HERNAN RIVERA LETELIER:
Corazón de
Aleluya
Lo mismo que la
Señorita Golondrina del Rosario, -la heroína de Fatamorgana con banda
de música, hoy lista para llevarse al cine francés-, su autor tiene
una irresistible mixtura de humanidad casi religiosa y de desparpajada
exaltación por los placeres entre las sábanas: un corazón de
aleluya.
por
Toto Romero
..... A sus 50 años que se ufana de que
parezcan apenitas 49, él se ha dado tantas vueltas de carnero
vivenciales que podría tener un siglo, aunque cuando echa sus
estruendosas risotadas adquiere pinta de colegial. Lo que por lo demás
tiene algo de cierto, si se piensa que era un grandulón en la
treintena cuando empezó a leer. Mientras que en la escritura se
internó hace apenas una década, con un manojo de cuentos -Donde
mueren los valientes- a los que ni el gato puso
atención.
.....
Hasta que en 1994 vino
esa verdadera explosión que se llamó La reina Isabel cantaba
rancheras y ya no paró más: Himno del ángel parado en
una pata (1996); Fatamorgana de amor con banda de
música (1998) y este 2000, Los trenes se van al
purgatorio. Todos ellos traducidos al francés, portugués,
italiano y ahora al árabe.
..... Sólo que,
aunque retrasado en las letras, Hernán Rivera Letelier ha sido más que
avispado en la vida profana. Casado temprano, tiene dos hijos
veinteañeros y después de un largo receso, "pero con la misma señora,
conste", concibió a Luna María, de ocho y Música Mistral, de once,
nombres que me dejan un tanto perpleja. Pero que el orgulloso padre
dice haber sacado de los más hondos repliegues de su cuerda
poética.
..... -Porque yo
soy un poeta que escribe para el lado -dice refiriéndose a su
novelesca eminentemente lírica, aunque sin jamás caer en lo meloso,
sino todo lo contrario-. Cuando me toca dar conferencia en lugar
empingorotado, nunca falta la cuica confundida con mi idioma. Una de
ellas me preguntó qué significaba "hacerse la santita y mear
permanganato", refiriéndose al pelambre sobre una casada súper infiel
en que van enzarzadas dos viejas solteronas a bordo de sus
Trenes. Al parecer en esa sala tan chic, nadie había oído
hablar de las venéreas.
..... "Por algo
también, cuando fui a firmar libros al Alto Las Condes, pasé dos horas
y nadie siquiera me miró. El interés del público andaba por el lado de
los libros de autoayuda, otro de los índices de que este país está
enfermo grave. Se les tiene miedo a las palabras. Los cesantes son
desempleados, el golpe militar es pronunciamiento, las empleadas
domésticas ahora son nanas. Se habla con condón mental puesto, aunque
el término condón no se verbaliza ni siquiera para hacer cristiana
campaña contra el sida".
..... Y si no, que
lo diga Alma Basilia, la adorable prostituta de la oficina
Resurrección. Ella salvó del divorcio al carnicero de la oficina, cuyo
matrimonio se estaba hundiendo, según se lo confesara una noche en que
hubo de consolarlo de sus amores desgastados. Cuestión de acercarse a
la esposa en cuestión cuando ésta miraba una vitrina y decirle en voz
bajita que se comprara ese par de zapatos rojos con tacones de aguja;
que a su esposo le gustaría mucho que ella, antes de irse a la cama,
le bailara vestida nada más que con esos zapatitos de color pasión
sangrante. La mujer lo miró escandalizada y se marchó sin decir ni
pio. Sin embargo, desde aquella noche el carnicero, que era uno de los
más asiduos parroquianos casados de Alma Basilia, no apareció más a
visitarla. Y en los días de retreta se comenzó a ver a la pareja
paseando del brazo por la plaza, felices y rozagantes, como dos novios
recientes.
hernán; el cafiche
..... Todas o casi todas las historias de
Hernán son sacadas del imaginario pampino al que le paró la oreja
desde muy chico. "Soy el cafiche de mis personajes", confiesa. De ahí
que entre ambos, a media entrevista, decidimos hablar con Margot Kahl.
