HOSPITAL DE BROUSSAILLES EN CANNES
Casi no hay diferencia entre el Palacio de los Deportes y
este Hospital Para los 2 sopla el viento y brilla el sol y los
turistas no chillan en ninguna de sus puertas (Allá tienen el
Fuerte Fenicio reconstruido por Trajano .....................................
reconstruido por el Duque de Savoya .....................................
reconstruido por Grimaldi .....................................
reconstruio por De Gaulle) El Hospital y el Palacio son
blancos El Hospital y el Palacio 1 son franceses .................................. 2 son de
cemento Son el Titanic y el Ile de France encallados a unos
cuantos kilómetros del agua Son el Plan Marshall El Palacio
está lleno de jóvenes que practican deportes En el Hospital estoy
yo y me han sacado ................................... / 4 tubos
de sangre ..................................... 6
botellas de orines ..................................... una
radiografía ..................................... 2
encefalogramas ..................................... un
electrocardiograma Mientras el sol calienta y se organiza el
Festival de Cine a mí me duelen los huevos la memoria las últimas
costillas voladoras.
EN LA UNIVERSIDAD DE NIZA
He abierto el Diario de Colón en la página 27 (Cultura
Hispánica, 1968). 36 muchachos -entre los 20 y 23 años- han
abierto el Diario de Colón en la página 27. "Y como siempre
trabajase por saber dónde se cogía el oro". (Cierro el libro /
cierran los libros). El Almirante ha quedado como un chancho y el
público se indigna.
Para
la próxima clase: página 46 (op. cit).
FIN DE TEMPORADA EN EL MEDITERRANEO (AQUÍ NO SE HABLA
DE PESCADORES)
Ni hablar del cementerio submarino -apenas un montón de botes
muertos: balandros, veleros de carrera, y yates (tipo 1, tipo
2). Es fácil deducir cuánto-qué-cómo comen los vecinos por las
latas abiertas y tiradas en el patio de atrás. Una vela es a
crédito, al contado son dos. La grasa para un año: burguesía
inexperta / Enrique el Navegante: para un fin de semana.
El
viento de la noche hizo saltar un yate y un balandro (bandera de
Liberia) contra el bosque de pinos. Y hoy se han dedicado a
rescatarlos, a cubrirlos con toldos, amarrarlos a los postes de
playa. Y algunos renovaron los plazos del seguro -que llegado el
otoño es más barato. Ahora hasta el verano En rique el Navegante
y los demás se van a controlar las pulsaciones, lazúcar en la
sangre. Dos escuadras de guerra los protegen del hielo y de los
vientos.
Yo,
espero que las aguas se separen y vuelvan a juntarse y todo quede
limpio y azul. Como en el mapa.
EN EL 62 LAS AVES MARINAS HAMBRIENTAS LLEGARON HASTA EL
CENTRO DE LIMA
Toda la noche han viajado los pájaros desde la costa -he aquí
la migración de primavera: las tribus y sus carros de combate
sobre el pasto, los templos, los techos de los autos. Nadie los
vio llegar a las murallas, nadie a las puertas -ciudadanos de sueño
más pesado que jóvenes esposos- y ninguno asomó a la ventana, y
aquellos que asomaron sólo vieron un cielo azul-marino sin grieta
o hendidura entre su lomo -antes fue que el lechero o el borracho
final- y sin embargo el aire era una torre de picos y pellejos
enredados, como cuando dormí cerca del mar en la Semana
Santa y el aire entre mi lecho y esas aguas fue un viejo
gallinazo de las rocas holgándose en algún patillo muerto -y las
gaviotas-hembra mordisqueando a las gaviotas-macho y un cormorán
peludo rompiéndose en los muros de la casa.
Toda
la noche viajaron desde el Sur. Puedo ver a mi esposa con el
rostro muy limpio y ordenado mientras sueña con manadas de morsas
picoteadas y abiertas en sus flancos por los pájaros.
PARA ESTE ANIVERSARIO DE BODAS
"No hace más de 15 años poca cosa era un libro con 350
posiciones, y aunque pronto supimos que eran sólo variantes de
las 3 principales hábiles fuimos y empeñosos en el orden del
juego: página tras página, sin saltos, muchachos y el canto de
las naves entre todos los vientos y mareas prescritos sin caer
de la cama.
(Y
sabemos que las 3 principales son variantes de la Gran
Posición que guarda un enterrado entre la arena)".
DOS SOBRE MI MATRIMONIO UNO
1
"Una
vez que la fragata fue amarrada en el muelle, Ursula bajó a
tierra y la siguieron más de 11000 muchachas que tampoco conocían
varón".
Y me
topé contigo, Recién Desembarcada.
