Sobre
la multiplicidad de poetas y manifiestos (y entre eso
la obsesión por
pertenecer a una promoción, generación, etc.)
Javier
Campos
Una de las cosas que me sorprende es que en este sitio -y
se puede comprobar sin problemas- hay una cantidad asombrosa de producción
de poesía publicada en Chile. Cada semana parece que se auto edita alguien
en el género poesía. Una pregunta que me hago, cuánto se
lee lo que aquí se publica en poesía. Segundo, quiénes la
leen. De la primera pregunta puede que muchos/as lean a la rápida un poema.
A la segunda pregunta, sin duda la mayoría son poetas quienes se leen a
sí mismo y esto no garantiza que le interesen ¨los demás poetas¨
sino únicamente su conocido o conocida. Puede que suene muy cínico
este comentario mío.
Otro asunto, y lo que más me asombra
en Chile, son las autoediciones de poetas que surgen con mucha facilidad. Una
autoedición, como se dice en el mundo anglosajón, es realmente un
"vanity book" (se podría traducir como "libro de mi vanidad").
Libro o manuscrito
que no ha pasado por un comité en alguna editorial de cierto reconocimiento
para "evaluar" esa poesía. O también surge quizás
ese "vanity book" porque algunos/as han estado en un taller de poesía
y al final, como examen último, deben producir un libro. Alguno/as consideran
que ya están autorizados para publicar pues se consideran "graduados
de poesía". Esto nada tiene que ver con quien dictó el taller
sea un poeta que tiene un prestigio reconocido o no lo tiene. La autoedición,
que me parece un mal dentro de la "poesía chilena", no es atendida
por ninguna crítica (aparte de una posible reseña de media página
que quizás salga en alguna parte o no salga nunca). Y esto no quita decir
que la publicación de poesía solamente, y realmente, se lee entre
poetas, o entre poetas que son amigos del poeta (creo yo).
Recién
esta semana compré en EE.UU. "The Best American Poetry of 2006"
("Lo mejor de la poesía de EE,UU de 2006), editada por un poeta norteamericano
que me gusta mucho (lo recomiendo): Billy Collins (1941). Lo que tiene esta antología,
como dice Collins en su prólogo, es presentar al lector una "pluralidad"
de voces, una variedad de perspectivas y un diverso y amplio rango de intereses.
Creo que eso debe ser una antología. La selección de de Collins
-75 poetas con UN poema cada uno- la ha sacado de poesía publicada en diversas
revistas. EE.UU. tiene cientos de revistas de poesía que para publicar
allí deben los poemas pasar por un comité riguroso cuyos miembros
ni tienen idea quién es el autor ni menos son amigos personales del o la
poeta. Otra cosa. Los 75 poetas seleccionados allí por Collins no son "la
nueva poesía o nueva generación o promoción o los poetas
del nuevo milenio en EE.UU. etc.", sino son poetas que han nacido entre,
y esto es importante, 1926 hasta 1978.
Si pensamos en lo anterior, hay
un obsesión en Chile eso de incluirse en algo "nuevo" y creerse
que con ellos/ellas empieza todo y que "matar" a los antecesores que
aún viven o en el país, preferentemente en la capital, y enviar
al olvido eterno a los que viven fuera del país, es lo justo y apropiado.
Es difícil ver en Chile una perspectiva más diversa porque aún
se maneja un criterio "generacional" - maligno en mi punto de vista-
especialmente en un contexto tan distinto en el que vivimos. Si bien la globalización
llegó a Chile hace tiempo (para bien o para mal, pero eso es ya un asunto
de otro costal) la perspectiva de los diverso aún, en cuestiones literarias,
sigue teniendo criterios muy del pasado.