PABLO NERUDA. Su vida en el
Oriente
Junio de
1930, destinación: Batavia
En los años de estadía de
Pablo Neruda en Java durante el último periodo de su condición de
colonia holandesa, conoce a María Antonia Hagenaar y escribe
silenciosamente los primeros poemas que luego serán publicados en
"Residencia en la Tierra"
Por Edmundo Olivares
en Artes y Letras
domingo 16 de marzo de 2003
Fijemos
nuestra mirada en los territorios coloniales holandeses en Oriente, a
comienzo de los años treinta. El destino ha traído en estos días hasta
las playas de la Isla de Java "en el rincón sud-oriental del
archipiélago de Borneo" al joven cónsul de un país de nombre exótico y
remota ubicación.
… "Soy el nuevo cónsul
de Chile en Java. Mi nombre es Ricardo Reyes…"
… Tuvo que decirlo muchas veces. En inglés,
naturalmente, ya que de
holandés es poco y nada lo que sabe, y también porque aquí en Batavia,
al igual que en los demás territorios coloniales de Asia, la lengua
común y recurrente es el inglés.
…
Aclaremos que antes de llegar a este punto en su trayectoria consular,
Mr. Reyes ha debido soportar dos penosas destinaciones previas en
territorios coloniales bajo dominio británico, primero en Rangoon,
Birmania; luego en Colombo, Ceylán.
… Han
sido tres años de penurias económicas y de una devastadora soledad, en
que apenas han existido los momentos de relativa felicidad, un periodo
de exasperada lucha contra el candente clima, contra el aislamiento,
contra la segregación e incluso contra su propio idioma, puesto que ha
llegado el momento en que "impedido de hablar con persona alguna en
castellano" ha temido ya no poder expresarse apropiadamente en su
lengua materna, rodeado como está por un universo angloparlante y por
lenguas y dialectos de imposible comprensión.
… Con
alivio y expectación había recibido, pues, la orden que lo trasladaba
desde Ceylán a Java, un bienvenido traslado que no sólo representa un
cambio de territorio sino también de estatus, ya que en lo sucesivo
tendrá a su cargo dos sedes consulares y, ¡oh, maravilla!, dos rentas;
dos miserias, quizá, pero una nítida mejoría en sus
ingresos.
… En
estas circunstancias, el ánimo con que el poeta se ha trasladado a
Java queda reflejado en la carta que envía a su amigo argentino Héctor
Eandi, y en la que dice: "Amigo mío, voy camino a Singapore, he hecho
mis despedidas de Ceylán para siempre, casi con gran pena, a mi casa
en el mar, a mis perros y gatos […] Viajo en un barco holandés, la
gente es muy alegre y muy libre, muy diferente de los ingleses que
hacen la vida tan desagradable. En tres días más toparemos Singapore y
no sé cómo voy a vivir allí, si en hoteles o en bungalows o qué cosa.
No entiendo una palabra de holandés, pero sé pedir ginebra y
gin-pahit. Este es un cocktail muy bebido en Malaya y Java. Los
viajeros van todos a Java y Borneo, son plantadores o empleados de
gobierno, se quejan del calor y es la primera vez de Oriente para
ellos".
UNA HOLANDESA DE
JAVA
… Para
un cónsul sudamericano, el relacionarse con la "elite"
holando-javanesa que tiene el rol dominante en la isla no es tarea
fácil, pero al cónsul de Chile le ayuda su experiencia previa y le
sirve de estímulo el que ahora esté un poco mejor situado en el
escalafón consular de su país. Su doble consulado debiera permitirle
vivir aquí con cierta holgura económica. Ahora tal vez
pueda asumir su representación en una forma más digna y más
satiafactoria. Incluso podría pensar en casarse. ¿Por qué no? La
pregunta va en serio, porque a sus 26 años ya resiente su larga e
incómoda soltería, que en no poca medida ha contribuido a mantenerlo
segregado del contacto con otros cónsules y sus familias.
… La
realidad es esta, la que se halla inserto en un entorno colonial que
cuida mucho de los usos y costumbres, un medio elitista y clasista en
que cada cual debe hallar su lugar y en que los solteros de raza
blanca son siempre sospechosos de conductas impropias.
