ENTREVISTA
CON
GASTON CORNEJO BASCOPÉ,
SENADOR,
MÉDICO, ESCRITOR Y PRESIDENTE DE LA BANCADA DE SENADORES DEL "MAS",
EN BOLIVIA, QUIEN VISITA CHILE PARA PARTICIPAR EN ACTIVIDADES ACADEMICAS Y EN
EL FORO SOCIAL
Por
Aristóteles España
El
Senador Gastón Cornejo Bascopé es médico cirujano
egresado de la Universidad de Chile. Al graduarse, trabajó en el Servicio
de Cirugía del Hospital San Borja. Al regresar a su país fue Presidente
de la Sociedad Boliviana de Cirugía y Presidente de la Sociedad de Escritores
de Bolivia. Hombre clave del Presidente Evo Morales su cercanía con Chile
le permite observar con ojos agudos lo que ocurre en el proceso de acercamiento
entre nuestros países, tarea compleja para la diplomacia de ambos Estados
que ya costó la salida del Cónsul del vecino país hace una
semana.
Con estudios de post grado de cirugía en Suiza, el Senador
Cornejo aún recuerda su etapa de estudiante en Santiago, los paseos por
los bares de calle Bandera, especialmente el "Zeppelín" y "El
Rápido", junto a bellas estudiantes, escritoras y actrices, las librerías
de San Diego, el Cerro Santa Lucía, lo invade la nostalgia por el Santiago
de los tranvías, desde Vergara a la Facultad de Medicina de Independencia;
su amistad con Pablo Neruda, y lo embarga el dolor al recordar a sus compañeros
estudiantes de medicina fusilados por la dictadura: Gabriel Castillo e Iván
Insunza.
Cuando egresó junto a 95 médicos, presidieron el
acto el Rector Juan Gómez Millas y el Dr. Hernán Alessandri Rodríguez.
Aún recuerda a sus condiscípulos, entre ellos a Francisco Prince,
Hugo Peralta, Adela Rubio, Martha Vernal, Ema Vicencio, Julia Meyer, Juan Carlos
Concha, quien fue Ministro de Salud de Salvador Allende.
Actualmente es
el Jefe del Comité de Relaciones Interparlamentarias del Congreso de su
país.
1. Cuáles son la expectativas
del gobierno del Presidente Evo Morales con relación al tema marítimo
con Chile. Cuáles son los metas que se han trazado y qué espera,
tanto el Presidente, como Ud. de ellas.
GCB. Está grabada
en impronta de fuego en el corazón de todos los bolivianos, desde que nacen,
la añoranza por recuperar la soberanía marítima en el Océano
Pacífico. La educación tradicional es sumamente negativa, despertadora
de un odio ancestral, sobre todo la del historiador Alcides Arguedas. Se afirma
que la Guerra del Pacífico fue una invasión no declarada, una usurpación
por parte de Chile. Parece que en el hermano país, se enseña que
Bolivia jamás tuvo mar desde su nacimiento como República en 1825
y que, mediante la Alianza Perú Boliviana agredimos a Chile en 1879.
La
verdad es que ninguno de los dos países se conocía y sobre todo
Bolivia, de vocación pacífica, jamás preparó una fuerza
bélica ni intentó guerra alguna. El estado de desarrollo del país
era tan deficiente que las fronteras estaban prácticamente abandonadas
a pesar de las inmensas riquezas propias contenidas en guano, salitre y cobre,
sobre todo las de cobre en los yacimientos de Chuquicamata explotadas desde los
Incas. Fue el Libertador que ordenó a otro prócer de origen irlandés
el Gral. Francisco Burdett O´Connor, ingeniero, que visitara la costa para
el puerto de la nueva nación. Determinó que fueran en el Loa o en
Cobija los lugares preferentes. El historiador
Roberto Querejazu en su obra
"Guano Maldito", afirma que para controlar la explotación
de cobre en Caracoles, Melgarejo ordenó la fundación de Antofagasta.
