Para un lector común y corriente, desprovisto de una cultura poética, enfrentarse a la lectura de “La persistencia de la imagen”, puede resultar alarmante, ya que deconstruye la idea tradicional que este lector pueda tener del género poesía. Sin embargo, para comprender porque se producen textos como “La persistencia de la imagen”, hay al menos que señalar algunos antecedentes. En la década de los 80 se produjo en la poesía chilena una revisión crítica y por ende una reformulación de las estéticas dominantes, lo que por una parte la amplificación del significante y a la vez posibilitó y potenció un diálogo retroalimentante o un entramado de relaciones entre la poesía y otras artes y medios, como por ejemplo el cine, el video arte, la televisión etc., lo que da lugar a que en el texto poético se haya producido una irrupción de códigos disimiles y a la vez un modo ecléctico de trabajar con estos códigos. Por otra parte, comenzaba a imponerse una cultura visual por sobre una cultura literaria, pero más que procesos, se producen reprocesamientos, entrecruzamientos, hibridaciones, y por cierto adviene la posibilidad de estructurar el poema como guión f'ilmico. Heredero directo de estas posibilidades y de estos reprocesamientos, y hibridaciones, es el poeta Hugo Villar Urrutia, (quien, ya contando con una significativa trayectoria en el terreno del cine, videoarte y documental, además de un volumen de poesía y uno de cuentos) se suma con propiedad a esta línea experimental que comienza a incorporar al terreno poético no sólo técnicas fílmicas sino un lenguaje narrativo-cinematográfico. En este sentido se pueden establecer las filiaciones directas, de las que este texto sería deudor y a la vez continuador. Filiaciones directas con poetas como: Gonzalo Millán, Gonzalo Muñoz, Egor Mardones, Thomas Harris, Javier Campos, Alexis Figueroa, Ricardo Mankhe, Luis Ernesto Carcamo, etc. “La persistencia de la imagen”, apunta en esta dirección, el texto se presenta bajo la forma de un guión literario y un guión cinematográfico, se estructura basado en los principios del montaje. Dividido en III partes o más bien en secuencias, escenas, o agujeros de guiones, el texto en su conjunto alude a la idea de Mc Luhan “Delante del televisor, el espectador es una pantalla”. Los textos de “La persistencia de la imagen”, se apoyan en su mayoría sobre una trama cerrada, disponiendo de un verosímil fundamental, donde la lógica no pertenece a los hechos relatados sino a la lógica del texto. Por tanto los hechos no están subordinados a la estructura de la experiencia, al contrario los hechos son registros diversos de un pensamiento en movimiento, donde las alusiones a una cultura cinéfila, a la fragmentariedad del postmodernismo, al malestar de la sociedad de masas, a la crisis valórica de la sociedad de consumo, son afines a la mirada sobre el marco geográfico o tal vez transregional donde se sitúan en su mayoría estos pensamientos en movimiento, la Ciudad de Talca. En “La persistencia de la imagen”, la imagen esta desligada de la instantaneidad, más bien esta imagen esta ligada a la duración, por cuanto a la duración corresponde la supervivencia del pasado en el presente, puesto que sin esta supervivencia no habría duración, solo instantaneidad. Sin embargo, algunas imágenes pertenecen a la instantaneidad, y no a la duración, por lo tanto, no poseen pasado, y se establecen consume en un presente que se consume rápidamente. La imagen también estaría ligada a su auto movimiento. También podría leerse “La persistencia de la imagen”, al estar sostenida en una estructura no tradicional, como una respuesta a la incapacidad representativa que Todorov señalara en cuanto al discurso poético. Tal vez trabajar un texto poético que escape a la factura tradicional, responda a la crisis de la representación en si misma, tal vez un texto alejado de la estética tradicional, y más cercano a la estética intermedial que bajo la simulación de un guión cinematográfico o literario y en las proyecciones significativas de un yo cinematográfico y no desde aquel yo lírico tradicional pueda registrar, y dar cuenta de todos estos pensamientos en movimiento, percepciones, retenciones, imaginaciones hasta llegar incluso a los límites de la metaficción. Para responder a esto les invito a leer “La persistencia de la imagen”.
www.letras.mysite.com: Página chilena al servicio de la cultura
dirigida por Luis Martinez
Solorza. e-mail: letras.s5.com@gmail.com "Persistencia de la imagen", de Hugo Villar Urrutia.
Presentación de Rodrigo Verdugo Pizarro
