El escritor Poli Délano señaló
en el Programa Vuelan las Plumas, de Radio Universidad de Chile,
que hay un gran pragmatismo de parte de los sellos editores nacionales,
los cuales anteponen como
criterio la posibilidad de venta, dejando así de lado a muchos
buenos y talentosos escritores.
Délano también se explayó
sobre su relación con Pablo Neruda -que conoció
de niño- y sobre sus padres -el escritor Luis Enrique Délano
y la fotógrafa Lola Falcón.
Celebró la entrega del Premio Iberoamericano de Poesía
Pablo Neruda al escritor mexicano José Emilio Pacheco,
un gran amigo suyo.
Es más editado y conocido en México, y aunque él
dice que por una parte se debe a su gran mercado -sólo en la
capital azteca hay 22 millones de habitantes- también reconoce
-y se queja-, de lo complicado que resulta publicar en Chile. "Las
editoras grandes -que son tres o cuatro- tienen poca iniciativa frente
a la literatura nacional, como que son agencias para la edición
en Chile de los grandes best-sellers mundiales que publican
en España o México. Esto atenta contra el escritor nacional,
que quiere abrirse camino. Las editoriales chicas también están
muy atrapadas."
Agrega que existe una escasa o nula posibilidad de distribución
internacional, a lo que se une al "gran pragmatismo" que
exhiben las casas editoras y que las lleva a privilegiar las posibilidades
de venta por sobre la calidad. En este panorama poco alentador destaca
el carácter de Lom Ediciones, "por el importante cátalogo
que ha logrado tener en estos pocos años."
Señala que hay mucha literatura que es rechazada, que no
logra traspasar las puertas de las editoriales y que es muy buena.
Para mayor abundamiento le cuenta a la conductora de Vuelan las Plumas,
Vivian Lavín, que hace tiempo que le da vueltas a la idea de
publicar una antología con los mejores cuentos de grandes escritores
chilenos olvidados, libro que dice sería un verdadero aporte
al conocimiento y difusión de estos valores literarios. Sin
embargo, dice, no hay ninguna editorial que hasta el momento se interese
por un libro de este tipo. Queda lanzada la idea...
Poli Délano ha vivido muchos años en México,
de niño y de adulto. De niño tuvo la suerte de conocer
muy de cerca al poeta Pablo Neruda, cuando vivió con él
en la quinta "Rosa María". Su padre -el escritor
Luis Enrique Délano- y Neruda, eran cónsules de Chile
en la capital azteca y compartieron esta gran casona donde Poli convivió
con el poeta, al que recuerda como "muy divertido y bromista".
Cuenta que una vez que salieron a tirar flechas cerca de las pirámides
de Teotihuacán, con un arco que Neruda le había comprado
en la ciudad de Nueva York, se llevó una sorpresa mayúscula
cuando comprobó que una de estas flechas había atravesado,
medio a medio, a una culebra. Atónito, Poli-niño le
preguntó a Neruda qué significaba eso. Y el poeta le
respondió tranquilamente : "Es el azar". "Era
la primera vez que escuchaba esa palabra y me quedó dando vueltas
y el azar ha seguido siendo una preocupación para mí",
dice.
Policarpo y Neruda
Esta gran riqueza que representó su relación de niño
con el poeta, la volcó en su libro "Policarpo y el tío
Pablo", publicado bajo el sello de Random House-Mondadori y que
presentó hace pocos días también
en México. "Son siete historias que saqué de mis
recuerdos, entre las que está también aquella del Tejón
traicionero". Este cuento relata la historia de un tejón
que llevó el poeta a la Quinta Rosa María y que mordió
a medio mundo, entre ellos a Poli, quien debió pasar una Navidad
en una clínica, herido por este insaciable carnívoro.
Dice que este libro es su aporte a este año de homenajes al
poeta. Es la mirada de un niño "y yo tuve la suerte, o
la ocasión, de ser ese niño", añade. Y agrega
que Neruda ya se ha convertido en un personaje de ficción.
La obra de Skármeta -Ardiente paciencia, que se convirtió
en la exitosa película El cartero de Neruda- y la del
joven escritor Cristián Barrios -El tango el viudo-
son ejemplos de esta nueva dimensión del vate.
Délano también se refirió a su relación
con dos grandes escritores mexicanos que están teniendo mucho
que ver con Neruda, por las actividades relacionadas con el centenario
del natalicio del poeta. Carlos Fuentes, quien acaba de participar
como jurado del Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda,
y el primer ganador del galardón, otorgado recién este
martes, el escritor José Emilio Pacheco.