Fueron
las compañías inglesas explotadoras que tramaron todo tipo de problemas
y los gobiernos, sobre todo los de Chile, asumieron el conflicto y determinaron
una cruenta guerra, sobre todo contra el Perú, el aliado natural de ese
tiempo histórico. Luego, Chile avanzó hasta Lima y clausuró
nuestra salida soberana al mar, quedando para sí con el departamento occidental
de Bolivia, el Litoral perdido. La única acción bélica en
la que participó Bolivia fue en la Batalla del Alto de la Alianza, en Tacna,
donde el Servicio Médico de las Ambulancias, de responsabilidad boliviana
(así se denominaban los apoyos de salud) fue relevante. Las pocas fuerzas
armadas fueron diezmadas y hasta los prisioneros pasados a degüello, según
informaron los testimonios de los médicos responsables.
Bolivia,
el año 1904, en difícil sesión parlamentaria, aprobó
la firma del Tratado de Paz y Amistad ante la posibilidad de una invasión
de las FFAA chilenas desde Arequipa. El Perú clausuró toda gestión
y cerró el candado en 1920.
Desde entonces, Bolivia depende de Chile
y del Perú para retornar al mar con soberanía. Este último,
asegura que jamás interferirá la negociación sobre el mar
para Bolivia.
Muchas fueron las posibilidades de solución pero fracasaron
rotundamente hasta el presente.
Los intentos más importantes fueron
las gestiones del presidente Salvador Allende quien solicitó a Volodia
Teitelboim que visitara La Paz para solucionar definitivamente el diferendo, satisfactoriamente
para Bolivia. Posteriormente, el Presidente Aylwin, con su Canciller Silva Cimma
de parte de Chile y Jaime Paz Zamora con el Canciller Ronald Mc Klean, quienes
volvieron a asumir responsabilidades en el espinoso tema. Fracasaron por declaraciones
del Almirante Merino y nuevamente se rompieron las relaciones diplomáticas.
El
nuevo Presidente indígena Evo Morales AIMA, genera otro escenario, el mismo
que nace de la entraña cultura del pueblo indígena boliviano en
sus nacionalidades aymará, quechua y guaraní y las decenas de etnias
menores, con sus valores intrínsecos, solidaridad, inclusión, complementariedad,
respeto y el diálogo democrático pacifista.
En el nuevo escenario
que actualmente vivimos, a inicios del siglo XXI y con dos presidentes que se
identifican en marcos ideológicos comunes, en principios que valoran la
Integración Latinoamericana, resulta imprescindible retornar al diálogo
con agenda abierta, sin exclusión para tratar muchos temas de importancia
bilateral con la posibilidad cierta y necesaria de reabrir cauces de relación
diplomática efectiva entre ambos países hermanos.
Por tanto,
las metas que espera el gobierno de Evo Morales y el pueblo de Bolivia, es la
de alcanzar acuerdos positivos de beneficio mutuo, pero sobre todo la de lograr
una salida soberana al Pacífico.
2. El cambio
del Cónsul de vuestro país en Santiago fue interpretado por un sector
de la prensa chilena, como un avance de los sectores "duros" de su gobierno
con respecto a Chile, cuál es su opinión?
- Ignoro
absolutamente las razones de la renuncia del ex Cónsul de Bolivia en Santiago,
don Jorge Pinelo. Sé que es un gran diplomático, muy amigo de Chile
y compañero de lucha política de Evo Morales.
Quizá
logre conocer algún tema relativo a su renuncia pero tratándose
de una temática sensible y delicada cual es la mejoría evidente
de las relaciones entre ambos países hermanos que tienen un historial de
crisis, el Presidente Morales exige un tratamiento delicado, positivo y constructivo
de las nuevas relaciones en un ambiente de sincera amistad y diálogo fecundo.
3. Cómo debe producirse la integración
económica y cultural entre Chile y Bolivia, qué pasos se deben realizar?
