"Siempre
me he caracterizado por ser una poeta casi epigramática y sintética,
pero este libro es una especie de diáspora que reúne gran cantidad de
géneros y que busca responder a la pregunta sobre el ser de la
literatura y de la poesía".
......Así, Carmen
Berenguer plantea un cambio en la línea que trazó con textos como "Sayal
de pieles" (1993).
......En "Naciste
pintada", la poeta presenta el resultado de un proyecto reconocido por
la fundación Guggenheim en 1997. En ese momento propuso rescatar
fragmentos literarios que deambulan por la ciudad, para transformarlos
en un material poético que desarticulara el discurso de la literatura
oficial y burguesa.
......El resultado es algo
distinto a la idea inicial. El texto, enriquecido por la autobiografía,
la intertextualidad y nuestra geografía histórica y política, resultó
ser un cómodo paseo por distintos géneros literarios -dramaturgia,
crónica y relato- articulados por "el punto de vista
poético".
......La gran metáfora de
"Naciste pintada" es la casa, un motivo que ha generado una gran
cantidad de literatura en Chile y en Latinoamérica. En torno a ella "se
ha dado curso a una gran obra, transformándose en una fantasía que
origina la construcción de textos basados en diversos estilos
arquitectónicos".
......Por ello, el libro
de Berenguer pretende ser un receptáculo de la tradición literaria,
donde una gran cantidad de elementos y personajes se ven sometidos a un
proceso de experimentación que intenta acercarse al esfuerzo realizado
por Juan Luis Martínez en "La nueva novela".
......Berenguer ideó un
tríptico con diferentes espacios: la "Casa Cotidiana" -la calle-, el
lugar donde la ciudad vive su transformación; la "Casa de la poesía", un
sector superior, "algo así como un techo" que también sirve de cobijo a
la "Casa inmóvil": el lugar donde se detiene la memoria.
......"Al crear las tres
casas descubrí que "la Poesía" era el centro y que se encarnaba en
Valparaíso, donde viví en mi juventud, conocí a mi padre y tuve contacto
con el m´tico prostíbulo nacional". Además, allí ocurrió el encuentro
con J. L. Martínez, quien "desarticuló la historia de la poesía, que
para él era un certificado de defunción. Esa desarticulación me estimuló
a generar una conversación interna con él a traves de `Naciste
Pintada´".
......Es así que, desde su
génesis, el nuevo libro de Berenguer plantea un cuestionamiento a los
géneros literarios que se ve reflejado en la integración de materiales
bastardos, como titulares de La Cuarta, los discursos de prostíbulos y
la lectura de los cités.
--¿Cómo es la arquitectura de sus casas?
......"Son laberintos, son
los lugares de secreto, de fantasías y de pesadillas. Es el otro lado
del buen hogar que muestra el relato burgués de "La casa de los
espíritus". La mía es una casa sin espíritus. Son seres en tensión, que
viven en conventillos, cités, callampas... en todas las transformaciones
arquitectónicas que pueda tener una casa hechiza".
--¿Por qué utiliza la crónica roja para entrar en los
testimonios?
......"La intención es
hacer del libro una pequeña historia sin perder el lugar de la poesía.
Por eso el texto inaugura la colección "Las Uvas de la Ira", de Cuarto
Propio. En su interior hay muchas citas de personajes que pueblan
barrios populares. Está Hemingway, que entra a los tugurios de
Valparaíso, y Dostoievski que muestra una iniciación erótica. Quise
articular una nueva forma de citar".
......"Además, la idea es desarticular el lugar de la crónica roja que
siempre apela al buen vecino que duerme tranquilo y al despertar lee
sobre las fechorías de un sector socialmente malo e impuro. Al recoger
esos titulares rescato verdaderas novelas que horrorizan pero que
despiertan la morbosidad... Mi intención era tomar esos lugares para
apoyar la duda sobre esos textos, sin saber si es literatura o si
corresponde a un género determinado".
--¿Usted
recurre tanto a la repetición en la poesía en verso?
......"La repetición es una obsesión sobre algo que
no existe, pero quiero que sea. El lugar de mi poesía es la apariencia.
No utilizo recursos metafórico, sino algo más bien metonímico. Todo es
una analogía, una red de olores y colores que distinguen a cada ciudad.
En Santiago se ha expandido el olor a papa frita, en contraposición al
olor a flores y a muerte del Santiago antiguo".
en El Mercurio, 16 de diciembre 1999
Foto: J. E.
Jaeger