Se trataría de convencer a la Margot para que en el Buenos Días a
Todos agregara al sexólogo estable del programa, alguna Alma
Basilia de carne y hueso.
..... O quizás a
alguien así como la heroína de La reina Isabel cantaba rancheras -otra
exquisita cultora del oficio más antiguo del mundo-. Este libro, en su
versión británica tuvo que cambiar de título, porque iba a creerse que
se trataba de la propia your majesty, en circunstancias que
la soberana del Reino Unido, tal como la conocemos, no es capaz de
cantar ni La batelera.
..... Poquito
cuesta imaginarse entonces lo que costó titular en alemán el Himno
del ángel parado en una pata. Himno del ángel puesto de pie, como
se propuso primero, iba a parecer escrito por Pedro Carcuro, así que
ni pensarlo. A las finales quedó como Himno del ángel, y
aunque más fomeque, se vendió muchísimo.
.....
En Francia, en cambio, las traducciones han salido como por un tubo.
Sucede que las hace una capísima nieta de nuestro poeta Gonzalo Rojas,
quien el 73 debió salir como cuete con su familia al exilio y por
allá, con el habla mejor gala que chilena, echó ancla permanente, la
matrimonial incluida.
..... Esta súbita
internacionalización le provoca ciertas cosquillas al autor: entre
risa y miedo, entre ser y no ser. Porque pampino sigue siendo su
esencia. Hijo de un minero que murió de silicosis, ahogado, "azul,
como la serie de los arlequines de Picasso", él se desentendió de la
religión evangélica de su padre, pero heredó el oficio. Fue barretero,
latero (ayudante de barretro), cargador de tiro y de un cuantohay de
las labores de mierda de los obreros salitreros. Pero lo mismo, cuando
se cerró la penúltima oficina y él dejó el desierto por Antofagasta,
igual que todos sus pares en ese trance, lloró sin
tapujos.
..... En la pampa
había convivido con Jorge Negrete, Pedro Armendáriz, Tito Guizar, la
Rosita Quintana --"de quien me enamoré hasta los huesitos"-, el Cuco
Sanchez y tantos héroes de corridos y rancheras que, sin querer
queriéndolo, fueron sus primeros maestros literarios. Todos cantaban
puras desgracias: que la traición de la amada, que la amada que se
casaba con otro, que a la novia sólo se le podía ofrecer una cama de
piedra, y de piedra la cabecera. Pero nunca sonaban llorones, todo lo
contrario. Tanto, que hasta se los bailaba con harto brinco y
volteretas.
..... -Yo era un
bailarín de primera, siempre listo para estar donde se armara la
fiesta -me cuenta con un leve golpeteo fatuo del pecho un poco de
paloma. Por algo sus amigotes pampinos le decían Condorito-.
Hoy me da pena mi mujer, que se casó, de diecisiete, con un
rockanrolero fino de veinticuatro y ahora resulta que le cambiaron el
paquete. Soy un posme que se pasa hasta catorce horas dándole
a las teclas del computador. Para compensar, de repente me ofrezco
para ir a comprar el pan o los limones que faltan, y así también hago
algo de ejercicio para que no se me aplane demasiado el
culo.
..... En sus
tiempos juveniles de Condorito, su gran amigo era el
Fosforito, así apodado por lo de sus ideas brillantes. Como
aquella de hacerse pasar por homosexual para atraer a las niñas,
habiendo pispado de puro listo, esa verdad grande como un monumento:
que no hay nada que nos excite más a las mujeres que el triunfal hacer
cambiar por amor al hombre escogido. Trátese de convertir al ateo,
monogamizar al polígamo o hacer un filósofo del frívolo. A
Fosforito la estrategia le resultó estupenda durante varios
episodios, hasta que se topó con un homosexual de verdad al que tuvo
que reducir a chopazos para detener sus apasionados
avances.
don
nica, el maestro
..... Las técnicas amorosas, pero a nivel
superior, fue uno de los grandes temas que afianzaron su amistad con
Nicanor Parra.
