Abogado y ex diplomático,
autor de numerosas obras en verso y prosa, figura como uno de los
protagonistas del año literario, por los tres nuevos títulos
que publicará y porque es mencionado como favorito para llevarse
el máximo galardón de las letras nacionales que se entrega
en agosto. Pero él prefiere bajarle el perfil al asunto. "Los
premios no mejoran los libros del autor premiado", afirma, y
defiende la supremacía de la poesía por sobre la narrativa
en Chile.
Armando
Uribe (Santiago, 1933) tiene fama de cascarrabias. El dice que
eso es un invento, pero que involuntariamente colaboró a crear
esa imagen cuando afirmó en una entrevista: "Creo en el
valor moral de la indignación razonada". "Puede ser
que a propósito de eso me hayan atribuido que estoy todo el
tiempo rabiando, lo que no es cierto. Lo que pasa es que creo en el
valor moral de la indignación con razones, que es lo que siento
respecto de lo que pasa en nuestro país y en el mundo",
señala.
Abogado, poeta, ensayista y ex diplomático, Uribe cuenta que
una de las cosas que lo indigna es "la ideología que domina
por completo en Chile y el mundo, que consiste en el neoliberalismo
capitalista de mercado desregulado. Es una ideología totalizadora,
que no se refiere sólo a lo económico, sino que cubre
el campo político, cultural y social. Esa ideología
es anticristiana. Esa es una cosa que me indigna, pero no significa
que salga yo con un uslero o con un bastón a golpear no sé
a quiénes".
Sus indignaciones y también sus amores los ha vertido en una
docena de libros que ha publicado en los últimos años,
desde furibundas cartas a ex presidentes de la República, como
Patricio Aylwin, hasta apasionados textos poéticos como A
Peor Vida. Y aún tiene nuevas obras en imprenta (ver recuadro).
Se ha ganado enemigos, pero según él no se han manifestado.
"Aquí uno puede darle por escrito una patada en salvada
sea la parte a una persona, y esa persona sigue sonriendo. No se dan
cuenta o tienen tan encallecida esa parte que siguen sonriendo".
Otros, como los escritores José Miguel Varas, Luis Sánchez
Latorre y hasta Roberto Bolaño, han celebrado su actitud y
su obra. De hecho, Uribe figura como favorito para el Premio Nacional
de Literatura 2004, que entrega una bolsa de $ 12 millones y una pensión
vitalicia de $ 600 mil.
"Yo no me meto en ese asunto", asegura. "Desde luego
no me postulo a mí mismo por ningún motivo; encuentro
que esa es una indignidad del reglamento. De lo que hagan los demás
no me pronuncio. Los premios no mejoran los libros del autor premiado;
lo que sí ocurre con los premios es que tienden a modificar
el espíritu y las capacidades de quienes los reciben, porque
naturalmente interviene la vanidad. La vanidad, con el nombre de narcicismo,
es indispensable para escribir; pero otra cosa es empujar públicamente
lo escrito para recibir elogios".
De todos modos, el apoyo no lo deja indiferente. "Si quisiera
operar por vanidad diría con falsa modestia que hay una decadencia
cultural evidente en Chile y una de las evidencias es que algunos
estén pensando que el que habla pueda tener ese premio. Pero
yo no creo que haya una decadencia en la poesía en verso; sí
creo que hay una decadencia cultural en los últimos 30 años
que corresponde a este sistema neoliberal, que ha transformado todo,
incluyendo las obras del espíritu, en mercancías. Pero
es una cosa milagrosa que en Chile haya una continuidad de poesía
de valor desde Carlos Pezoa Véliz hasta hoy".
Pero no piensa lo mismo de la prosa. "La narrativa nunca le
ha hecho el peso a la poesía en verso. Ahora hay escritores
en prosa que contienen mucha poesía y el caso más notable
es el de Miguel Serrano, que merece el Premio Nacional. Es gran poesía
creadora de una verdadera mitología chilena. Dejo de lado sus
ideas, porque son parte de su mitología".
¿Por qué entonces los autores de
más proyección son prosistas, como Isabel Allende?
La señora Allende Llona escribe para el mercado.
Esto lo digo sin un ánimo de envidia. ¡Qué le
voy a envidiar a la señora Isabel Allende! Hay toda clase de
pruebas y la más reciente es que con el éxito de los
Harry Potter ahora ha escrito tres libros para niños. Eso es
responder al mercado.
Ella ha dicho que no quiere que la postulen de nuevo al premio por
las críticas que recibió. Usted fue uno de sus críticos.
Sus obras me aburren. Que ella diga que es chaqueteo, francamente
no. Esa señora hace su trabajo, que es importante para la condición
femenina o de género como llaman ahora, porque en su obra lo
que más domina son personajes mujeres. Está muy bien
para esa causa, pero es mercancía.
¿Es machista el medio literario chileno?
No creo. La admiración que existe en los escritores chilenos
hacia la obra de Gabriela Mistral no será llamada machista
o patriarcal. Es un tremendo personaje que expresa lo chileno en su
totalidad.
Además de Serrano, ¿quién
merece el premio?
David Rosenman Taub, un gran poeta de la lengua.
"El Canto General merece
compararse con La Araucana"
En los próximos meses, Armando Uribe publicará
tres nuevos libros. Dos de ellos son de poesía: El Insensato,
con el sello Be-Uve-Drais, y Las Críticas en Crisis,
con Lom Ediciones. El tercero es Conversaciones en Privado,
que reúne sus diálogos con los poetas Miguel Vicuña
y Eduardo Vasallo. Este último abarca una multiplicidad
de temas: "Empieza con Irak y los proyectos de Estados
Unidos detrás de estos actos de agresión militar,
enseguida hablamos de Chile y la historia de Chile", relata.
Entre sus trabajos recientes cuenta también un ensayo
sobre Canto General, de Pablo Neruda, de quien se conmemora
el centenario de nacimiento. "Neruda es un tremendo personaje.
El Canto General merece compararse con La Araucana de Ercilla
y Zúñiga", afirma.
El otro aniversario de estos días son los 50 años
de Poemas & Antipoemas, de Nicanor Parra, que a juicio de
Uribe "es una obra de gran categoría en la lengua
castellana". Sin ánimo de hacer competencia, dice
que la obra posterior de Parra no está a la altura. "Los
Artefactos son chistes, la mayor parte chistes malos, pero no
gran literatura. La parte de los objetos curiosos de Parra no
me interesa nada. Neruda era un coleccionista interesante; a
Parra se le ocurrió ser coleccionista de cachureos y
la verdad es que comparados en cuanto coleccionistas, tienen
más interés las colecciones de Neruda".
|