… Ahora bien, si es que efectivamente ha llegado
el tiempo de pensar en matrimonio, ¿dónde podrá estar ella… la que le
espera?
… Es aquí donde aparece una
joven criolla, alta, rubia y bien parecida, cuya familia de origen
holandés está radicada en Java desde hace mucho tiempo. No abundaban
ciertamente "en estas regiones, en este tiempo" los hombres casaderos,
los "buenos partidos" que siendo jóvenes y de raza blanca y de
situación prometedora estuvieran disponibles para el matrimonio.
Porque con los holandeses de Batavia ocurre algo muy parecido a lo que
ocurre con los ingleses de Birmania y de Colombo: para proveer los
grandes y medianos puestos en la administración colonial o en los
negocios, se trae desde Europa a funcionarios casados acompañados de
toda su familia. Es una manera de asegurarse la eficiencia y de
reforzar la presencia colonial en estas tierras.
… En
consecuencia, no abundan los hombres solteros y de buena posición
económica, no son muy amplias ni muy variadas las expectativas de
ascensión social de las pequeñas familias burguesas que, como la de
María Antonia Hagenaar, llevan ya muchos años de vivir en estas
colonias. Desde esta perspectiva, el joven cónsul de tan lejano país
resulta un buen partido, y es así como en el breve período comprendido
entre la fecha de su llegada a Java "junio de 1930" y noviembre de
este año conoce, corteja y se compromete con María Antonia Hagenaar,
y, finalmente, el día 6 de diciembre la pareja contrae
matrimonio.
… El hecho accidental de que
este señor cónsul responda, además, al nombre de Pablo Neruda y que
sea un poeta es algo que en verdad a pocos o más bien a nadie interesa
aquí, en la medida en que se desconoce absolutamente la cantidad y
calidad de la poesía que pueda haber escrito y publicado.
…
Después de efectuado el matrimonio, los primeros meses de 1931 parecen
prometedores para la pareja Neruda-Hagenaar, y nada hay que venga a
empañar estos días iniciales de vida en común.
… Una
irremplazable descripción de esos primeros días nos la da la extensa
carta que Neruda envía a Eandi el 5 de septiembre de 1931. Para
satisfacer la natural curiosidad del matrimonio Eandi, el poeta
presenta a su mujer y describe la vida que lleva junto a ella: "Mi
mujer es holandesa, vivimos sumamente juntos, sumamente felices en una
casa más chica que un dedal. Leo, ella cose. La vida consular, el
protocolo, las comidas, smokings, fracs, chaqués, uniformes, bailes,
cocktails, todo el tiempo: un infierno. La casa es un refugio, pero
los piratas nos rodean. Rompemos el sitio y huimos en automóvil, con
ternos y cognac y libros hacia las montañas y la costa. Nos tendemos
en la arena, mirando la isla negra, Sumatra, y el volcán submarino
Krakatau. Comemos sándwichs. Regresamos. No escribo. Leo todo Proust
por cuarta vez. Me gusta más que antes. He descubierto un pintor
surrealista. Salimos con él, a comer en los restaurantes chinos,
bebemos cerveza".
… Hay una cierta
típica frivolidad "años treinta de gente acomodada" que se desprende
de este recuento apresurado.
… Pero
de la carta que comentamos no pueden escaparse algunas referencias que
aluden a las duras realidades del momento, en que se sufren las
severas consecuencias de la depresión económica iniciada en 1929.
Desaconseja a su amigo argentino que envíe a su hermano a estas
tierras para buscar la posibilidad de un trabajo. "Las policías de
inmigración son terribles en todo el Oriente, en todo el mundo ven a
un comunista, y no dejan desembarcar a ninguna persona que no muestre
un contrato con una firma local. Singapore es un mal país.
Desagradable. La vida inglesa es horrible. (…) La única ciudad
encantadora en todo este mundo es Batavia". Neruda agrega un asterisco
a continuación de este nombre para escribir a pie de página
"¡Exagerado!".