..... -Un buen día
emprendí a pie y a dedo el viaje desde la pampa a Santiago para
conocer a mi ídolo, que según me informé, iba ciertos días a la
Sociedad de Escritores en la calle Simpson. Mugroso y patipelado como
llegué, él sin embargo dejó a los importantes que lo rodeaban para
atenderme. Después me convidó a almorzar a una picada cercana, y luego
me subió al auto para mostrarme los lugares que en Santiago valían la
pena. Fuimos a la casa donde vivió la Violeta, a la esquina donde
vivió Pablo de Rokha, y de ahí a La Reina y a su casa.
..... "La Javiera, que entonces tendría 11 años, nos cantó
hasta que le dio lata y nos dejó bailando El Chuncho y todas
las danzas de las cofradías de la Virgen que don Nica conocía
mejor que yo. Así se nos dio la amanecida y el inolvidable momento en
que me confío que, entre los garabatos poéticos que le había mostrado,
él podía haber sido el firmante de mi Plegaria express:
"Señor, hazme invisible como un árbitro de boxeo". De regreso a casa
armé una tremenda fogata y quemé todos mis escritos, para empezar de
cero. En ese par de días con el maestro descubrí el misterio de la
poesía".
.....
En cuanto a amores, el
antipoeta que ya pasó los ochenta y que todavía los cultiva, coincidió
con el flamante discípulo en que lo mismo que la pobreza, la edad es
una pura actitud mental. Como que Gonzalo Rojas, en la setentena
avanzada, hasta hoy escribe magnífica poesía erótica que ya se
quisiera un jovenzuelo. Y Neruda no era precisamente un adolescente
cuando hizo Los versos del capitán a su amada Matilde.
"Ahora, dime si no es fantástico que Carlos Menem esté con la Bolocco,
nadie menos que la Miss Universo", me dice con un guiño aprobatorio.
Para recordar enseguida a una periodista que quiso saber datos de su
señora, a cuenta de aquel fastidioso dicho de que tras todo gran
hombre hay una gran mujer, y a quien dejó cuello con su respuesta:
"Mire, señorita, yo procuro siempre tener detrás de mí a una gran
mujer y más atrás a mi esposa, a la que no por la ubicación dejo de
querer muchísimo".
..... Al salir con
sus domingos siete, él no tiene parangón.
..... Fue el caso de sus desacuerdos con Lafourcade, que
lo pregonó roto por sorber ruidosamente la sopa y otros desmanes del
estilo, durante una comida de escritores. Sin inmutarse, respondió por
el mismo diario que así no más era, porque todas sus reacciones,
incluso en la mesa, apuntaban a celebrar lo sabroso. Mientras que los
libros de don Enrique eran más desabridos que hacer el amor con una
muñeca inflada.
.....
O cuando se pregunta cómo
la iglesia, una institución tan respetable y tan sabia, tenga entre
sus promotores en Chile al padre Raúl Hasbún: "Para mí, Hasbún le hace
tan flaco favor al catolicismo como el guatón Romo a la dictadura". Y
de ahi salta a su ponencia de que entre los detenidos desaparecidos de
esos tristes años, 1976 para ser más exactos, debería consignarse la
muerte del Longino (el tren longitudinal norte), que tal cual asegura
en su novela, se fue resoplando al purgatorio. Todo para que gente del
calado de Moya ("y no le dijo hijo de puta porque le haría un honor")
se hicieran ricos con los servicios de buses
interrurales.
