CONDORITO
EN SAN MIGUEL
Por
Aristóteles España
"Nada hay
más poderoso en el mundo que una idea cuya hora ha llegado", decía
Víctor Hugo. Es el caso de Condorito, el más popular de los personajes
de historietas chileno, que viene de triunfar e instalarse en Argentina, y otros
países latinoamericanos, con su vestimenta de hombre de la zona central
de Chile, ojotas, poncho, y pantalones humildes que delatan su estirpe de roto
chileno, un auténtico hombre de pueblo, cazurro, pícaro, picado
de la araña y otras definiciones tan populares como él.
Siempre
será un misterio por qué caló tan hondo en las clases humildes,
y en la juventud, este hombrecito - cóndor, apolítico, conformista,
y el por qué no es del agrado de los sectores "cultos" o de
la clase media intelectual que prefiere a "Mafalda", la niña
argentina que odia la sopa y no soporta a los militares, ni a los ricos, y menos
a los liberales de derecha y a los curas retrógrados.
Nuestro pajarraco
es humilde, y habita en los bares de San Miguel, o de otra comuna de Chile que
tiene esos ingredientes que lo transforman en ícono de los trabajadores
urbanos, rurales, funcionarios públicos y privados, de quienes ven pasar
la tarde leyendo una revista, jugar fútbol con los amigos de la comuna,
mirar los encantos de las muchachas del sector, protestar por qué no solucionan
sus pequeños problemas del barrio, y armar eventos siempre en compañía
de la familia y de sus autoridades que no hacen grandes discursos sino que están
donde las papas queman.
Pepo, su creador, lo quiso así. En todas
partes hay un Garganta de Lata que llega a cualquier hora a tu casa, o un desvalido
Comegatos que pide plata para ir al centro a hacer un trámite al Ministerio
de Educación, a una repartición pública, o Pepe Cortisona,
ese amigo locuaz y engreído que está siempre a la vuelta de la esquina
acechando a algún incauto para proponerle los planes más descabellados.
Y el Compadre paleteado, que oficia de padrino de los niños y tira monedas
cuando se casa la hija del vecino con el cual fueron a la escuelita cercana y
se conocen desde "cabros".
Julio Palestro, hijo y nieto de la
legendaria familia de políticos socialistas, de la comuna de San Miguel,
Santiago, es hoy el Alcalde que pasará a la historia de Chile por invitar
y ofrecerle residencia definitiva a Condorito en su pueblo. Junto a su Secretario
de Educación y Cultura, Jaime Fuentealba, al escultor Sammy Salvo, y cientos
de personas, autoridades, pobladores, lo recibieron en la Gran Avenida, paradero
6 de la capital chilena este jueves 26 de octubre, con música y honores.
Condorito no andará por las calles ni de allegado en alguna plaza o ciudad,;
ahora, cuando no esté en Pelotillehue, su enclave natal, será un
vecino más de la comuna de San Miguel, para recocijo de los niños,
mujeres, hombres, turistas, de todo Chile y el extranjero.
Se realizarán
jornadas deportivas en su nombre, concursos de comics, recitales de música
y poesía, jornadas de teatro con su presencia, los desfiles y eventos de
los sanmiguelinos serán todos en su honor.
Condorito estará,
como siempre, acompañado de su dulce novia Yayita, de su sobrino Coné,
de su suegra, la señora Tremebunda, y de todos sus amigos, para crear un
imaginario popular lleno de sabiduría; de esta manera se crea una corriente
positiva en la sociedad. Las historias locales estarán llenas de contenido
con las aventuras de Condorito, al cual será posible verlo en el casino
del Centro de Cultura, en la misma Municipalidad, tomando café con el Alcalde,
conversando con algún funcionario o habitante que llega en busca de información
para algún proyecto y durante los fines de semana asistirá a algún
asado familiar, o simplemente visitará alguna feria libre, comprará
algo para el almuerzo, pues ya está en casa y ese ambiente a él
le gusta mucho. También, averiguará que por ahí cerca del
Estadio suele verse al detective Heredia, el investigador de las novelas de Ramón
Díaz Eterovic y otros personajes de leyenda, como Homero Portugal, Aniceto
Hevia y otros compinches.