CUENTOS DEL MAULE
Por Reinaldo Edmundo Marchant
Cuando llegue el momento de valorar la gran narrativa que se ha escrito en los últimos ochenta años en el país, sin duda que la literatura criollista estará, vivita y rebosante, muchos escalones arriba que los recientes textos con trama 
de teleseries, con tediosos formatos policiales y disparadas sin escrúpulos con poderosa máquinas mediáticas.
A pesar de todos los esfuerzos por empalidecer a los notables escritores de principio del siglo XX, no ha sido posible: la obra de aquellos autores suma una calidad que según transcurre el tiempo crece, se legitima y se reconoce, es más estudiada, y perdura a nivel del público, escuelas y universidades, sin haber necesitado el mínimo apoyo comunicacional y tramposo para ofrecer el producto.
Por ello resulta grato a la vista encontrar el libro “Cuentos del Maule” –Bravo y Allende Editores-, del escritor sureño Miguel de Loyola, que entrega un conjunto de excelentes relatos de historias ambientadas en territorios rurales, novelando con dominio aquellos mundos, creencias, tradiciones y toda su humanidad, que recuerdan con fuerza las mejores páginas creadas por los principales autores criollistas y naturalistas del siglo pasado.
Tanto lo es, que el título “Cuentos del Maule”, está tomado de un libro publicado por Mariano Latorre en 1912, y claramente Miguel de Loyola lo hace para reconocer y honrar el amor a la tierra, al hombre campesino, y a los ancestros que siguen marcando el origen de esa patria a veces olvidada.
También lo hace para glorificar a aquellos extraordinarios novelistas y cuentistas que han sido indispensables en el panorama cultural de Chile.
Son quince relatos, bien tramados, con estilo literario, precisión y economía de lenguaje, narrados con distintos puntos de vista, que revelan a un escritor que conoce el oficio, que maneja sus herramientas y saca máximo provecho de las técnicas literarias, tan olvidadas en los libros que a modo de salchichas desechables promocionan las casa editoriales multinacionales.
Miguel de Loyola, con sus Cuentos del Maule, se inscrito legítimamente, con todo derecho, en la perenne galería de aquellos grandes autores que novelaron historias, anécdotas y tradiciones de la rica geografía rural y campesina.