… En lo
que respecta a su matrimonio, Neruda no ha recibido respuesta a la
carta enviada a su padre relatándole su decisión y esto le lleva a
suponer que "el caballero" ha debido reaccionar de mala forma al
recibir la inesperada noticia de su casamiento. En carta de 28 de
julio de 1931 a su hermana Laura, Neruda se refiere al tema,
diciendo:
… "No
me dices nada de mi padre, seguramente el caballero se ha enojado por
mi casamiento, no sé cómo agradarles a ustedes. Deben alegrarse de que
me haya casado, no sólo por lo buena que es mi mujer, sino también por
lo triste que es la vida de un hombre solo en estos países. No les
avisé antes porque nos casamos repentinamente, los tiempos han
cambiado y no hay para qué asustarse de eso".
"ROXANE"
… Algún
tiempo después llega a Java viniendo desde Singapore, una escritora y
periodista chilena que en compañía de varias amigas efectúa un largo
crucero alrededor del mundo: Es Elvira Santa Cruz Ossa, cuyo seudónimo
"Roxane" es ampliamente conocido en Chile, en especial por ser la
directora del popular semanario infantil "El Peneca".
… De su
visita a la isla de Java y de su fortuito encuentro con su
compatriota, el cónsul Ricardo Neftalí Reyes, Roxane nos ha dejado un
interesante testimonio, que se publica en el diario El Mercurio de
Santiago, con fecha 3 de enero de 1932.
… Para la atmósfera de Java, para su belleza y
luminosidad, Roxane tiene palabras de admiración y, pese al calor
reinante, logra explicarse algo que en un principio le pareció
insólito. Después de una larguísima navegación con apenas breves
detenciones en puertos intermedios, es aquí en Java donde los
organizadores del crucero han dispuesto varios días de descanso y
recreo en tierra para los viajeros.
…
Ahora bien, temprano en la mañana del primer día y antes de
desembarcar se produce el encuentro del poeta y el grupo de viajeras
chilenas. Escuchemos el testimonio de Roxane:
… "Anclamos en Tandjong Priork, puerto principal
de Java, situado a seis millas de Batavia.
... "Desde la ventanilla de mi
camarote veo levantarse el sol entre una inmensa selva. El "bungle" de
a bordo toca a rebato… Llego atrasada al comedor y encuentro a mis
madrugadoras compañeras conversando con un chileno: Pablo Neruda… Sí,
el poeta excelso, el poeta de renombre español y americano nos da la
encantadora sorpresa de su presencia. Se ha casado recientemente con
una linda javanesa de origen holandés.
…
"Maruca de Reyes –dice la esposa de Pablo- ese es mi nombre.
… "Pablo Neruda insiste en que abandonemos el
itinerario de turismo y nos conduce a Batavia.
… "Al fin solos –podemos decir-, al fin entre
chilenos y hablando nuestro idioma. Las seis millas que nos separan de
Batavia se abren camino entre río navegable para sampanes y pequeños
vapores y la jungla húmeda, enmarañada y malsana. "Jungla traidora
–dice Neruda con nostalgia-, quien se recuesta bajo su sombra debe
temer la picadura del insecto, el veneno del reptil o la urticaria de
sus árboles. En Chile la naturaleza es madre no enemiga".
… La
curiosidad de los recién llegados es satisfecha con algunas
explicaciones sobre la organización urbana de la capital, que –se les
informa- está prácticamente dividida en tres ciudades. Llegados a la
casa del cónsul-poeta, Roxane la describe en términos generales: "La
casa de Pablo Neruda está en Weltebreden; sólo dos habitaciones son
cerradas y aun estás tienen pequeños agujeros en los muros para que
los pájaros hagan allí sus nidos. Nido de amor es aquella minúscula
vivienda del cónsul chileno".
…El
poeta habla a sus visitantes e su ya larga estadía en Oriente, y con
un muy comprensible interés se le escucha hacer una breve reseña de
sus distintos puestos consulares, de sus impresiones sobre Gandhi y
Tagore y de las condiciones de vida en estas latitudes. En la
conversación aparece también una opinión de Neruda sobre la naturaleza
de la administración holandesa en Java, unida a un comentario sobre la
agitada vida social que aquí resulta inseparable del cargo
consular.
