El escritor se explayó sobre sus inicios como locutor, literato
y periodista –en ese orden, según enfatiza- sobre su compromiso
político y sobre su relación con Pablo Neruda,
un poeta que, dice, siempre fue muy generoso y cordial con la gente
joven. “Le gustaba escuchar a los demás”, recordó.
José Miguel Varas vivió y trabajó –como
locutor- en la ciudad de Praga, Checoslovaquia,
en la década del cincuenta. Allí, cuenta, vivió
en carne propia el rigor del “socialismo real” y experimentó
sus primeras desilusiones partidarias. Sin embargo, sólo dejó
el Partido Comunista –el Partido de toda una vida-, en 1990.
“Yo podía haberme retirado antes del Partido, pero intervino
Pinochet”, dice, recordando que ese núcleo político
se convirtió en la única posibilidad de enfrentar a
la dictadura y defender los intereses de los trabajadores.
De su compromiso político, su relación con Pablo Neruda,
su forma de escribir y de sus inicios en la locución, la literatura
y el Periodismo, conversó José Miguel Varas con los
conductores de Vuelan las Plumas, Vivian Lavín y Mario Valdovinos.
Varas recordó con cariño y agradecimiento su paso por
la Academia Literaria del Instituto Nacional, que dirigía Ernesto
Boero, bibliotecario y alma mater de los institutanos. En ella
no sólo se leían los trabajos de los incipientes escritores
adolescentes, sino que se participaba en actividades culturales tan
relevantes como las conferencias que dio allí el escritor Pablo
Neruda: Viaje al corazón de Quevedo y Viaje al corazón
del mundo. Justamente a las que no pudo asistir Varas estudiante.
Dice que la Academia le borró las timideces iniciales sobre
sus aprontes de literato. Sintió tan buena recepción
y tanta simpatía por sus escritos que hasta publicó
algunas parte de “Cahuín” –posteriormente su primer libro-
en el Boletín del Instituto. Su profesor de Castellano, César
Bunster, autor del tuvo mucho que ver también con su entrada
a las letras.
En la biblioteca del colegio también pudo leer a destajo y
empaparse de la belleza y valores de libros como Corazón
–“un libro que hasta hoy recuerdo, aunque nunca he releído”-
y los dos voluminosos tomos de Los Miserables.
Varas publicó su primer libro a los 18 años. “Tuve la
audacia de los tímidos”, dice a modo de explicación.
Se explayó también sobre su vinculación con la
izquierda, en pleno gobierno de Gabriel González Videla, una
salida natural, dice, frente a la represión y el caos reinante
y sus vivencias con el paso a la clandestinidad y luego el exilio
del poeta Pablo Neruda.
El lo vivió primero desde afuera, como periodista, y luego
como participante activo. Como miembro de la Alianza de Intelectuales
–fundada por Neruda en la década del 40 y que se había
formado para aglutinar el descontento contra el régimen- a
Varas le correspondería hacer el discurso de bienvenida al
poeta.
Desde
ese momento y después como periodista de la revista Vistazo
y de El Siglo, José Miguel Varas tendría muchas
veces contacto con el vate. Y lo recuerda siempre amable y generoso
y con la capacidad de escuchar a sus interlocutores.
Su libro Neruda Clandestino tiene mucho de reporteo y de entrevistas,
pero también mucho de novela, algo que hilvanó extrayendo
el hilo de las historias contadas por Neruda en diversas ocasiones,
como en su discurso en la ceremonia de entrega del Nobel y en muchas
otras oportunidades.
En este libro fue fundamental el aporte de Víctor Pey,
el catalán que organizó la vida clandestina y después
la huida de Neruda hacia Argentina. “Es un hombre increíble
y pienso escribir sobre él”, dijo Varas, anunciando así
algo de lo que se tiene entre manos, aparte de una novela de la que
no quiere dar indicios.
Una forma de comprobar la fecundidad y la vigencia de este escritor
que se define primero como un hombre de radio y luego como periodista
y literato, ya que ese fue su oficio inicial. Largos períodos
en Chile y el extranjero –también recordó su paso por
el emblemático Programa “Escucha Chile”,
de Radio Moscú”- haciendo desde comerciales hasta noticieros.
Y con su voz radiofónica nos regala una perla de época:
La pasión que él sentía al besarla, volverá
con el uso constante de Forhans..
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En el Programa Vuelan las Plumas se destacó el lanzamiento
de Obra Poética completa, de la escritora Teresa Calderón,
y nuevamente los niños recomendaron libros para regalar en
Navidad.
Tomás Villalba entregó su columna sobre Jazz y Cortázar.
Algunos auditores recibieron libros de regalo, por gentileza de Editorial
Random House&Mondadori.
PROXIMA INVITADA, EL MIERCOLES 24 DE DICIEMBRE: LA ESCRITORA ANA
MARIA GÜIRALDES.
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