A
peleas grandes...
Marcelo
Munch
Tan solo una cosa. Por sobre
el carro de la victoria al que todos ahora se suben, para variar, me gustaría
escuchar otra cosa. Me gustaría escuchar que Bielsa ya nos hizo bien, sin
cuestionamiento alguno, más allá del siguiente resultado. Me gustaría
escuchar argumentos más sustantivos como del que cuántos delanteros
usa y a qué hora va a entrenar. Me gustaría dejar de escuchar la
clásica estupidez básica de encasillar alineaciones para jactarse
de sabio, sin sopesar el hecho de que dar una alineación completa, por
el hecho del terror a equivocarse en este país, se
descarta toda posibilidad de sumar nuevos nombres y que realmente pueden aportar.
Me gustaría escuchar que la prensa deportiva reconozca que está
absolutamente en deuda de todo este proceso que se supone nos compete a todos,
lo cual, dicho sea de paso, es la única arista de este entuerto que NO
a asumido sus faltas y carencias. Me gustarían muchas cosas, dejar de ver
a los Luis Santibáñez, a los Schiappacasse, a los “magos” Valdivias,
a los “potencia” Vargas. Me gustaría ver a los Christian Suárez,
a un Luís Pedro Figueroa, a los sub 18 en primera división, y a
un montón que no tienen ni han tenido vitrina ni un gran equipo. Me gustarían
muchas cosas, pero estamos en Chile y aquí se sospecha de todo porque hasta
la tierra se mueve. Pues yo creo que basta, seguir con lo mismo demostró
su nefasto nivel, más bajo en el concierto del balón pie no podemos
caer. Es de esperar que asumamos como somos alguna vez y por tanto descubramos
que siempre es posible mejorar, sólo hay que creerlo, pero para eso hay
que librar batallas largas y peleas de grandes, y para ello tan solo una cosa,
adiós a la charchería y a los charchas, y que los grandes “analistas”
del fútbol chileno sentaditos con sus obesidades y sus piernas blancuchentas
den paso a un costado y guarden silencio, no cambiaron en nada la historia y ya
es demasiado tarde para intentarlo con sus limitadas lenguas, guarden silencio,
por favor, nada va a suceder se los prometo sin sus mediocres comentarios, gracias
a Dios tenemos a Bielsa que no dirá nada y se dedicará a trabajar,
porque claro, él sí que sabe de peleas grandes.