TERESA
CALDERÓN, OBRA POÉTICA
Aristóteles España
Julio
2006
"Obra poética"
se titula la antología de su obra escrita en el transcurso de estos veinte
años por Teresa Calderón (La Serena, 1955), una de las más
importantes voces de nuestra lírica.
Integrante de la Generación
NN, aquella que comenzó a escribir durante la dictadura militar (1973-1990),
que fue capaz de crear espacios literarios y culturales en un Chile convulsionado
y paradójico, la autora logró trascender su visión individual
del mundo y anteponer un "nosotros" en sus cánticos con causas
perdidas, aves que revoloteaban en un parque, fotografías de pequeños
instantes donde la emoción saltaba de un lugar a otro, a veces por la página
en blanco, otras en el dolor con nombre y apellido, para rescatar la inocencia
de los juegos de juventud.
En las páginas iniciales de este texto
podemos observar como Ovidio y Horacio, mueren ahogados en los discursos y que
Dios creó el mundo con el nombre de queltehue, pirata, niño indio,
en un extraño homenaje a una época que fue pero que aún no
se extingue.
Poesía coloquial donde la esperanza es un recodo que
nos permite observar los ojos del olvido y de cómo su propio país
se remece y mueve como un terremoto por las orillas del tiempo.
Esta muestra
antológica nos permite observar su desarrollo y lecturas cada vez más
vastas. Desde imágenes solitarias y llenas de desamor, hasta la ironía
como recurso para intentar atrapar la muerte. Tarea difícil, que Teresa
Calderón emprende llena de energía y ternura.
Por sus versos
transcurren remotas tardes de infancia y códigos de aguas que se parecen
a su sombra en medio de la nostalgia de un Santiago lleno de smog e intemperie
en la década del 80 cuando publicaba sus primeros libros.
En su
trabajo se aprecia una especial preocupación por la pareja, el ser humano
en toda su estatura, donde dibuja un croquis y retratos hablados de cientos de
mujeres y hombres que se escabullen por las calles y hospitales buscando una respuesta
a la soledad y a todo el misterio de estar vivo y no saber adónde vamos
ni de dónde venimos, como decía Rubén Darío.
En
su poema "Bodas" hay un resplandor o una visión de los tiempos
actuales en medio del consumismo y una individualidad tragicómica: "Hasta
que la muerte nos separe./ Y cómo brillaba/ en su mano/ el puñal".
Poesía
del desencanto pero llena de fe en el mañana. Por sus palabras el lector
recordará a Borges desarmar sus laberintos mientras las piezas para armar
de Cortázar deambulan en las hojas de este libro que la sitúa como
una de las más destacadas poetas de su promoción, junto a Elvira
Hernández, Lila Calderón, Alicia Salinas, Carmen Berenguer, Verónica
Zondek, y otras.
Teresa Calderón nació el 30 de marzo de
1955 en La Serena. Estudió Pedagogía en Castellano y Licenciatura
en Estética en la Universidad Católica de Chile. Ha publicado "Causas
perdidas" (1984); "Género Femenino" (1989); "Imágenes
rotas" (1995); "Aplausos para la memoria" (1998); "El poeta
y otras maravillas" (2003). Ha publicado dos antologías: "Veinticinco
años de poesía chilena" 1970-1995); "Esto es el amor",
de cien poetas chilenos, ambos en coautoría con Tomás Harris y Lila
Calderón. El año 2000 publicó los libros de cuentos "Vida
de perras", "Aventuras de super Inti" y "Analfabruja".
Además, ha publicados dos novelas para niños: "El tesoro de
la bruma" y "Esa mañana llovía cántaros azules".
El año 2005 publicó la novela "amigamía". El año
1992 obtuvo E l Premio "Pablo Neruda", de Chile. Actualmente se desempeña
como docente en la Universidad de Chile.