Proyecto Patrimonio - 2018 | index | Ramiro Rivas | Autores |
LA VERSATILIDAD DE PATRICIO PRON
Lo que está y no se usa nos fulminará. Literatura Random House, 2018
Por Ramiro Rivas
.. .. .. .. ..
Patricio Pron (Rosario, 1975) es uno de los escritores más talentosos de las nuevas corrientes literarias argentinas. Sin embargo, paradójicamente, se podría decir que es el menos argentino de esa promoción. Es posible que se deba a su procedencia provinciana, alejado de las influencias porteñas de los capitalinos. O, más bien, a su formación europea, puesto que estudió filología románica en la Universidad Georg-August de Gottingen (Alemania) y reside hace un par de décadas en Madrid.
No obstante sus pocos años, ha publicado siete libros de cuentos y siete novelas, además de un par de libros de ensayos. El aplauso unánime de la crítica no lo altera y es un riguroso analista de su propia obra. Su versatilidad narrativa lo ha mantenido distante de la literatura de autoficción que está tan en boga en las nuevas generaciones de narradores. “Tiendo a huir como de la peste de todo libro que se presente como tal”, ha expresado en reiteradas entrevistas. También es tajante al referirse a sus colegas y a su propia obra: “Me considero un magnífico lector de primeras 40 páginas de libros de cuentos. Mis propios libros de cuentos no se 
sostienen más allá de esas 40 páginas”.
Falsa modestia o no, el nuevo libro de relatos de Patricio Pron, Lo que está y no se usa nos fulminará (Penguin Random House, 2018), reúne doce cuentos magistrales que se leen hasta la última línea con satisfacción. Pron siempre se ha caracterizado por titular sus obras con nombres kilométricos, que deben causar espanto a sus editores. Algunos de ellos: El mundo sin las personas que lo afean y lo arruinan (2011), El espíritu de mis padres sigue subiendo en la lluvia (2012) o La vida interior de las plantas de interior (2013).
El título Lo que está y no se usa nos fulminará, lo tomó de un estribillo de una canción de Luis Alberto Spinetta. Es lo poco y nada de argentinidad que poseen estas historias ambientadas en diversos países europeos y con personajes de diversas nacionalidades. Pron posee gran habilidad para experimentar con la articulación formal de sus relatos y las voces narrativas. Por eso ironiza al confesar que todos estos textos podrían catalogarse bajo el epígrafe “la clase de cosas que en un taller de escritura te dirían que no debes escribir”.
De este libro se podría deducir que son doce maneras de encarar un cuento. Patricio Pron maneja con notable pericia las disímiles estructuras de sus relatos, mediante una suerte de entrejuego de realidades en diferentes planos narrativos. Una historia de inicio realista y lineal, pronto puede devenir en lo disparatado e irreflexivo. La parodia de sí mismo, al retratarse en un cuento como personaje, con nombre y apellido, le permite cuestionar el oficio del escritor contemporáneo exitoso, forzado a promocionar sus obras en giras interminables que le impiden escribir. Para subsanar este problema, el protagonista de esta ficción contrata a dos actores para que lo representen en los lanzamientos en provincia, produciéndose una hilarante confusión de identidades.
En el primer texto, Salón de refusés, Pron emplea una variedad de planos narrativos, mediante los cuales va armando y desarrollando la trama que nos propone, para, simultáneamente, ir negando a continuación la historia. Su dominio de los tiempos y las situaciones, sorprende y, por momentos, desorienta, no obstante lograr su objetivo final. La originalidad de su estilo, la capacidad de experimentación, transforman a Patricio Pron en un escritor que hace mucho ha dejado atrás ese cuento canónico que fijaba el texto con principio, medio y desenlace sorpresivo. La imaginación creativa, la destreza formal, el humor reflexivo, la parodia y una inteligencia a toda prueba, sitúan a Pron a la altura de un Ricardo Piglia o César Aira, de quienes se declara su heredero. Su principal virtud lo constituye su versatilidad.
En Notas para un perfil de Tinder, una relación de pareja se rompe por la torpeza del protagonista al rechazar la compañía de un hámster a la niña de su prometida, y cometer un accidente casual que termina con la vida del roedor.
La repetición es uno de los relatos más extensos del volumen y uno de los más insólitos. Narra el viaje de un hombre maduro, casado, a un congreso a Río de Janeiro, su ciudad natal, en donde el personaje ha vivido en su adolescencia. Pero lo que perturba la existencia del hombre y lo impulsa a realizar actos irreflexivos, proviene de una antigua fotografía descubierta en su hogar antes de partir de viaje, que corresponde a una escena en que figura al lado de una niña morena, enlazada por la cintura, en una fiesta escolar. Con esa imagen en la mente, trata de reconstituir ese acontecimiento del pasado en una representación modelo de esa época en tiempo presente.
La mayoría de los personajes de patricio Pron son seres vulnerables, desadaptados de la sociedad, perplejos ante una realidad extemporánea, por momentos ridículos, pero a la vez poseedores de una oculta sabiduría al filo del absurdo. Su capacidad para distorsionar la normalidad de sus protagonistas y guiarlos en una búsqueda de lo insólito, son características únicas de su escritura.
Nada mejor para cerrar esta reseña que citar un comentario de la solapa del libro: “Lo que está haciendo con su obra, es reinventar la narrativa en castellano, contar cosas que nunca se contaron en nuestra lengua”.
(14-09-2018)
