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EL OMBUDSMAN SURGIO DE LA CRISIS DEL PEOR MONARCA SUECO
Por Omar Pérez Santiago
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Gustav IV Adolf fue el peor monarca sueco. Era feo, narizón y llevó a Suecia a un abismo, al colapso. Abominó la libertad de expresión y actuó perturbado en política internacional. Esa élite sueca –como la actual élite chilena- mostró una aterradora falta de juicio político.
Por sus errores Suecia perdió todo el territorio que hoy es Finlandia y un cuarto de la población del reino.
El monarca fue un ejemplo de cómo disolver rápidamente un reino. No tenía ningún interés en evitar la desgracia. Un rey que ignora las secuelas de sus actos convierte en apocalíptica la realidad. The Walking Dead. Ve a la gente como masas de zombis rodeando el palacio. El inepto rey tenía deficiencias profesionales y humanas.
La crisis derivó en un Golpe de Estado.
En marzo de 1809, el rey Gustav IV Adolf fue capturado en el Palacio Real y encarcelado en el Castillo de Gripsholm, al borde del lago Mälaren, a 70 kilómetros de Estocolmo.
Finalmente, el rey abdicó y abandonó Suecia.
Se instauró un nuevo régimen. Suecia promulgó una nueva Constitución con dos pilares: la libertad de expresión y la transparencia. Se incorporó a la constitución el Ombudsman, el Defensor del Pueblo. El derecho ciudadano está consagrado en la Constitución, en el rol del Ombudsman y su efectivo control de los funcionarios del Estado.
La Constitución de 1809 surgió inspirada en las revoluciones liberales continentales y se mantuvo sin cambios hasta el año 1974. La construcción del estado social sueco se produjo por la vía legislativa. De ese modo se construyó un sistema de gobierno de mayoría, por la vía política parlamentaria.
Los países latinoamericanos en su gran mayoría tienen hoy el Ombudsman, figura jurídica de protección de derechos ciudadanos.
Chile no tiene un Ombudsman con rango constitucional, a pesar de toda la charlatanería de la podrida elite chilena.
Aun así, hay dos instituciones nuevas, que en la actual crisis social chilena, han tenido un comportamiento notable, ellos son:
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) y la Defensoría de los Derechos de la Niñez.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) se creó por ley en el año 2005. Es una corporación independiente y autónoma de derecho público que promueve y proteger los derechos humanos de las personas. Es miembro de Federación Iberoamericana del Ombudsman (FIO) y se financia con fondos públicos.
La Defensoría de los Derechos de la Niñez se creó por ley en el 2018, para velar por los derechos de los niños y niñas por parte de los órganos del Estado.
Una nueva constitución debe incorporar la institución de Ombudsman con rango constitucional. Urgente.
Yo creo que la Constitución debería también incorporar una Defensoría de los Consumidores, para defender al ciudadano frente a los atropellos de las grandes empresas, y que reemplace el actual e inútil Sernac, hoy una cáscara vacía.