De este último dice: "Somos amigos casi desde que yo llegué
a México, es una persona prácticamente de mi generación
y muchas veces estuvimos juntos en actividades literarias y antes
de que se lo dieran me hice una terna de los posibles ganadores, en
la que incluí al nicaragüense Ernesto Cardenal,
al argentino Juan Gelmann y al mexicano José Emilio
Pacheco. Me alegro mucho y lo felicito muy cordialmente. Me encanta
su poesía", dice.
De Carlos Fuentes señala que "es uno de los grandes narradores
de nuestro continente. Lo conocí en 1962 y desde entonces hemos
sido amigos. He sido admirador y seguidor de su obra y tengo dentro
de ella mis preferencias. Me gustan mucho sus primeras novelas, entre
ellas Las buenas conciencias, y La región más transparente,
una novela de mucho nervio, rápida, compleja, novela que empieza
a cambiar la dirección de la narrativa latinoamericana y en
la que reconozco influencias de Willliam Faulkner.
Y sobre la influencia de la narrativa norteamericana en su propia
escritura, Délano no duda en adjudicarle un papel fundamental.
"Mis maestros y los de una buena parte de mi generación
fueron los narradores norteamericanos de los años '30 y '40
. Ellos nos mostraron cómo escribir sin tiesuras, sin almidón,
sin gomina, sin solemnida."
Luis Enrique Délano y Lola Falcón.
Délano también se refirió a sus padres, el
escritor Luis Enrique Délano y la fotógrafa Lola Falcón.
Dice que los libros de su padre se reeditan periódicamente
y este año saldrán nuevas reediciones, entre ellas,
algunos tomos de su autobiografía. De su madre, la gran fotógrafa
Lola Falcón, recuerda que "fue una persona que agarró
la cámara y no la soltó más". Tuvo el azar,
dice, de vivir durante el siglo XX en zonas que revistieron mucha
importancia, como el París de los años 20, el París
de Picasso, de Hemingway, de Fitzgerald; vivió en el México
post Cárdenas, cuando ya se había fraguado la Revolución
mexicana; vivió en la China de Mao. "Tuvo una gran geografía
que captar con su lente y ella andaba siempre con su máquina".
Dice que el año pasado se hizo una exposición y este
año también se realizará una nueva muestra de
su arte, la que anunciará oportunamente para los auditores
de Vuelan las Plumas.
Délano se refirió también a su posición
-como prolífico escritor- entre el cuento y la novela. Sobre
el primero dice que no le apasiona tanto como la novela -aunque le
gusta mucho- ya que esta última no la puede terminar de una
vez, como hace con el cuento, y así, señala, tiene la
grata posibilidad de vivir y estar más tiempo con ese mundo
y esos personajes en particular.
Dice que no relee sus obras y que a veces le ha tocado hablar sobre
sí mismo y ahí relee para saber cuál personaje
está en cuál de sus obras y así no equivocarse.
Cuenta que su última novela la escribió en un mes y
medio, con seis horas de trabajo diarias , y gastó más
tiempo en trabajarla y pulirla. Añade que no escribe para un
público especial ni tiene en su mente al lector. "Sólo
escribo", dice.
La prolífica pluma de Délano ha dado vida a libros como
Gente solitaria (1960) Amaneció nublado(Chile, 1963),Vivario
(Chile, 1971), Cambio de máscara (Cuba, 1973), Como buen chileno
(Argentina, 1973), Sin morir del todo (México, 1975), Dos lagartos
en una botella (México, 1975), Veinticinco años y algo
más (Chile, 1985), Como una terraza en la quebrada (Chile,
1987), Un leopardo en la cumbre de un volcán (Cuba, 1989),
Cuentos escogidos (México, 1994), Cuentos (Chile, 1996), Solo
de Saxo(México,1998); las novelas Cero a la izquierda (Chile,
1966), En este lugar sagrado (México, 1977 - primera edición),
Piano-bar de solitarios (México, 1983-primera edición),
El hombre de la máscara de cuero (Chile, 1984- primera edición),
Como si no muriera nadie (Chile, 1987), Casi los ingleses de América
(Chile, 1990), Muerte de una ninfómana (Chile, 1996, Lom),
Humo de trenes (Chile, 1997), La cola (México, 1999) y Este
banco del parque, su última novela hasta la fecha y publicada
por Mondadori en el 2002.
Al finalizar Vuelan las Plumas el escritor Poli Délano recibió
un vino 35 Sur, por gentileza de CCU, auspiciador del Programa. Se
invitó a los auditores a concursar para obtener libros de regalo,
escribiendo al mail vlp@uchile.cl
Nuestro próximo invitado: El poeta Armando Roa Vial.
Stgo., 25 de marzo de 2004