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Prólogo
Poesía Contempóranea
de los Andes
Región de Coquimbo y provincia de San Juan
DOS ALAS DE UN MISMO PÁJARO
Por Luis E.
Aguilera
Secretario General
Sociedad de Escritores de Chile (SECH), Región de Coquimbo
luis_eaguilera@yahoo.com.ar
Las historias de Chile y de Argentina
siempre han estado unida por diferentes motivos, coincidentes y trasversales:
el clima, la geografía, la vegetación, hechos históricos,
tragedias dictatoriales, los pasos fronterizos (Paso de San Francisco,
Come-Caballo, Aguas Negras, Huana); la trashumancia permanente por
los valles transversales. Cultura y costumbre de los pueblos de las
bandas oriental y occidental
de la cordillera del norte, particularmente los diaguitas, que en
definitiva son muy afines en toda la región mencionada, lo
que permite concluir que a pesar de la natural separación cordillerana,
que aparece infranqueable, existió siempre entre ambos pueblos
una relación y comunidad bastante estrecha.
Es común encontrar en los pueblos argentinos de Catamarca,
La Rioja, San Juan y Mendoza, los mismos apellidos que proliferan
en Copiapó, Vallenar, La Serena, Vicuña, Ovalle y los
pueblos del interior. Además, tenemos que agregar que existe
cerca de Catamarca el pueblo denominado "Chilecito", constituido
en sus inicios por chilenos que trabajaban las ricas minas de Famatima.
Esta corriente humana de pueblos vecinos, en las provincias del norte
de Chile y de Argentina, siempre fue reciproca; nos referimos fundamentalmente
a las influencias de Argentina hacía nuestro país, que
no siempre fueron espontáneas.
En el periodo 1848/50 fue Intendente de Atacama, don Buenaventura
Lavalle. Este gobernante regional chileno, era hermano del ilustre
general argentino, Juan Lavalle. En ese tiempo en la región
copiapina existió una población bastante considerable
venida de los pueblos mencionados. Así lo confirman los censos
de la época. En 1854, por ejemplo, de 6.887 extranjeros que
residían en Atacama, 5.703 procedían de Argentina.
Destacados escritores chilenos de la época, han dejado sus
referencias respectivas a la inmigración argentina, que estimo
de interés consignar en este prólogo de la presente
antología. Por ejemplo, Vicente Pérez Rosales, que estuvo
trabajando en las minas de Chañarcillo, dice en su libro "Recuerdos
del Pasado": "Copiapó era un pueblo cosmopolita
y muy especialmente riojano".
Quizás otro de los hechos de tremenda importancia, respecto
al acercamiento y asistencia mutua entre ambas regiones, lo constituya
El Ejército Libertador, Chileno-Argentino, cuyo cuartel general
dirigido desde Mendoza por el general José de San Martín,
pudo establecer un extenso frente de ataque en las fronteras para
liberar a nuestro país de la subordinación española.
El general San Martín secundado por nuestro compatriota Bernardo
O"Higgins, había dispuesto que pequeños grupos
de fuerzas militares ingresaran a Chile, por los pasos cordilleranos
de Copiapó, La Serena y Ovalle, con la finalidad de favorecer
el desplazamiento exitoso del Ejército Libertador. Otro de
los acontecimientos digno de recordar se refiere al asilo prestado
a los setecientos soldados en su destierro junto al Caudillo de Copiapó,
don Pedro León Gallo Goyenechea: político, militar y
empresario chileno, promotor de la formación de los llamados
'Liberales Rojos' (grupo originario del Partido Radical), durante
el periodo de la República Liberal. En 1859, "El Caudillo
de Copiapó", al inicio de la Guerra Civil, fue proclamado
"general de hombres libres"; y, después de ser derrotado
en la batalla de Cerro Grande, cabalgó envuelto en sus propias
sombras por el valle de Elqui, hasta alcanzar el límite con
Argentina por "El Paso de Aguas Negras", donde rindieron
sus armas y partieron rumbo al destierro (Mendoza, San Juan, La Rioja,
Catamarca, Tinogasta, para estar más cerca de su tierra y su
gente).
La literatura y los acontecimientos históricos que nos enhebran
a través de los siglos, aún perduran. En más
de una oportunidad se ha caracterizado a la literatura chilena y argentina,
como las dos alas de un mismo pájaro, de un pájaro que
si bien interrumpió su vuelo minando sus caminos (11 de Septiembre
de 1973) no tardará en reiniciarlo, y esta antología
"Poesía Contemporánea de Los Andes: Región
de Coquimbo y Provincia de San Juan" -selección y
notas de Arturo Volantines y fotografías de Aberto Castex-
es ya prueba de ello, en recobrarlo.
El itinerario de esta interrupción es hoy por hoy bien conocido
en ambos países, comenzando con la diáspora forzada
de un importante contingente de escritores, y sigue luego con persecución,
con la (auto) censura, con un clima inquisitorial hacia el libro y
con años de tensa inhibición creativa. Posteriormente,
en la década de los ochenta, se empieza a recuperar -cada vez
con mayor fuerza- espacios autónomos de creación: Revistas
Literarias, apertura de los Pasos Fronterizos de comunicación
con Argentina, Los Encuentros del Mundo de la Cultura (diez versiones);
Convenios Literarios con diferentes Universidades de estas provincias,
etc., que van rompiendo el monólogo de una cultura oficialista.
Se va gestando así una literatura que dialoga insistentemente
con su contexto, y que no sólo lo hace con palabras, sino sobre
todo con silencios, con vacíos y omisiones. La lírica
es sin lugar a duda el género que mayor vitalidad tiene en
este proceso. En parte porque la "Región del Norte"
es de mayor tradición poética que de narrativa, y en
parte porque la poesía circula en forma oral (recitales) o
en hojas y revistas y porque es la región de Gabriela Mistral
y de la "Generación literaria" (naturalista) más
importante de Chile. Ello explica que la producción narrativa
haya sido numéricamente escasa y dispar.
Finalmente quisiera felicitar a los impulsores de este libro de poesía
que incluye 10 poetas chilenos y 10 argentinos, y que nos permitirá
conocer lo más reciente producido en el área poética
de ambos sectores: Provincias de San Juan y Región de Coquimbo.