-
Ya el propio presidente Evo Morales habló de la nueva "Diplomacia
de los Pueblos", a partir de la cálida recepción en el estadio
de Santiago. Entonces, quedó gratamente afectado por la recepción
y la expresión colectiva ¡MAR PARA BOLIVIA!
Continuando esa
línea, queremos fortalecerla mediante una serie continua de intercambios
renovadores, no sólo entre presidentes y cancilleres, vicecancilleres,
más bien entre parlamentarios, tal cual la iniciamos, por iniciativa personal
en el mes de julio con los senadores Alejandro Navarro, Nelson Ávila, los
diputados Alejandro Sule, Marco Enríquez Ominami, los mismos que llegaron
a La Paz dejándonos un grato e imborrable recuerdo de amistad. También
está la diplomacia de los pueblos mediante el intercambio cognitivo, técnico
y espiritual entre escritores, artistas, indígenas, maestros, instituciones
diversas de género, juveniles, religiosas e inclusive de fuerzas militares
como las efectuadas recientemente entre comandantes de las FFAA de ambos países.
En
cuanto a lo económico, es imprescindible equilibrar la balanza económica
comercial, controlar las aduanas, vigilar el ingreso de precursores del narcotráfico
y residuos tóxicos radioactivos (como los que ingresaron en el pasado),
integrar agentes de fronteras, y fortalecer el intercambio energético,
alimentario, de bienes materiales y culturales.
4.
Qué propuestas plantearía Ud. al gobierno de la Presidenta Michelle
Bachelet con relación a la integración entre ambos pueblos y con
respecto al tema marítimo?
- Si tuviera el honor de saludar
a la hermosa presidenta de Chile, en primer lugar, le lanzaría un pensamiento
de respeto a su investidura y de admiración a su belleza y dulzura femenina.
Trataría de lograr su confianza y su amistad para expresarle la enorme
perspectiva que Evo Morales, Álvaro García Linera, todas las autoridades
del Poder Ejecutivo, todos los parlamentarios del Poder Legislativo, todas las
instituciones bolivianas y, sobre todo, el pueblo "profundo" de mi país
tiene en que el delicado tema de la reintegración marítima, ansiando
se torne una realidad, amén de los otros temas que implican negociación,
hidrocarburos, alimentos, bienes materiales, ecoturismo, cultura, derechos humanos
comunitarios y otros.
Gozar de su confianza es importante. Jamás
hemos pensado en una recuperación de mar mediante la fuerza militar ni
presión alguna que ofenda a la ética internacional, Bolivia repito
es un país pacifista por antonomasia.
El cómo lograr esa
misión, no interesa aún. La estrategia debe ser estudiada en forma
minuciosa por técnicos y entendidos de ambos países, lo que importa
es reanudar relaciones diplomáticas e iniciar el diálogo prontamente.
La meta definida debe ser: LA INTEGRACIÓN CHILENO BOLIVIANA en el marco
de la integración continental, misma que aspiramos como realidad imprescindible
en la política futura de nuestras naciones en desarrollo.
Creemos
que el crecimiento económico que pudiera conseguirse, sobre él está
el de privilegiar el desarrollo humano de nuestras sociedades en las que la mujer
y el hombre de nuestra América, sean el sol central de todas las preocupaciones.
5.
Cuál es la situación política actual en su país, la
relación entre gobierno y oposición?
- Creo sinceramente
que es una situación inmejorable. Podríamos calificarla de "Primavera
histórica" y mejor de "aurora política".
Por
fin, Bolivia emerge a la identidad de nación, organiza a su pueblo, rescata
la dignidad enajenada y promueve su desarrollo con soberanía.
