Proyecto Patrimonio - 2005 | index | Reinaldo Edmundo Marchant | Autores |

 

 

 

 

Nueva novela de Reinaldo Edmundo Marchant
Las Vírgenes no llegarán al Paraíso,
............... una novela psicológica y de amor



Por Mauricio Barrientos
Poeta, Consejero del Libro y la Lectura



Reinaldo Edmundo Marchant (Santiago de Chile, 1958), acaba de sacar su última novela que tiene un título que descoloca, "Las vírgenes no llegarán al Paraíso", Bravo y Allende Editores, 2005, que viene engrosar su vasta y premiada producción literaria, que partió con una propuesta muy novedosa en los años ochenta, catalogada por la crítica como "maravillosa", pero que hacia fines de los noventa y en estos últimos años ha tenido un cambio: estoy pensando en la excelente novela "La patria golondrina", 2002, y el aplaudido texto "La alegría del pueblo. Historias de fútbol", 2004, para muchos el primer libro de ese género escrito en Chile, que lleva tres ediciones y que lo ha conectado con personajes brillantes como el argentino, Campeón del Mundo en México 1986, Jorge Valdano, y el mexicano Juan Villoro. En esta novela, Marchant concentra todo el ímpetu, la que es y será leyenda, sobre todo por el tema, el buen manejo de la trama y del montaje. La historia comienza con un feliz epígrafe: "¿Qué me condujo a perder la cabeza por esta chica de catorce años? Respuesta: ¡su virginidad! O la que yo estúpidamente imaginaba...". Se trata, sin duda, de una novela psicológica, cuyo cebo es la relación sentimental de dos jóvenes que terminan enamorándose en plena dictadura, ella con familiares desaparecidos y él con un padre que formaba parte del sistema de inteligencia militar. El nudo, es grande, a ratos ahoga, pero el autor se las arregla para hacer encajar todos los detalles. De forma interpolada, se describen micro relatos, que alimentan la trama central. Lo es, Marcos Luna, un estudiante universitario ligado a la resistencia, y Joaquín, un psiquiatra anarquista; ambos son descritos de forma extraordinaria, aunque sus vidas tienen el destino trágico por su antagonismo al gobierno militar.

El narrador de esta novela se entrega a las aventuras y desventuras que la vida le va dando. En su calidad de omnisciente está consciente de sus deseos, su verdad, de su acción. Nada pueden cambiar en la historia de la trama, en su lugar de origen, donde los acontecimientos suceden en el devenir de las cosas. El deseo obsesivo, el de la castidad, naturalmente, está por sobre todo, incluso la melancolía, la pasión desenfrenada, el sentimiento de la ansiedad, la angustia, temores, en un estado donde las experiencias no parecen ir al "paraíso".

Es así como es este hablante, personaje central del libro, Carlos Freire, a ratos puro, sencillo incluso, algo torpe "en la ciencia del amor", se enamora de su "víctima", la chica hermosa que presume casta, ella le sirve como eje fundamental para despertar todo el mundo interior de su ser, donde se ocultan sus demonios, los deseos imposibles, el drama, la zona perversa que ignora, que se ve reflejado en esta criatura ingenua, provocadora, que recuerda a personajes de novelas de Ernesto Sábato, o de Edgard Allan Poe, por su intrincada mente, obsesión extrema y búsqueda infernal de un deseo alejado de toda lógica.

Destaca también el humor y ritmo constante en la novela. Los diálogos ágiles, logrados, que son un buen recurso a la hora del desahogo. Igualmente, lo es la atmósfera bélica, aterradora, de los peores años de la dictadura, que es, a fin de cuentas, una paradoja literaria: mientras en Chile se torturaba y se desaparecía a la gente, el personaje central de libro, ajeno a la violencia desatada, anda en busca de la virginidad... Todo aquello logra un efecto que remece y no desentona con el contexto esencial de la historia.

"Las vírgenes no llegarán al paraíso", es una novela para disfrutarla, para devorarla en un envión, sobre todo para reflexionar en una época turbulenta, en los demonios del personaje y en los propios, en la miseria que queda retratada. Pero, más allá de todo, Reinaldo Marchant ha escrito seguramente su mejor novela, dando muestra la versatilidad creadora que ha demostrado en los últimos años.

 

 

Reinaldo Edmundo Marchant: Santiago, 1958. Estudió en la Facultad de Letras de la Universidad Católica. En 1974 sale al exilio -Argentina y Venezuela- junto a su familia.

En Octubre de 1988, después del histórico triunfo del "NO", irrumpe en el medio nacional ganando el prestigioso premio de novela Andrés Bello con "El Abuelo", certamen en el que participó con cinco trabajos inéditos. Su obra ha sido distinguida en Uruguay, Colombia, Argentina y EE.UU.

Es autor de ocho novelas, tres libros de cuentos y tres antologías, una de ellas en coautoría con Mario Benedetti. Ha sido articulista, crítico literario, columnista de fútbol y colabora con diversos medios de prensa nacional e internacional.

Fue Agregado de Cultura y Prensa en Uruguay y Colombia (1994-2000). Sus libros han sido publicados en varios países de Sudamérica y algunos de sus cuentos fueron adaptados al teatro en Argentina y Colombia.

Su obra ha sido distinguida con los siguientes reconocimientos: Premio Universidad Católica de Chile (1985), Premio Nacional Antonio Pigafetta (1986), Premio "Cuentos de mi País", Bata, (1987), Premio de Novela CMI Suiza (1989), Premio Internacional Cuento Latino, EE.UU. (1990), Premio Municipal Eusebio Lillo, (1992), Premio Asociación Uruguaya de Escritores, Uruguay (1994), Premio Crítica Literaria Asociación de Mujeres Escritoras de Uruguay, (1995), Premio XV Concurso de Novela de Colombia, (1999). En 1996 es nombrado Miembro Correspondiente por la Academia Uruguaya de Letras.

Actualmente es Presidente de la Sociedad de Escritores de Chile.


 

 

 

Proyecto Patrimonio— Año 2005 
A Página Principal
| A Archivo Reinaldo Edmundo Marchant | A Archivo de Autores |

www.letras.mysite.com: Página chilena al servicio de la cultura
dirigida por Luis Martinez Solorza
e-mail: letras.s5.com@gmail.com
"Las Vírgenes no llegarán al Paraíso", una novela psicológica y de amor.
Por Mauricio Barrientos.
Poeta, Consejero del Libro y la Lectura.
Diciembre de 2005.