La tarde es lenta en la memoria y su barbarie
Las aves de rapiña vuelan alto entre las cumbres
y apacientan el rebaño.
No hay ideología que valga en mayo de 2008
solamente simulacros que remedan viejos sueños.
Allí discurríamos al principio en la plaza pública.
La indiferencia es una objeción a la razón pura:
un lema excéntrico
un burlesco edicto de trinchera
mientras la muchedumbre hacía barricadas en Nanterre
y ocupaba las calles en la Sorbona
Cómo imaginar de nuevo esa revuelta absurda
esa impúdica utopía
en un país boquiabierto
si los enanos se acorazan silenciosos en los monasterios.
Así se fragua la afonía en la capital del feudo
Y nuestras fábulas dónde quedaron
al caer la noche
Quiénes se apropiaron de mis murmuraciones
No hay ideología que valga en mayo de 2008
solamente simulacros que remedan viejos sueños.