… "Los
holandeses son buenos colonizadores –dice Pablo-; comienzan por
aprender el idioma nativo sin tener interés por enseñar el suyo. El
Gobernador General tiene el rango de Virrey. Las ceremonias son las de
una corte real y por consiguiente nuestras obligaciones diplomáticas
son costosísimas. Nadie se imagina la intensa vida social que hay en
este país. […]".
… La
opinión que Roxane se forma del matrimonio de Neruda-Hagenaar es
naturalmente muy favorable, y tiene para Maruca unas palabras de
elogio y simpatía muy femeninas: "Maruca pone en la conversación la
gracia de sus balbuceos en lengua castellana, como un chico que
comienza a hablar. La linda javanesa tiene una cultura vastísima y
sirve de secretaria al poeta".
… Estas
primeras impresiones de Roxane se complementan con las de un segundo
artículo dedicado a Java y que titula "El ritmo de
Oriente".
…
Siempre teniendo a Neruda como guía, la periodista se esfuerza por
describir apropiadamente una realidad que resulta difícil de abarcar o
comprender de buenas a primera.
… "En
Java domina la raza malaya y el pueblo es en su mayoría musulmán. El
hinduismo dejó en la isla maravillosos templos, tales como Borubudur y
Bali, y propagó el culto de Civa y Buda; pero el javanés adoptó en su
mayoría la religión musulmana, más de acuerdo con su carácter
sentimental y lujurioso. Pablo Neruda nos habla de la vida paradisíaca
de los javaneses".
… En
automóvil salen fuera de la ciudad para vistar el Herbario, el Jardín
Zoológico y el Parque Botánico . Todo es descomunal aquí, los árboles,
las plantas trepadoras, las orquídeas de cientos de formas y colores.
Como han dejado para el final del recorrido la visita al Parque
Botánico, de pronto se encuentran con que ya no disponen de tiempo
para hacerlo, situación que Roxane describe en los siguientes
términos: "Habríamos querido permanecer en ese jardín paradisiaco
largo tiempo, pero nos anuncian que se acerca la tormenta. En Java, de
los 365 días del año, llueve 260, de dos a cinco de la tarde. El
regreso a Batavia se verifica en medio de una tempestad furiosa.
Zigzaguea el relámpago y se estremece la tierra con el vendaval. En un
instante ha cambiado completamente el panorama. Los arrozales son
cascadas rojizas y los bambúes y palmeras juguetes del viento. Se ha
malogrado nuestra excursión y nos sentimos poseídos de un pánico
supersticioso en medio de la jungla negra y oscura. […] De pronto se
hace la luz y el cielo se abre en un prodigioso crepúsculo con
arreboles mágicos. Todo es rápido en este país sujeto a las
convulsiones de la naturaleza".
… "La
noche sucede al crepúsculo cuando llegamos al puente que separa la
selva de la ciudad. Es una noche irradiante, con estrellas que casi
tocamos con la mano. Los hoteles magníficos, los cabarets y clubes
europeos se llenan. Hay danzas exóticas, bailes y procesiones
callejeras… El alma recobra su dominio. La gente acoge a la noche como
compañera de orgías, sin pensar en el demonio de la carne ni en la
concupiscencia de los ojos… El mundo oriental adorado que el
occidental reprueba, y exalta la vida de los sentidos como una natural
floración, como un ritmo legendario que le devuelve su primitivo
animismo".
… Algo
de la magia y del encanto de Java, algunos aspectos de su vitalidad y
de su trasfondo histórico quedan reflejados en estos dos artículos de
Roxane. Por otra parte, la semblanza que hace del poeta y su esposa
javanesa tiene un inestimable valor testimonial. El matrimonio parece
feliz y quizá lo ea. Disfrutan de un tiempo de bonanza que por
desgracia no ha de durar mucho más. Vendrán dificultades económicas.
Un obligado regreso a Chile. El comienzo de un cierto distanciamiento
como pareja. Pero por ahora nadie tiene el derecho ni el deseo de
estropear su felicidad con malos augurios. En la fotografía que
ilustra el artículo de Roxane, Neruda y Maruca Hagenaar miran
sonrientes a la cámara. Batavia, 1931. Un lugar, una mujer y una fecha
en la bitácora del poeta itinerante.