Las
fuerzas servidoras de las transnacionales y del neoliberalismo globalizador, estaban
concentradas en los partidos políticos de ADN-MIR-MNR-NFR-UCS y otros menores,
los mismos que trabajaban fuertemente por capitalizar - privatizar todos los recursos
naturales de la minería, los hidrocarburos, los forestales, las vías
de comunicación, ferrocarriles, aéreas y terrestres, liquidar las
instituciones de YPFB-COMIBOL,.el sistema bancario, con grave detrimento nacional,
la dolarización total, la exportación de recursos sin valor agregado,
la obstrucción a toda iniciativa industrializadota. Se elevaron las tasas
del subdesarrollo en salud, educación, vivienda, seguridad social, seguridad
ciudadanía, corrupción, desconfianza y caída de toda autoestima
posible.
El triunfo electoral inédito del Movimiento al Socialismo,
MAS, con un 54% (a pesar del fraude instrumentado y la depuración de electores
humildes) ha permitido iniciar una transformación radical con una nueva
perspectiva histórica y la posibilidad de instalar un desarrollo social
y político radical en todo el territorio y en todos los estamentos sociales,
privilegiando la justicia social en beneficio universal.
La oposición,
centrada en esos partidos bajo la denominación de "PODEMOS" alcanzó
una muy pequeña primera minoría, quedando apenas representado el
MNR (disociado de Gonzalo Sánchez de Lozada) y otra fuerza conservadora
menor denominada "Unión Nacional", con su líder Samuel
Doria Medina, un rico empresario de cemento.
Al fracasar el sistema postmoderno
de la globalización neoliberal, el mismo que se implementó a rodillo
parlamentario hace 20 años en Bolivia, los partidos de la derecha tradicional
quedaron prácticamente huérfanos y carentes de programa ideológico
y entraron en agonía existencial.
Con la colaboración del
poder petrolero, del terrateniente y de la oligarquía foránea y
nacional, la oposición se reagrupó inscribiéndose en la oposición
con la sigla denominada "PODEMOS", sigla usurpada a la izquierda chilena;
en realidad, usurparon también la estrella de cinco puntas soviética
y la bandera roja del comunismo, para engañar a la clase humilde.
Actualmente,
la relación gobierno y oposición es tensa, conflictiva y de franca
diferencia conceptual sobre la imagen que se quiere de país. Tienen gran
responsabilidad los Medios de Comunicación totalmente al servicio de la
oposición.
Existe actualmente una gran marcha de indígenas
de tierras bajas, desde Santa Cruz a Cochabamba, y de allí a La Paz para
presionar por la aprobación de la Ley de Reforma Agraria.
Otro
contingente indígena aymará, marcha por el altiplano paceño.
Se reunirán en la Capital Ejecutiva la próxima semana.
Los
terratenientes de CONFEAGRO, los grandes empresarios, anunciaron una marcha desde
la provincia cruceña de Warnes a la capital Santa Cruz, donde se encuentra
la fuerza opositora oriental, el pensamiento oligárquico que propone la
desintegración de Bolivia en la Media Luna autonomista.
En Sucre,
el empresario Doria Medina ingresó en una huelga de hambre para forzar
en la opinión pública y entre los asambleístas, que los artículos
de la nueva constitución se aprueben por dos tercios y no por mayoría
absoluta, aunque en la propia Ley de Convocatoria, aprobada por consenso consignaba:
"Se aprobará el Texto, trabajado por la Asamblea Constituyente, por
dos tercios, luego será enviada al soberano en referéndum para su
promulgación inmediata. Jamás para cada artículo del texto.
Demoraría mucho tiempo.
En fin, son las artimañas que utiliza
la oposición para obstaculizar el trabajo de los asambleístas. Incluso
introdujeron un cuestionamiento o recurso en el Tribunal Constitucional, organismo
que no tiene ninguna atribución porque la Asamblea Constituyente es originaria
y no supeditada, tiene toda la potestad para crear un nuevo contrato social, otro
país posible. Aunque independiente, por la misma Ley tiene que respetar
a los poderes constituidos.
