternidad
y Artaud maquilla su sombra a la orilla del Sena
5
Qué pasa por la mente del lenguaje
cuando todo parece diluirse en un ácido
. . . . . .feroz
y las palabras son las víctimas eternas
de ese asesino en serie que es el silencio
cuyo epitafio fue escrito por un niño
. . . . . .que no sabe leer
6
Como una roca fúnebre
bajo la cual descansan
los restos de nadie
así el silencio es la voz
que nos habita
nuestro ataúd en el vacío
7
Las palabras no tienen parientes
las que fueron enterradas
en la fosa común
seguirán allí
hasta que sean repatriadas
por una lengua invisible
parecida al silencio
8
En la morgue descansan las palabras
sin un cuerpo donde dar a luz
9
Epílogo
Lo que nombras
ya no te pertenece
se lo lleva el viento
a una tierra baldía
donde ladra de noche
su canción desesperada
-Del libro inédito Las palabras se quitan la edad