2
Yo
construí un hogar sobre la piedra más alta de Ayacucho, la más dura
de todas, guardado por el puma y el halcón y bajo techo / una
fogata redonda y amarilla. Pero poco quedaba por ganar: apenas
fue el final de esa alegría guardada y desgastada entre los años
-hace siete veranos por ejemplo, gloriosos y enredados junto a
las grandes olas y lejos de los ojos de su tribu. Pero cualquier
chillido -un pelícano herido, una gaviota- podían devolverte el
viejo miedo, y entonces / volvías a cruzar los muros de tu tribu
por la puerta mayor -el pelo y las orejas / eran toda la arena de
la playa. Y es el miedo que nunca te dejó, como la ropa interior
o los modales. Que fue eso de casarse en una iglesia "barroco
colonial del XVII en Magdalena Vieja" -pero la arquitectura no
nos salva. Verdad que así tuvimos un par de licuadoras, un loro
disecado, 4 urnas, artefactos para 18 oficios, 6 vasijas en cristal
de Bohemia y 8 juegos de té con escenas del amor pastoril (que los
cambiaste por una secadora de pelo y otras cosas que nadie te había
regalado). Así, muchacha bella, cruzaste el alto umbral (bajo el
puma de piedra,el halcón de piedra, la fogata que da luz a los
dos lados del valle de Huamanga -banderas que a la larga también se
hicieron mierda). Ahora ni me acuerdo de las cosas que hablabas
-si es que hablabas, de las cosas que te hacían reír -si es que
reías, y no puedo siquiera ni elogiar tu cocina. Fuiste un
fuerte construido por el miedo (imagen medieval) que no supe trepar
o que no pude. Ahora ni me acuerdo si es que fuiste un fuerte
construido por el miedo (imagen medieval), ni si supe trepar ni
si no pude.
Escribir este poema me concede derecho a la
versión.
LONDRES VUELTO A VISITAR (ARTE POETICA
2)
London's burning London's
burning
Por
qué demonios tuve que volver a buscar esos muertos que ya otros
habían enterrado. 8 Gloucester Road, 10 Redcliffe Gardens, Earls
Court, Nevern Square, Metro de Sloane. Coliseos después de los
cristianos, cáscaras de huevo destruidas y armadas a lo largo de
todo mi destierro. "Las ciudades son las gentes que dejas". Y qué
había dejado sino cuentas del Kensington, la casa sin pagar. Mis
amigos se aburrieron de mi peña, y yo de leer versos para caer en
gracia. Al fin y al cabo las iguanas no podían echarle la pelota
a sus agallas porque ya no servían, ni aullar por sus aletas llenas
de uñas: no había más remedio que saltar a la tierra (fin de la
Era Terciaria). Pero es bravo saber cómo y cuándo se pasa de ese
Antes De Cristo al Después De, si uno sale a la calle el día uno
(siendo el siglo primero) y cree que es un viernes 24 (esto suena
a Vallejo) y encuentra un Daily Mirror en el Metro y se entera que
es jueves. De ahí la explicación porqué Bernini perdió su
clientela -próspera, al día en las noticias- haciendo planos
amplios, detallados del Gran Renacimiento cuando el mundo pasaba al
corral del Barroco. Ahora lo sabemos. Elsham Road. Allí está
la casita donde íbamos a ser / felices como chanchos. Y el griego
de la esquina que no me reconoce todavía. Cómo decirle "he vuelto
después de casi un año", si aún no me comprende cuando pronuncio
harina, lechuga, perejil (ah los griegos son duros de la
oreja). Mi primera esposa se quedaba dormida antes de los
horarios convenientes, mis amigos practicaban costumbres
parecidas. Y el mundo es terminar chupando con algún
sudafricano negro, con algún sudafricano blanco ( a favor de los
negros) y una reja que en la noche rechina y te entusiasmas y
entonces te imaginas a un viejo visitante: la muchacha que juró
perseguirte por las siete provincias, un dramaturgo inglés con yerba
en los bolsillos. Una gorda que regresa cansada, que trepa a su
covacha, eructa -no te saluda más. Por todas esas cosas nunca
vale la pena volver a las ciudades (ni habitarlas). Y aquí, en la
frontera con Italia, otra reja rechina. Es el Mistral, es la gorda
extranjera que te eructa. A veces piensas que si fuese la Muerte
también te alegraría (y esto resuena a Heraud). Y en Lima
rechinaban esas rejas, y una y otra vez eran la misma, la redonda
impostora, la que eructa: Ceniceros repletos, el humo como un
choro entre su concha (bajo el viejo silencio del primer
cigarrillo), y en la calle te es la misma vaina treparte al
colectivo que va al Norte, treparte al colectivo que va al
Sur ("un laurel viejo de las manos del propio Virgilio y de manos
de Erasmo una medalla rota"). Me parece mentira que no
aprendas. Ya van a repetir -si lo repiten- que rampas entre tonos
y entre temas de algún Romanticismo. Sea el Arte Poética .... El libro de mis libros se
acabó.
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