De otra parte, puedo afirmar que mediante
la democracia dialogal y participativa hemos conseguido grandes consensos, y tratándose
de una nueva forma de efectuar política se han dado verdaderas señales
al pueblo, mediando procedimientos de fraternidad, unidad, respeto a la disidencia
y opciones constructivas que todos aprobaron.
6.
Cuál es el primer balance que Ud. realiza del gobierno del Presidente Evo
Morales?
- Como Senador del MAS y ciudadano boliviano, conocedor
de la historia de frustraciones y debilidades históricas, tales como el
saqueo de todos nuestros recursos naturales, renovables o no por parte de organismos
extranjeros, actualmente transnacionales insaciables.
Después de
tres guerras con hermanas repúblicas vecinas, Chile, Brasil y Paraguay,
por intereses ajenos a nuestro devenir social, creo firmemente que finalmente,
y por primera vez, la historia de Bolivia se llena de dignidad, soberanía,
crecimiento y desarrollo nacional para construir un país diferente con
una visión muy próxima a la utopía humanista y socialista
que soñamos en la ideología de izquierda, combativa y luchadora.
Desechamos
la violenta lucha de clases, el odio ancestral entre burgueses y obreros, la dictadura
del proletariado. La clase campesina originaria e indígena nos ha enseñado
a los profesionales que el compromiso debe ser de inclusión social y política,
que deben primar todos los principios bioéticos, los mismos que la disciplina
mundial reflexiona para el quehacer humano, el respeto a la dignidad de Persona,
la vida humana y ambiental sobre toda consideración, los valores inmersos
en la nueva ciencia política, el humanismo marxista renovado en la biopolítica
humanista.
La investigan filósofos y políticos de nuevo corte,
Enrique Dussel, Leonardo Boff, Petras, Chomski, y hasta economistas como Stiglitz.
Bioéticos como Oswaldo Cháves y René Maugé de Ecuador,
Ludwig Schmidt en Venezuela, Tomás Hirsch con los aliados de izquierda
humanistas y socialistas de Chile. Y en todos los países, escritores como
Galeano, artistas y filósofos como varios de los integrantes de la SECH
de Chile. Ahí puedo nombrar a la figura humana trascendente siempre respetada
de Volodia Teitelboin, la de Fernando Quilodrán, Diego Muñoz Valenzuela,
la del Vicepresidente de la Sociedad de Escritores de Chile, el generoso amigo
y compañero Aristóteles España, de prolífica y selecta
producción. Pero sobre todo, creo que en la profundidad del pueblo chileno
está el tesoro de la acción suprema que esperamos.
Tendría
que escribir largas páginas de crítica y autocrítica positivas.
Enumerar
decretos y leyes relevantes generadas en el breve tiempo de los 10 meses de gobierno,
desde aquellas medidas de austeridad, la reestructuración y organización
del Estado. La Creación de nuevos ministerios como los de Planificación,
(no existía al momento de iniciar gobierno porque vendido el país
con la privatización, no había nada que planificar, todo era de
propiedad transnacional); anulación de otros ministerios como el de Asuntos
Indígenas (había la posibilidad de crear el Ministerio de asuntos
blancoides y eso era ridículo y demostrativo de la diferencia racista de
todos los gobiernos anteriores); Ley de convocatoria a la Asamblea Constituyente,
la misma que comienza a funcionar en la ciudad de Sucre; la Ley modificatoria
y de reconducción de la Reforma Agraria, para distribuir tierras fiscales
colectivamente a las comunidades indígenas, terminar con el latifundio
improductivo y tierras especulativas; leyes que inicien el ataque a la corrupción
en diferentes puntos del horizonte nacional; revisar la Autonomía neoliberal
de las universidades; reforma educativa, salud vivienda, seguridad ciudadana,
etc.
Aristóteles España
Vicepresidente
de la Sociedad de Escritores de Chile
Premio "Gabriela Mistral" de
Chile
Premio "Rubén Darío" del Ministerio de Cultura
de Nicaragua
Santiago, noviembre 20 de 2006.