..... Por eso en
su reciente viaje a Temuco, invitado por el Centro de Extensión de la
Universidad Católica, y gracias a su genial encargada, Iris Castro,
que lo paseó por más de catorce comunas y su multitud de modestos
pueblos ignorados, realizó una fervorosa campaña en pro de que la
gente cuidara sus ramales ferrocarrileros.
..... -Me porté como un predicador evangélico, recibido
con tanta unción como espíritu festivo, porque en Perquenco, Lautaro,
Panguipulli, jamás se le había visto ni la nariz a un escritor- dice
medio arrebatado; tanto, que se le ha metido entre ceja y ceja irse
por esos pagos a escribir sobre el tren del sur, aunque su marca de
fábrica sea el desierto salitrero florecido con las "niñas de los
buques": Así se les llamaba a las prostitutas que hacían el oficio a
domicilio en los barracones de los solteros.
antídoto contra el best
séller
..... Algo de predicador debe tener Rivera
Letelier para que las madres le pasen sus guaguas para que las toque y
viejos, jóvenes y medianos le pidan autógrafo. En su mayoría ingenuos
admiradores así nomás de escucharlo o de saber de él por oídas, faltos
de plata para comprar sus libros. Nadie mejor que él sabe de esto,
lector de Borges, Cortázar, Neruda, Juvencio Valle y tantos otros
grandes, a través de libros descuajaringados, de quinta o sexta mano.
Antes, claro, de que la reina Isabel empezara a inflarle el
bolsillo.
..... Resulta curioso que
entre su prologado analfabetismo y tan reciente intelectualismo
literario, no haya pasado por el best séller. En realidad, pasó y no
pasó. Fue con Papillón, esa novela del convicto en no se acuerda cuál
isla colonial francesa que leyó en tres días y tres noches fascinado,
sin poder dejarlo, pero que al llegar a la última página se dio cuenta
de que no le había dejado nada. Ahí mismo se inoculó el antídoto
contra la afición. "Como voy a perder tiempo en leseras, por
entretenidas que resulten, cuando ese hueco me lo lleno con Zurita,
por ejemplo, cuyos Anteparaíso y Purgatorio he
releído más de cienveces. Con Alfonso Calderón, con quien descubro
como se labora con las palabras de uso diario, con ese lenguaje de la
tribu, que a mi gusto no debemos olvidar nunca. O con Neruda y su
poesía telúrica, y la cosa de la metáfora" (esa misma que algunos
críticos, en Los trenes, le acusan de enarbolar
demasiado).
..... "La propia Diamela
Eltit, que tantos opinan que no se le entiende nada, a mí me parece
interesantísima. Lumpérica y Vaca sagrada, desde luego,
que si no me equivoco, es la historia de un feto urbano y sus
correrías. Una cuestión futurista pero del más alto y novísimo estilo
literario.
..... En este punto, mientras
él se toma su sacratísima Coca Cola, ya que desde la cuna que no tuvo
le metieron el tabú evangélico contra el tabaco y el alcohol, siento
que yo también debo ser evangélicamente honesta: le confieso que soy
una de las tupidas que no le entiende papa a la Diamela Eltit. A lo
que él me da una respuesta bien aleccionadora.
..... -A los creadores no hay que entenderlos,
sino gozarlos. La anécdota es lo de menos. Lo que importa es el placer
estético. Eso pienso que vale para todo. Hasta para los amantes. Hacer
el amor procurando entender el historial del contrincante -él o ella-
impide gozar plenamente de la creación amorosa que se está librando en
el lecho.
..... Lástima heberme
encontrado tan tardíamente con Hernán Rivera Letelier. ¡Por la flauta
que le habría sacado mejor partido a mi vida sentimental! Y como la
señorita Golondrina del Rosario en Fatamorgana, ¡cuántos despertares
de corazón de aleluya habría disfrutado! Y cuántos de esos despertares
con corazón de aleluya habría estampado en mi diario.